Echándole un vistazo a la tabla de posiciones, encontramos al tope de la misma a los Cachorros de Chicago, algo que no es sorpresa. Después de todo, se supone que es ahí donde ellos estuvieran, y a este punto han cumplido con las expectativas. Sin embargo, ellos no están ahí por sí solos. A poca distancia podemos encontrar a los Vigilantes de Texas, y los Gigantes de San Francisco, quienes se alejan en la cima del Oeste de la Liga Nacional. Los Gigantes también se suponía que fuesen buenos -- ¿por qué otra razón un equipo firmaría a Johnny Cueto? - pero con este equipo se siente como si estuviesen luciendo por encima de las expectativas. Se suponía que esta fuera una contienda más cerrada. Y, quién sabe, quizás termine siéndolo, pero los Gigantes han tenido hasta ahora un agarre firme en la cima de la división y los Dodgers de Los Angeles han decepcionado en algo. Por otro lado, los Gigantes han engranado, y han podido superar sus propios problemas de lesiones. Un equipo no tiene el record que han logrado los Gigantes sin superar algo de adversidad, y el éxito en este caso ha sido de todo el equipo. ¿Cómo han llegado los Gigantes a este punto? Todo comienza con Cueto y Madison Bumgarner. Al tener a cueto, pocos equipos pueden competir con este dúo de los Gigantes. El bullpen ha flaqueado en algunos momentos, pero en gran parte del tiempo ha logrado los outs necesarios. La defensiva del equipo ha sido sobresaliente - el equipo anda primero en todo el béisbol en carreras salvadas por la defensiva, y se ubica segundo en rating máximo de zona. Pero no podemos pasar por alto la alineación. No es exactamente una colección de toleteros, a pesar que el estadio no ayuda a mantener los números de poder. Pero ningún equipo controla la zona como lo hacen los Gigantes. Ellos llevan un ritmo histórico en esa categoría. Esto no es algo que tiene que ser complicado. No puede ser mucho más complicado que ponches y boletos, ¿verdad? Esos son indicadores útiles, así que aquí les presento una gráfica de los 30 equipos, con los boletos y los ponches expresados en tasas, por apariciones en el plato. Noten que solo les echo a una mirada a los bateadores sin incluir lanzadores, para balancear las ligas. Además, de todos modos los lanzadores no son bateador -- ¿correcto, Sr. Bumgarner? Adelante: Claramente los Gigantes sobresalen en este grupo. Ellos no son el único equipo que sobresale, pero sí son los únicos que sobresalen en este modo en particular. Una forma de interpretar esto: De todos los equipos que reciben una buena cantidad de boletos, los Gigantes son los menos que se ponchan. Otra interpretación: De todos los equipos que logran una buena cantidad de contacto, los Gigantes son los que más reciben boletos. De nuevo, algo simple: muchos boletos, pocos ponches. Eso no es todo lo que hay en cuanto a bateo, pero si es una gran parte de ello. Una estadística frecuentemente citada para los lanzadores es el porcentaje de ponches a boletos, la que se obtiene restando la tasa de boletos de la tasa de ponches. Mientras más alto sea el número, mejor. No es propenso a la extravagancia que se puede encontrar con la tasa de ponches a boletos. Para los bateadores, simplemente se le da la vuelta, mirando al porcentaje de BB-K. De nuevo, de esta forma, mientras más alto el número, mejor es. Los Gigantes, como equipo, lideran el béisbol en porcentaje de BB-K. Ellos lideran por más de 2 puntos porcentuales. La diferencia entre los Gigantes y el segundo lugar es mayor que la diferencia entre el segundo y sexto puesto. Le eché una mirada a cómo los Gigantes compararían en términos históricos. Aquí se complica un poco más el asunto, porque los patrones han cambiado a través de los años y décadas. Como saben las tasas de ponches han aumentado, pero también las tasas de boletos. Así que tuve que tener cuidado al tomar en cuenta las eras. Me fui hasta el 1910, y por cada temporada individual de un equipo calculé el porcentaje de BB-K. Entonces le eche un vistazo al promedio de BB-K de la liga de cada año, y calculé la diferencia por cada equipo. He aquí los resultantes primeros 10, en porcentaje de BB-K mejores que el promedio: No tengo que decirles que no ha pasado ni la mitad de esta temporada. Así que los números se van a seguir moviendo, y quizás los Gigantes terminen con un retroceso. Pero por ahora, ahí están, en segundo puesto, detrás de otro equipo de los Gigantes que tenía a un cierto personaje llamado Barry Bonds, quien torció los números de la misma forma que llegó a torcer el deporte. Estos Gigantes solo son superados por un equipo que tenía en sus filas a un fenómeno. Esto cubre más de un siglo de béisbol. En un sentido, la brecha entre los Gigantes y el tercer lugar es pequeña, pero un punto porcentual es bastante importante. El décimo lugar no quedó en el tercer puesto por menos de un punto. Los Gigantes han sido algo extraordinario. Es algo que corre a lo largo de caso todo el roster. Esta tabla es parecida a la que aparece arriba, excepto que esta solo muestra a los Gigantes de este año y que han tenido por lo menos 50 turnos al bate. Hay 13 jugadores en ella. De esos, 11 tienen porcentaje de BB-K que son mejor que el promedio de la liga. Los 11 tienen ventaja de por lo menos 3 puntos porcentuales, así que no es como que alguno de ellos esté de casualidad donde está. Trevor Brown se queda corto, pero él es un receptor sustituto. Y Jarrett Parker se queda corto, pero es un jardinero sustituto y reemplazo en caso de lesiones. No es difícil afirmar que los Gigantes tienen un tipo de juego particular. Por supuesto, a ellos les encanta la defensa. Y no es como que no les importe el poder. Pero son fanáticos del contacto, y especialmente el contacto mezclado con la disciplina. Si alguien tiene buen ojo y control en su bate, es altamente probable que sea razonablemente productivo. Así que estos Gigantes no tienen espacios débiles reales. Las lesiones no ayudan. Nunca lo hacen. Los Gigantes no están presentando la alineación que quisieran tener, así que ahora mismo no es enteramente una alineación que refleje totalmente sus preferencias. Pero aun así han logrado encontrar la manera de dar lo mejor de sí, en lo que vuelven sus jugadores lesionados. Matt Duffy volverá, junto con su zona de control. Al igual que Hunter Pence, con su particular zona de control. Cuando los Gigantes estén donde quieren estar, difícilmente concedan un turno al bate. E incluso ahora que están un poco disminuidos, los Gigantes siguen siendo formidables. Este es un equipo con muchas fortalezas, pero cuando se trata de controlar la zona, pocos lo pueden hacer mejor que ellos.
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