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Jorge Morejón, ESPN Digital 8y

José Fernández luce monstruoso en la lomita con los Marlins

Cuando el cubano Jose Fernández está saludable y en plenitud de forma, no tiene nada que envidiarle a Cleyton Kershaw o Jake Arrieta.

Fernández, el as de la rotación de los Marlins de Miami, se acerca cada vez más al nivel que exhibió en el 2013, cuando se llevó el premio de Novato del Año de la Liga Nacional y algunos colegas, quizás un tanto apresurados, ya lo señalaban como el mejor pitcher de las Mayores.

Lo cierto es que el cubano, en medio de rumores de conflictos con la gerencia de los Marlins, ha exhibido una profesionalidad y un nivel deportivo de excelencia, que mejora más y más en cada salida.

En los últimos siete días le tocó enfrentar dos veces a los Nacionales de Washington, líderes de la división Este del viejo circuito y dueños de una alineación de lujo, que incluye a toleteros de la talla de Bryce Harper, Ryan Zimmerman, Jayson Werth y Daniel Murphy.

Pero Fernández no creyó en nombres encumbrados y en total trabajó 13 episodios en las dos aperturas, en las que limitó a los Nacionales a ocho hits y dos carreras limpias, para efectividad de 1.38, en tanto les propinó 20 ponches.

El cubano es líder indiscutible del staff de pitcheo del equipo e incluso va más allá y es la cara de la franquicia miamense, aunque es vox populi que buscará nuevos aires cuando le llegue el momento de la agencia libre.

Dos veces ha rechazado ofertas de extensión contractual con los peces, lo cual alimenta los rumores de su futura partida y en medio de esas tensiones, el manager Don Mattingly le niega el honor de abrir el partido inaugural de la temporada, para echar más sal sobre la herida.

A pesar de todo, sale cada día a la lomita como un monstruo, a entregar cada gota de sudor en pos de la victoria, como profesional a carta cabal.

Y si Fernández es la cara de los Marlins, su compatriota Yoenis Céspedes es la de los Mets de Nueva York.

El hombre que le cambió el rostro al equipo a su llegada el 31 de julio pasado sigue castigando al pitcheo rival, cargando sobre sus hombros la ofensiva de los Mets.

Entre el domingo 15 y el sábado 21 de mayo, Céspedes disparó siete imparables en 19 turnos, para average de .368, con cinco carreras anotadas y cuatro impulsadas.

Como extrabases despachó tres bambinazos y tuvo promedio de slugging de .841. Con esos tres jonrones llegó a 14, cifra máxima en todas las Grandes Ligas, empatado con el cubanoboricua Nolan Arenado, de los Rockies Colorado.

Sobresaliente estuvo también el dominicano Gregory Polanco, de los Pittsburgh Pirates.

Polanco ligó diez cohetes en 27 ocasiones, para average de .370, con siete anotadas y cuatro remolcadas.

El quisqueyano tuvo hits de todas dimensiones: cuatro sencillos, cuatro dobletes, un triple y un cuadrangular, para slugging de .679.

Y el venezolano Eugenio Suárez, a pesar de su gozar de una gran semana en cuanto a cifras de hits y average, bateó con suma oportunidad.

En 31 turnos ligó ocho hits, para average de .258, pero impulsó ocho carreras y anotó cinco.

Siete de las tres anotaciones que empujó lo hizo con tres cuadrangulares, que siempre encontraron hombres en circulación.

Frío, frío

El venezolano Gerardo Parra, de los Rockies, prácticamente no existió en la caja de bateo.

Parra se fue de 21-1, para un anémico average de .048, en tanto abanicó en siete ocasiones, una de cada tres veces al bate.

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