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Un año para el despegue

Con Juan Espil en la sesión de fotos... fue realmente muy divertido Prensa Weber Bahía

BAHÍA BLANCA -- Ya metido a pleno en la inercia de la competicion, puedo decir que esta
Liga Nacional va a ser, sin dudas, muy pareja. Hay una gran cantidad de
equipos con aspiraciones a estar arriba y, por lo tanto, cada fin de semana
van a verse resultados inesperados. Eso hará que la compentencia adquiera
un interés apasionante entre los seguidores del básquet.

También el hecho de que el lockout en la NBA nos prive de ver el mejor básquet del mundo es una oportunidad para potenciar nuestro producto. Todos
soñamos con ver a nuestros NBA jugando entre nosotros. Al fin y al
cabo, ¿por qué no? Son argentinos, de acá salieron. Sería algo genial para
todos.

A propósito de eso, contar con Manu Ginóbili en nuestros entrenamientos es
fantástico. No sólo porque sube el nivel de la práctica instantáneamente con su
sola presencia, sino tambien por lo que representa como motivación para
todos, especialmente los más chicos. Es una experiencia que podrán contar a
sus hijos: que jugaron con Manu.

De hecho, estuvo presente en la sesión de fotos del equipo. Se hizo en el
Casanova, con gran despliegue de cámaras y escenografías. La idea es recoger
material en fotos e imágenes para las futuras pantallas LED que vestirán el
estadio en poco tiempo y -a su vez- entregar buen material a la prensa.

Uno de los objetivos de este año en Weber Bahía Estudiantes es hacer mucho hincapié en la
parte audiovisual. Convertir el partido en un espectáculo más
integral. Gran iluminación, música, una buena estética en el estadio... y darle
protagonismo a la gente que viene a la cancha mediante juegos e
interacción en las pantallas. Que sea una experiencia para los sentidos y
un espectáculo para todos. Hombres, pero también mujeres y chicos.

Hoy toca Peñarol, el bicampeón. Esperamos que la cancha esté llena y ojalá
sea un gran partido de básquet, una gran fiesta.