LAS VEGAS -- Por segunda ocasión en su carrera, Rousimar Palhares ha sido suspendido por la comisión atlética del estado Nevada (NSAC por sus siglas en inglés) por mantener demasiado tiempo una sumisión.
La NSAC suspendió a Palhares (18-6) por dos años y lo multó con 40,000 dólares por no liberar una llave dekimura durante su exitosa defensa del título peso wélter de la World Series of Fighting (WSOF) en contra de Jake Shields el 1° de agosto. Antes de su audiencia disciplinaria, la WSOF ya había despojado a Palhares del título debido a la violación, aunque sigue bajo contrato.
En el 2010, la junta de control atlético de New Jersey suspendió a Palhares 90 días por mantener una llave al talón demasiado tiempo en el triunfo contra Tomasz Drwal en el UFC. UFC cortó a Palhares en el 2013, luego que ocurriera una situación similar contra Mike Pierce. El director ejecutivo de la comisión atlética del estado de California, Andy Foster, reprendió verbalmente a Palhares en otro caso en diciembre, pero no impuso ningún castigo.
Palhares, de 35 años de edad, participó en la audiencia a través de una conferencia telefónica. A través de su representante e intérprete Alex Davis, Palhares indicó que mantuvo detenido el hombro de Shields tanto tiempo porque el réferi Steve Mazzagatti no estaba en su campo de visión cuando intervino para detener la pelea. Palhares dijo que no estaba seguro de si era Shields quien tocaba su espalda o si era Mazzagatti.
La defensa no impresionó a la NSAC, ya que Mazzagatti testificó que había hablado con Palhares antes de la pelea y le advirtió que la comisión estaba preocupada sobre sus violaciones previas. Mazzagatti también señaló que le gritó a Palhares que se detuviera, lo que se confirmó en la repetición.
El réferi veterano John McCarthy, quien estuvo entre los presentes para la audiencia por otro asunto, testificó que en su opinión, Palhares giró el hombro aproximadamente 14 pulgadas después que Shields se rindiera inicialmente. McCarthy indicó que ese tipo de giro podría provocar grave daño a los ligamentos de Shields, de 36 años de edad. Shields dijo a la NSAC durante su audiencia el mes pasado que aún sentía los efectos negativos de la sumisión.
Shields, quien fue sentenciado a servicio comunitario por golpear a Palhares después del campanazo, también se quejó de repetidas punzadas al ojo durante la pelea, sin embargo, la NSAC no abordó ese tema.