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Nowitzki recibe el reconocimiento de Kobe tras tiro ganador

LOS ÁNGELES -- La balanza se decantó del lado de Dallas Mavericks ante Los Angeles Lakers (92-90) gracias a la veteranía de los texanos. Dirk Nowitzki le dio la victoria a los suyos a falta de dos segundos para el final con una canasta que sentenció a los angelinos. En la siguiente jugada, con el publico del Staples Center en pie y un Julius Randle (16 puntos y 11 rebotes) que fue incapaz de defender al pívot alemán en la posesión anterior, el balón acabó en las manos del jugador de segundo año, quien no pudo conectar el triple ganador.

"Creo que la defensa de Randle fue genial. No pudo hacer más. Lo que queríamos hacer con Dirk fue hacerle una doble marca. No llegamos a tiempo. Julius hizo un gran trabajo al empujarle siendo agresivo y obligándole a lanzar con dificultad. Es un Salón de la Fama, eso es lo que ha estado haciendo durante años. Hay que darle mucho crédito", afirmó Byron Scott tras la séptima derrota al hilo de su equipo (9-38).

En el momento en que Nowitzki anotó los dos puntos del triunfo, la inercia le llevó a casi chocarse con Kobe Bryant, ausente en la duela por molestias en el hombro y colocado justo detrás, en el banquillo. El cinco veces campeón de la NBA y coetáneo del europeo le dio una palmada de felicitación seguido de una mueca con la cara que fue respondida con otro toque en el brazo por parte de Nowitzki.

"No soy de los que provocan, pero una lo hacen, me lo paso bien. Kobe también. Como siempre digo, el es el Michael Jordan de nuestra generación. Es uno de los mejores y ha sido un honor el competir contra él prácticamente durante toda mi carrera. Le deseo lo mejor después del básquetbol", afirmó Nowitzki, que quedó muy satisfecho con la jugada ganadora. "La idea era meter la pelota. Toda la liga sabe que me gusta orientarme a la izquierda y él me encimó. Todo lo que tuve que hacer fue driblar y lanzar. Estoy contento porque entró", agregó.

El propio coach de los Mavericks, Rick Carlisle, alabó la jugada de su jugador franquicia.

"Hay que poner el balón en sus manos. Fue un lanzamiento genial. Sus tiempos fueron estupendos. Me di cuenta que cuando anotó le dio una palmadita a Kobe. Es uno de los jugadores más grandes de todos los tiempos, uno de los más efectivos sobre la bocina. Es increíble que siga haciéndolo así de bien", apuntó el coach.

Ante la ausencia de Kobe, faltó veteranía en los Lakers para concretar una cita en la que se mantuvieron pegados al marcador a pesar de las buenas actuaciones de José Juan Barea (18 puntos, cuatro asistencias y cuatro rebotes), Chandler Parsons (17 puntos, nueve rebotes y cuatro asistencias) y el propio Nowitzki (13 puntos y seis rebotes).

Otra de las jugadas clave fue la falta ofensiva que arañó Barea a Lou Williams (14 puntos y cuatro rebotes) en la jugada previa a la canasta de Nowitzki. La rapidez en su intento por frenar la avanzada del lagunero tuvo su recompensa.

"Es parte del juego, el árbitro la pitó a mi favor. Yo estaba tratando que no llegara a la pintura, así que después me empujó un poquito. Pasó muchas veces en el juego, ahí al final la pitaron a mi favor", agregó el armador boricua tras ser uno de los más destacados de su equipo. El internacional con Puerto Rico completó su mejor juego de las últimas dos semanas y su conexión con Nowitzki fue clave.

"Él es tremendo. Hicimos nuestro trabajo no fue nuestra mejor primera mitad pero yo creo que en la segunda defendimos bien. Mucho crédito al equipo de los Lakers, jugaron bien, pero al final nos mantuvimos cerca. Tenemos al veterano que puede terminar el juego", sostuvo.

Al concluir el encuentro los Mavericks marcharon al aeropuerto para viajar a San Francisco, donde jugarán ante Golden State Warriors este miércoles. Se trata del uno de los cuatro equipos que han conseguido vencer a los vigentes campeones de la NBA esta temporada. Los Lakers regresarán al Staples el jueves para medirse a los Chicago Bulls.