SAN ANTONIO - LeBron James, de los Cleveland Cavaliers, dijo que está “bien” después de sufrir un golpe en la espalda alta en el tercer cuarto que lo forzó a dejar del juego el lunes con su equipo debajo por 24 puntos ante los San Antonio Spurs.
“Estoy listo para el jueves (en Chicago)”, dijo James en el vestuario después del juego. “Me golpearon el cuello y la columna vertebral”.
James absorbió el golpe cuando estaba debajo de la canasta de parte del pívot David Lee, quien al atrapar un rebote con su codo contactó a la estrella de los Cavaliers. El golpe ocurrió cuando faltaban 28 segundos del tercer cuarto y James se tumbó en la duela y se retorció de dolor por unos cinco minutos.
James inmediatamente se acercó a la banca con la ayuda de sus compañeros de equipo, pero dejó la duela y se dirigió al vestuario cuando aproximadamente ocho minutos por jugar.
Lee dijo que “ni siquiera sabía” qué había golpeado a James después de pelear por un rebote.
Cuando Lee vio a James cerca del tablero anotador, dijo que pensaba que él se había torcido el tobillo o algo así.