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Lillard responde como una superestrella con la temporada en la línea

PORTLAND, Ore. - Stephen Curry no jugó, perdiendo su cuarto partido consecutivo por un esguince en el ligamento medial colateral.

Pero todavía había un armador estrella en el Moda Center el sábado en la noche.

El contraparte de los Portland Trail Blazers Damian Lillard no estuvo en Toronto en el Juego de Estrellas de este año debido a una acumulación en el roster de la Conferencia Oeste, pero el dos veces estrella mostró ese nivel en el Juego 3. Lillard lideró el camino con el juego de más alta anotación de su carrera en playoffs mientras los Blazers superaron a los Golden State Warriors sin Curry 120-108, poniendo la serie 2-1.

Apoyado en las anotaciones y el manejo de balón de Lillard, Portland superó a Golden State con una eficiencia ofensiva de 122.7, lo más alto que los Warriors han permitido en toda la temporada. Golden State fue la cuarta mejor defensa de la NBA en puntos por posesión durante la temporada regular y la mejor en los playoffs previo a la acción del sábado.

Por la forma en que Golden State lo defendió, Lillard tomó dos enfoques diferentes durante el juego, ambas de ellas exitosas.

En la primera mitad, desafió los intentos de los Warriors de acorralarlo en el pick-and-roll. Cuando ellos le permitían mucho espacio aéreo para los triples saliendo del drible, -solo Curry y James Harden hicieron más de ese tipo que Lillard, de acuerdo al 'player tracking data'-, él de aprovechó.

Lillard anotó 14 puntos solo en el segundo cuarto y 25 en la primera mitad, incluyendo cinco triples, provocando que el entrenador de Golden State, Steve Kerr, alterara su estrategia defensiva. Acorralar a Lillard no era suficiente. Después del medio tiempo, los comenzaron a atrapar a Lillard para que tuviera la bola fuera de sus manos.

Desde la jugada de apertura del tercer percial, Lillard reconoció la diferencia en la defensa de los Warriors. En lugar de forzar las cosas, encontró a compañeros y los preparó para tiros abiertos. Lillard solo anotó cinco puntos en el periodo pero produjo siete asistencias mientras los Blazers superaban a Golden State 35-34.

"Ellos decidieron cerrarme el paso, e solo hice las jugadas correctas", dijoi Lillard. "Los chicos dieron el paso e hicieron los tiros.

Nadie dio el paso al frente más que el delantero Al-Farouq Aminu, quien casi no podía fallar.

Aminu acertó ocho de nueve intentos de campo, incluyendo cuatro triples, dos de ellas asistidas por Lillard.

"Hizo dos o tres jugadas cuando ellos convergieron en él y se la pasaron para un tiro", dijo el entrenador de Portland, Terry Stots. "Esas son jugadas que necesitamos que él haga, también, además de sus puntos. Él y CJ McCollum. El Jefe (Aminu) tuvo sus triples por su penetración".

Para el cuarto parcial, con los Blazers tratando de evitar que se le escapara una ventaja en la recta final como lo que les pasó en el Juego 2 en Oakland, Lillard se convirtió en anotador de nuevo. Anotó 10 puntos en el periodo, incluyendo triples consecutivos que alargaron la ventaja de Portland a 15 con 2:17 y extinguieron cualquier esperanzas de un regreso de Golden State.

El desempeño de Lillard no fue la única diferencia entre el Juego 3 del sábado y los primeros dos juegos de la serie, ambas victorias de los Warriors en casa. Después de que Portland cayera abajo temprano, permitiendo 18 puntos de primer cuarto de Klay Thompson, Stotts hizo un par de cambios en su rotación.

A la banca fueron el escolta abridor Maurice Harkless, quien batalló nuevamente con el dolor de cadera. Fue reemplazado por los mejores tiradores Allen Crabbe y Gerald Henderson. Los Blazers superaron a Golden State por 25 puntos en los 30 minutos de acción de Crabbe. Los problemas de faltas también forzaron a Stotts a usar a Ed Davis más en lugar del pívot titular Mason Plumlee, y Davis respondió con ocho puntos y 10 rebotes en 30 minutos.

Sin embargo, el cambio más importante puede haber sido traer a Lillard de vuelta después de un descanso más corto que lo usual en la primera mitad, a sugerencia de él mismo. Después de jugar la primera mitad completa, Lillard regresó con 92 segundos en el segundo, emparejándose con McCollum frente a un equipo de los Warriors con Thompson y Draymond Green en la banca.

Para el tiempo en que Kerr pudo llamar un tiempo fuera y regresar a Green a la duela, Portland había convertido una desventaja de seis puntos al final del primer cuarto en una delantera de un punto y Lillard estaba en camino a un monstruoso periodo.

"Nuestra temporada estaba en la línea", explicó Lillard. "Después del primer cuarto, vine al grupo de los coaches y les dije, 'pónganme de vuelta más temprano de lo que usualmente regreso'. A un minuto y medio en el segundo, él ya estaba llamando mi nombre".

Después de que Stotts llamara el nombre de Lillard, el anunciador interno del Moda Center no podía parar de mencionarlo, ya fuera por puntos o asistencias. El desempeño fue uno de los mejores en la historia de los Blazers. Lillard se convirtió en el primer jugador de Portland con un juego de 40-10 en una postemporada desde Clyde Drexler en los playoffs de 1992.

Fue innegablemente una actuación estelar, como Kerr confirmó luego del partido. Al ser cuestionado en la conferencia de prensa si Lillard había jugado como un All-Star, Kerr miró el box score que tenía a la mano en una manera teatral.

"Así que tuvo 40 puntos", dijo Kerr, como si examinara los números por primera vez. "Diez asistencias... Sí, jugó como un All-Star".