El veterano receptor puertorriqueño fue clave en el triunfo de los Gigantes de San Francisco sobre los Cardenales de San Luis en sólo cinco juegos y llevarlos a la Serie Mundial por tercera ocasión en sus 45 años en el norte de California.

Benito ha sido inspiración y motivador de sus compañeros de equipo. Desde que los Gigantes ganaron el wild card, Benito ha estado señalando que San Francisco ganará la Serie Mundial. Hasta el momento, los Gigantes van en esa dirección y en gran medida gracias al veterano receptor.

Santiago conectó seis hits en 20 turnos para promedio de .300, anotó dos y empujó seis. Sus dos jonrones en el primer y el cuarto partido de la serie aseguraron dos de las cuatro victorias de los Gigantes.

La importancia de la ofensiva de Benito se debe al factor que el boricua batea detrás de Barry Bonds quien fue embasado en diez ocasiones en la serie. En varias ocasiones, Santiago hizo pagar a los Cardenales por no lanzarle a Bonds. La más importante fue en el Juego 4. Con el juego empatado a dos y dos outs en el octavo, Barry recibió la base intencional para lanzarle a Santiago. Con cuenta de 3-2, Benito conectó un jonrón sobre la verja del jardin izquierdo para darle el triunfo 4-2 a San Francisco.

Los Serafines de Anaheim, que se enfretarán a los Gigantes en la Serie Mundial a celebrarse totalmente en el estado de California, también cuenta con un arma secreta en el lanzador novato venezolano Francisco José Rodríguez, cuya experiencia en las mayores antes de esta postemporada se limita a quince días y 5.2 entradas.

En labor de relevo, Rodriguez ganó dos juegos en la serie contra Minnesota para mejorar su récord de 4-0 en la postemporada. Rodriguez participó en cuatro partidos lanzando 4.1 entradas, permitiendo sólo dos incogibles y ponchando a siete contrarios.

El joven de 20 años ha sido el lanzador ganador en cuatro de las siete victorias de los Serafines en este mes de octubre. Rodríguez ha lanzado en siete de los nueve partidos en octubre. En diez entradas lanzadas, ha permitido solo cuatro hits y dos carreras. Pero lo que ha dado mucho que hablar son sus 15 ponchados, estableciendo un récord para relevistas en la postemporada. Su recta y slider están maravillando a todos.

El reserva boricua Ramón Martínez ayudó a sellar el segundo triunfo de los Gigantes con una jugada de cuña perfecta que empujó la cuarta carrera de San Francisco en el noveno episodio.

El grupo de latinos integrantes del San Luis estuvo mas frío que caliente. El antesalista Miguel Cairo, jugando por el lesionado Scott Rolen, fue el más destacado al batear de 13-5 con dos empujadas. En ambas series, Cairo amasó 9 hits en 17 turnos para promedio de .529. Cairo, Albert Pujols y Eduardo Pérez conectaron jonrones en la serie.

Serie Mundial

Quince jugdores latinos participarán en la Serie Mundial de 2002 entre los Gigantes de San Francisco y los Serafines de Anaheim. De los 15, cuatro son boricuas, cuatro dominicanos, tres cubanos, dos venezolanos, y uno mexicano y otro de origen mexicano.

Tres de los lanzadores iniciadores son latinos: Russ Ortiz (14-10), de origen mexicano, y el cubano Livan Hernández (12-16), ambos de los Gigantes y el dominicano Ramón Ortíz (15-9) de los Serafines.

Los cuatro receptores en los rósters de la Serie Mundial son latinos. Ambos regulares son puertorriqueños: el veterano Benito Santiago de San Francisco y el juvenil Bengie Molina de Anaheim. Pero Bengie no es el único Molina detrás del plato. Su hermano José es su sustituto. El venezolano Yorvit Torrealba es el sustituto de Santiago.

A los 37 años, Benito es el más veterano de los latinos en la Serie Mundial del 2002. Tras 17 años en las mayores, carrera que pudo have terminado cuando Santiago sostuvo un aparatoso accidente automovilístico en Florida, Benito se encamina por derecho propio a su primera Serie Mundial.

Los Gigantes cuentan además con el lanzador relevista dominicano Félix Rodríguez, quien es parte integral de un magnífico bullpen. Entre sus reservas, San Francisco tiene al jugador de cuadro boricua, Ramón Martínez, y el antesalista dominicano Pedro Feliz. Ambos podrían ser utilizados como bateador designado en los partidos a celebrarse en Anaheim.