NBA Selecciones
Gonzalo Aguirregomezcorta, ESPN Digital 8y

La nota de Steve Kerr a fans de Warriors no surtió efecto

Los deseos de Steve Kerr fueron todo menos órdenes para los aficionados de Golden State Warriors. El coach del plantel urgió a los fans a que llegaran temprano a presenciar la decisiva cita ante Oklahoma City Thunder (3-1). Quiso controlar todos los aspectos posibles, no sólo del juego de sus pupilos, sino el ambiente del graderío; no lo logró. De cara a la introducción de los jugadores aún quedaban muchos asientos vacíos que se fueron llenando paulatinamente. Su objetivo era que desde el minuto uno de juego, la intensidad de su grupo y el de la tribuna estuvieran en consonancia.

“Es un partido importante. Necesitamos a nuestra afición apoyándonos. Sabemos que estarán ahí y el hecho de que el juego sea a las seis de la tarde hace que para muchos sea difícil llegar en hora. En los primeros dos partidos vimos que el público llegó muy tarde. Intenté recordarles que lo hicieran más temprano si era posible”, afirmó Kerr antes del comienzo de la cita.

El día anterior, el coach de los vigentes campeones instó a que los asistentes hicieran un sacrificio por su equipo por medio de una nota publicada en la cuenta de Twitter de la franquicia californiana y en otras redes sociales.

“Jugamos el partido que hay que ganar esta temporada. Estamos entusiasmados por estar de vuelta en terreno de los Warriors, jugando delante de la mejor afición de la NBA, y haremos todo lo posible por lograr el objetivo por el que llevamos luchando toda la temporada”, escribió. “su energía y su pasiónes el combustible de nuestro fuego, desde el comienzo a la bocina final. Por eso urgimos a la ‘Nación Dub’ a que hagan todo lo posible para llegar al Oracle Arena temprano, mucho antes del comienzo del partido”, rezó parte del mensaje.

Las puertas abrieron a las 4pm y en el parking del Oracle se podían ver decenas de autos con aficionados disfrutando del sol de la bahía de San Francisco con antelación suficiente.

“¡Nosotros somos buenos fans!”, exclamó uno de los asistentes tempraneros chela en mano.

Treinta minutos antes del partido, sobre las 5.30pm, el 90 por ciento de los asientos estaban vacíos. Los establecimientos del interior del estadio tenían mucho movimiento, algo más del habitual, sin embargo quedaba mucho para cumplir los deseos de Kerr. En el exterior, los autos se fueron acomodando en los espacios vacíos con algo de prisa, mientras que las complicaciones se notaban en demasía en las inmediaciones al recinto, donde el tráfico era abundante. Una marea humana aún cruzaba el puente proveniente de la estación del transporte público (BART) a falta de 20 minutos para el comienzo, y a la hora de la presentación de los jugadores, los vomitorios aún mostraban líneas de fans dirigiéndose a sus sillas.

Kerr no pudo evitar que el horario afectara a la llegada de los asistentes, sin embargo, la energía que se palpó cuando comenzó la cita fue la de siempre: absolutamente ensordecedora.

"Siempre estuvieron estupendos", incidió Kerr antes de la cita. "Esta noche queremos que sean lo más ruidosos posible. He vivido muchos momentos como estos en los playoffs y pueden cambiar el momentum de una serie. Un buen partido en casa motiva a los jugadores y pueden variar el curso de las cosas. Eso es lo que esperamos", sentenció.

^ Al Inicio ^