NUEVA YORK -- Si los Knicks continúan recibiendo días seguidos de descanso entre los juegos, tal vez termien con marca de 82-0.
El calendario ha sido benévolo con el equipo. Con los tres días de descanso tras el último encuentro el pasado viernes ante los Mavericks de Dallas –que terminó en un triunfo 104-94-, los Knicks suman en la presente y joven temporada un par de ocasiones que reciben esa cantidad de fechas libres.
Esto obviamente ha benificiado al conjunto neoyorquino. La sesiones de prácticas se realizan sin mucha presión y ese descanso ha sido importante para una escuadra que cuenta con una gran camada de jugadores veteranos ya entrados en edad como Jason Kidd, Rasheed Wallace, Pablo Prigioni y Marcus Camby.
"Creo que es bueno para nosotros", dijo el entrenador Mike Woodson. "Nos da la oportunidad de practicar y enseñar y añadir cosas aquí y allá y conseguir chicos más acorde a lo que realmente queremos hacer".
El equipo también ha sacado provecho al hecho de que de los cuatro cotejos celebrados, tres han sido en su casa, siendo el único en la ruta ante losPhiladelphia 76ers.
Este martes pisarán la cancha del Magic de Orlando y apenas será su cuatro partido en 11 días, Los Knickerbockers tratarán de aprovechar esta situación antes de dar inicio a una gira y un calendario que se les pondrá apretado hasta diciembre.
Pero esa felicidad podría cambiar en los próximos días. Debido a que la fecha de distribución para el juego Nets es 26 de noviembre, los Knicks no tendrán dos días de descanso entre los juegos desde ahora y hasta la primera semana de diciembre.
De hecho, durante los próximos 20 días, Nueva York jugará 12 partidos, ocho de ellos en la carretera y tres juegos de seguidos. Luego de Orlando siguen paradas en San Antonio (Spurs) y Memphis (Grizzlies) durante cuatro días.
Así que el 82-0 es muy poco probable. Pero si se mira el lado amable un 5-0 no esta nada mal. De hecho, no lo han logrado en décadas, y eso está dentro de su alcance.