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En blanco y negro

Un año muy bueno, y con buenas previsiones a futuro, para Juventus AP

ROMA -- Una de las características de los hinchas, de los de fútbol en particular, es la de ver las cosas en "blanco y negro", con un extremismo tal que no hay coloraciones posibles ni escalas de grises: algo es bueno o es malo. Punto.

Por fueron muchos los juventinos que este año clasificaron la salida de Juventus ante Bayern como un papelón inaceptable, como una verdadera tragedia que no logran ni entender ni aceptar.

Sin embargo Dennis, un querido amigo mio que es como un hermano para mi, quien es ingeniero informático y ama sólo dos cosas por arriba de la Vecchia Signora, su esposa y los números (y por la primera no garantizo...), me hizo un análisis muy frío y objetiva de la temporada juventina y realmente no puedo más que estar de acuerdo con su punto de vista.

En suma, él dijo que la temporada fue extraordinaria, porque se consolidó la fuerza del equipo, se ganó el título con cierto relax, se alcanzaron las semifinales de Copa Italia y los cuartos de la Champions, saliendo ante el actual finalista y favorito para el triunfo, y todo con un equipo bastante joven y que puede seguir dando mucho en los próximos años.

En otras palabras, para Dennis este año fue totalmente negro y blanco, o más bien bianconero, porque la Juve – perdón, su Juve – fue en absoluto el mejor equipo del Calcio: el que mostró el mejor juego, el que hizo más puntos, el que llegó más lejos en Europa. Un discurso inapelable. El Calcio este año fue innegablemente bianconero.
Yo intenté ir más a fondo de la cuestión, porque de todas maneras las consideraciones de mi amigo tranquilizan a un hincha, pero no dan explicaciones del porque pasaron algunas cosas y de lo que se puede (y debe) hacer para mejorar en futuro.

Como primera cosa, lo que llegué a pensar razonando con otro gran amigo juventino, Andrea, fue que sin dudas la "paliza" que le dio Bayern Münich a Barcelona le da otra dimensión a la derrota de los bianconeri contra los alemanes: en efecto, hay que saber respetar a los adversarios y la verdad es que el conjunto de Heynckes llegó en un estado ideal, jugando un fútbol exquisito y el equipo tiene esa seguridad y convicción que se obtienen cuando se alcanza por tercera vez en cuatro años la final de Champions.

Tras el 7 a 0 (entre ida y vuelta) sufrido por Barça, todo ese drama según el cual Juventus no tiene el nivel necesario para competir en Europa me pareció simplemente ridículo. Los bianconeri pueden jugársela con los mejores de Europa y terminaron por salir más porque se enfrentaron a una "máquina asesina", que por límites propios.

Claro, la inexperiencia de los bianconeri en esos dos encuentros fue evidente, pero al mismo tiempo es comprensible, porque ese es un factor que pesa mucho en los equipos grandes, aplastados por grandes presiones. Paradójicamente pesa más en los grandes que en los chicos, que hace justamente de la inexperiencia su factor sorpresa, como el Borussia Dortmund, capaz de sufrir más ante otro "chico" como Málaga que ante el poderoso Real Madrid.

Sin embargo, a pesar de las innegables "justificaciones", el equipo debe mejorar en dos puntos: la gestión y el talento. Es cierto que el cuadro de Conte jugó el mejor fútbol del campeonato y mostró cosas excelentes también en Champions, pero los esquemas, la mayor parte de las veces, substituyen la falta de individualidades (com enseña el gran Maestro del periodismo italiano, Mario Sconcerti).

Así, cuando el juego de conjunto no es suficiente para superar a otro cuadro igualmente o aún mejor organizado, las jugadas personales, la fantasía de los campeones y las gambetas son lo que marca la diferencia. En toda honestad, eso es lo que le está faltando a este cuadro, que precisa jugadores capaces de resolver solos un partido importante.

El otro punto, el de la gestión, es quizás aún más importante. El tema es que la Vecchia Signora, en un cierto sentido, quiso exagerar: el Scudetto lo tenía ganado hace rato y, en realidad, nunca estuvo en discusión, cómplice también la ausencia de un serio rival. Así, Conte debía concentrarse un poco más en la Champions y dejar que jugadores como Pirlo, Vidal y Barzagli descansaran un poco más.

En cambio, el equipo siguió empujando a toda máquina por todo el año, mermando sólo cuando las piernas no tenían más, y así el equipo terminó con nueve puntos de ventaja respecto al escolta (a pesar de haber sumado sólo un punto en las últimas dos fechas) pero le faltó energías en el momento más importante, cuando en siete días jugó dos veces contra Bayern.

De todas maneras, todos cometen errores y probablemente el técnico bianconero sabrá aprender de los suyos. Si así será, ayudado por un mercado que no precisa ser "faraónico" pero sólo inteligente (alcanzarían dos jugadores claves, cubriendo gran parte de los gastos con algunos jugadores que en este momento "sobran"), Juventus será nuevamente candidato al Scudetto pero también candidato para la Champions.

No hay que olvidarse por culpa de un doble 2 a 0 que el plantel es de enorme nivel, que cuenta con una defensa solidísima, con un gran juego de equipo, una delantera eficaz y una línea de volantes envidiable, una de las mejores en todo el mundo.

Hablando de los medio campistas, aprovecho para darle mi encomio a Arturo Vidal, máximo goleador del equipo, quien fue votado por los hinchas como mejor jugador bianconero de la temporada y que, en mi opinión y en la de casi todas las personas que conozco, fue en absoluto el mejor jugador de esta temporada en el Calcio.
Con una base como esta hace falta muy poco para pasar de ser grandes a ser leyendas. Pero ese poco hay que "adivinarlo" y además pagarlo bien caro.