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Resumen 2015: Kansas City festejó tras una espera de 30 años

Los Reales de Kansas City celebraron en el 2015 la conquista de su segunda corona en una Serie Mundial, 30 años después de la primera.

Luego de haberse quedado cortos por poco ante los San Francisco Giants en el clásico de octubre del 2014, esta vez los Reales completaron la alegría de sus fanáticos al liquidar en cinco juegos a los Mets de Nueva York.

La campaña inició con los Nacionales de Washington y los Medias Rojas de Boston como principales candidatos a disputar el título de la Serie Mundial, pero ambos ni siquiera clasificaron para una de las postemporadas más emocionantes en mucho tiempo.

La temporada arrancó con nuevo comisionado, Rob Manfred, quien sustituyó al retirado Bud Selig, que estuvo al frente de las Grandes Ligas desde 1992, los primeros seis años de manera interina y de forma oficial a partir de 1998.

Y el 2015 trajo de vuelta al terreno a uno de los peloteros más talentosos, pero al mismo tiempo polémicos de todos los tiempos, Alex Rodríguez, quien había pasado toda la contienda anterior de castigo por consumo de esteroides.

A sus 39 años (cumplió 40 a mitad de la campaña) y tras una prolongada suspensión, A-Rod superó todas las expectativas, al disparar 33 cuadrangulares y llegar a 687 de por vida, colocándose en el cuarto lugar de todos los tiempos, sólo superado por Barry Bonds (762), Hank Aaron (755) y Babe Ruth (714).

Rodríguez fue pieza fundamental en la clasificación de los Yankees de Nueva York a la postemporada, cuando muy pocos apostaban a un equipo lleno de años y que iniciaba la era post Derek Jeter.

Contra todo pronóstico, los Yankees pasaron por ocasión 52 de su historia a los playoffs, aunque fueron eliminados en el juego de comodines por los increíbles Astros de Houston.

Increíbles, sí, porque después perder 416 de 648 juegos en las últimas cuatro temporadas, ya sus fanáticos se habían habituado a verlos siempre en el sótano divisional, tanto en sus últimos dos años en la Liga Nacional, como desde que pasaron a la Americana en el 2013.

Pero liderados por Dallas Keuchel, quien se insertó este 2015 definitivamente en la élite del pitcheo de Grandes Ligas y ganó el premio Cy Young, y por el puertorriqueño Carlos Correa, Novato del Año en el joven circuito, los Astros dieron un vuelco a la historia y avanzaron a la postemporada por primera vez desde que perdieron la Serie Mundial del 2015 ante los Medias Blancas de Chicago.

Tras dominar casi todo el tiempo el oeste de la Americana, pasaron como comodines tras ceder en las últimas semanas la cima divisional ante los Vigilantes de Texas, otro equipo que resurgió como ave Fénix.

Tanto Houston, como Texas, estrenaron directores en el 2015 y ambos fueron los más votados en el premio de Manager del Año, que lo recibió Jeff Bannister, de los Rangers, por delante de A.J. Hinch, de los Astros.

Nuevo dirigente también tuvieron los Cachorros de Chicago, que contrataron al experimentado Joe Maddon para manejar el inagotable talento joven con que cuenta en estos momentos el equipo.

Maddon, quien pasó sus nueve años anteriores al frente de los Tampa Bay Rays, le sacó pronto el fruto a sus jugadores y los llevó hasta los playoffs, al tiempo que fue reconocido como el mejor manager del viejo circuito.

Chicago acaparó tres galardones individuales al final de la temporada, pues además de Maddon, el antesalista Kris Bryant y el lanzador derecho Jake Arrieta se llevaron el Novato del Año y el Cy Young, respectivamente.

Pero el fantasma de la cabra Murphy volvió a rondar por el Wrigley Field y aunque los Cachorros mostraron ser un equipo de futuro, se quedaron una vez más en el camino hacia el clásico de octubre, tras ser barridos por los Mets en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.

Y precisamente Murphy, pero Daniel, no la cabra de Bill Sianis, fue quien hundió a los Cachorros.

El segunda base de los Mets, un bateador que promedia 11 jonrones cada 162 partidos, explotó ofensivamente en la postemporada, al disparar cuadrangulares en seis juegos seguidos, los dos últimos de la serie divisional ante los Dodgers de Los Angeles y en cada uno de los cuatro frente a Chicago.

Nueva York, que a mitad de temporada trataba de darle alcance a los Nacionales en la división Este de la Liga Nacional, consiguieron en canje de último minuto a Yoenis Céspedes de los Tigres de Detroit y el cubano le cambió por completo la cara al equipo.

Fue tal el despliegue ofensivo de Céspedes, que a pesar de jugar apenas 57 partidos con los Mets, su nombre sonó con fuerza como candidato al premio de Jugador Más Valioso de la Nacional, tras 102 juegos con los Tigres en la Americana.

Pero una vez más, la larga espera para la Serie Mundial, tras la barrida ante los Cachorros, enfrió los bates de Nueva York, que no pudieron ante unos inspiradísimos Reales dispuestos a no dejar escapar esta vez la corona.

Aunque en pitcheo los Mets se veían muy superiores a Kansas City, los abridores de los ahora campeones se comportaron a gran altura, a pesar de llegar en medio de profundas dudas, por la inconsistencia de los dominicanos, Johnny Cueto, Edinson Vólquez y Yordano Ventura.

Pero los Reales del 2015 fueron el vivo ejemplo de la máxima de Yogi Berra de que el juego no se acaba, hasta que se acaba.

En los cuatro juegos que ganaron en la Serie Mundial tuvieron que venir de atrás para borrar desventajas, incluidos el primero y quinto partidos de la contienda, en que lograron empatar en el noveno episodio para ganar en entradas extras.

A propósito, Berra, leyenda de los Yankees y de todo el béisbol, miembro del Salón de la Fama, dejó este mundo el 22 de septiembre, a los 90 años de edad.

Y para cerrar el 2015 con gran revuelo, una delegación de alto nivel de las Grandes Ligas, encabezada por su director de operaciones, Joe Torre, visitó Cuba para intentar normalizar las relaciones beisboleras, tal como Washington y La Habana han hecho con sus vínculos diplomáticos.

Polémica e histórica, la delegación incluyó al líder del sindicato de peloteros, Tony Clark, a estrellas como el venezolano Miguel Cabrera, Nelson Cruz y Clayton Kershaw y a los jugadores cubanos Jose Abreu, Yasiel Puig, Alexei Ramirez y Brayan Pena, hasta hace poco considerados traidores por el gobierno de la isla.

Si así cerró el 2015, es muy probable que veamos en el 2016 un panorama muy distinto, con una inclusión más amplia y abierta de los peloteros cubanos, que hasta 1960 constituían la principal fuente de jugadores extranjeros en las Ligas Mayores.