MÉXICO -- En marzo de 2011 el entonces entrenador de las Chivas, José Luis Real, mandó un mensaje a Marco Fabián de la Mora. Dijo: "Que diga: Soy (jugador) de Selección, titular en Chivas, me echo la responsabilidad y deje de ser 'Marquito', la promesa". A casi dos años y medio de aquel comentario de Real, las cosas no han cambiado.
Real trataba de picar el orgullo de un jugador cuyo talento no se discute, cuyas condiciones futbolísticas son las necesarias para ser el líder de las Chivas, pero que por unas o por otras no lo ha sido. Falta de compromiso, disciplina y tener la cabeza puesta en todos lados menos en donde debe para el bien de su carrera deportiva.
El director deportivo Dennis Te Kloese dijo hace unos días, "si quieres ir a Europa, compórtate como tal", en clara alusión a Fabián. El lunes pasado Jorge Vergara dijo: "Fabián expresó su deseo de irse, creo que ha demostrado en la cancha que no tiene muchas ganas de estar en Chivas", después de que no estuvo ni en la banca en el partido contra Puebla.
Ya son suficientes mensajes, del entonces entrenador, del director deportivo, del dueño. ¿Qué más tiene que pasar? Si lo que tenía que ocurrir ha sido su negativa para irse a Qatar, bienvenido, porque creo que es la primera decisión correcta que toma en un buen rato.
Qatar representaba una alternativa muy atractiva en lo económico, pero muy poco favorable para su nivel competitivo. Ahora que ha decidido quedarse, que asuma la responsabilidad de ser el líder de las Chivas, que no es poca cosa. Que se comprometa, se discipline, y saque adelante a un equipo que está hundido en la mediocridad.
Cuesta trabajo encontrar jugadores que reúnan el talento de Marco Fabián. Eso no se da en macetas. Es muy triste ver que desperdicien los mejores años de su carrera por malas decisiones, o por quererse ir a jugar fuera a toda costa sin haberse consolidado en el medio local.
Espero firmemente que hoy se marque un punto de inflexión en la carrera de Marco Fabián y que deje de ser "Marquito". Condiciones tiene, falta que él quiera.