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Diferencias entre ganadores y perdedores

Federer, un ejemplo de un deportista ganador EFE

BRISTOL -- ¿Cuántas veces nos hemos preguntado esto?

Después de más de 20 años de experiencia profesional me atrevo a contestar que esta se encuentra en la actitud y forma en que los deportistas tratan de resolver sus asuntos en el campo y no necesariamente en el talento físico.

Siempre he creído que la gran mayoría de los atletas pueden hacer lo mismo que sus rivales, por supuesto que hay excepciones, y por eso creo que la gran diferencia está en la cabeza de cada jugador.

En el tenis Roger Federer es considerado por muchos como el mejor de la historia, su enorme talento es indudable, pero lo que marca la diferencia, al menos a mi entender es su inteligencia, y equilibrio emocional.

La presencia de un buen entrenador siempre ayudará a los deportistas, el ya desaparecido maestro Bill Walsh (NFL), solía decir que 60 minutos no son suficientes para que un equipo gane, pero si es suficiente tiempo para que el equipo que juego mejor gane. Se refería a que la preparación y la actitud eran tan importantes o mas que el simple talento. Igualmente decía que un sistema nunca debe reducir el juego al punto en que culpe al jugador por fallar en su intento por superar al rival.

En resuman, estas son algunas ideas que también he encontrado que marcan la diferencia entre los ganadores y los perdedores:

Cuando un ganador comete un error, dice: Me equivoqué y aprende la lección.
Cuando un perdedor comete un error, dice: No fue mi culpa y se la hecha a otros.

Un ganador sabe que la adversidad es el mejor de los maestros.
Un perdedor se siente una víctima ante la adversidad.

Un ganador sabe que el resultado de las cosas depende de él.
Un perdedor cree que la mala suerte sí existe.

Un ganador trabaja muy fuerte y se genera más tiempo para sí mismo.
Un perdedor esta siempre muy ocupado y no tiene tiempo ni para los suyos.

Un ganador enfrenta los retos uno a uno.
Un perdedor le da vueltas y no se atreve a intentarlo.

Un ganador se compromete, da su palabra y la cumple.
Un perdedor hace promesas, no asegura nada y cuando falla solo se justifica.

Un ganador se sabe que es bueno, pero quiere ser mejor.
Un perdedor se dice: No soy tan malo como lo es mucha otra gente.

Un ganador escucha, comprende y responde.
Un perdedor habla más de lo que escucha.

Un ganador respeta a aquellos que saben más que él y trata de aprender algo de ellos.
Un perdedor se resiste con aquellos que saben más que él y solo se fija en sus defectos.

Un ganador se siente responsable por algo más que su trabajo solamente.
Un perdedor no se compromete y siempre dice, yo sólo hago mi trabajo.

Un ganador dice, debe haber una mejor forma de hacerlo.

Un perdedor dice, ésta es la manera en que siempre lo hemos hecho.

Un ganador es parte de la solución.
Un perdedor es parte del problema.

Un ganador se fija en cómo se ve la pared en su totalidad.
Un perdedor se fija en el ladrillo que le toca colocar.

Un ganador sabe cuándo ser terco.

Un perdedor es terco cuando no debe serlo.

¿De qué lado estás?