SAN LUIS -- Si algo hay que reconocerle a John Farrell desde que arrancó la postemporada es de que no tiene miedo para tomar decisiones, que ocasionalmente lucen criticables, especialmente ahora que estaba jugando partidos grandes en estadios de la Liga Nacional, donde la ausencia del bateador designado obliga a los managers a ser creativos con sus fichas de reemplazo.
El zurdo Jon Lester lanzó 7.2 entradas de una carrera, el receptor David Ross bateó un doble que impulsó la carrera ganadora y David Ortiz siguió reescribiendo los libros de récords de la postemporada para que los Medias Rojas de Boston derrotaran 3-1 a los Cardenales de San Luis, el lunes, en el quinto partido de la Serie Mundial de Grandes Ligas.
Los Medias Rojas se colocaron a un triunfo de su tercer campeonato en 10 años, cuando el clásico de otoño regresa al Fenway Park para el sexto partido el miércoles. De ser necesario, se jugaría el jueves un séptimo y decisivo choque entre los dos mejores conjuntos de ambas ligas mayores todo el año.
Las primeras seis entradas fueron de un gran duelo de pitcheo entre los estelares de ambos equipos. Lester permitió un cuadrangular a Matt Holliday en la cuarta entrada, luego de 16.1 innings sin permitir carreras en Series Mundiales, mientras que el derecho Adam Wainwright había limitado el daño de Boston a dobletes consecutivos de Dustion Pedroia y Ortiz en el primer acto.
Con dos corredores en posición anotadora, correspondía el turno de batear a Lester. El movimiento más común habría sido traer a Mike Napoli u otro bateador emergente para tratar de ampliar la ventaja y entonces recurrir al mejor bullpen de toda la postemporada. No usar a Napoli u otro emergente por el relevista Brandon Workman fue clave en la derrota de Boston en el tercer juego.
Farrell optó por sacrificar ofensiva, dejando batear a Lester, quien hasta ese momento solamente había hecho 69 pitcheos en seis entradas y aún tenía gasolina para acercar un poco más el puente con los relevista japoneses Junichi Tazawa y Koji Uehara. Lester falló con rodado al lanzador, pero Jacoby Ellsbury bateó sencillo que impulsó a Drew con la tercera carrera de los Medias Rojas.
"No. No. Incluso si el juego estuviera empatado", dijo Farrell sobre las posibilidades de haber mandado un bateador emergente por Lester en esa situación. "Con su conteo de lanzamientos y lo efectivo que estaba, queríamos que nos diera un inning más", agregó.
"Y no estaba pensando montar una jugada de toque y corrido suicida. Sabíamos que aún teníamos a Jacoby como seguro de vida", dijo Farrell.
Lester igualó su cantidad de entradas del primer partido, permitió cuatro hits y una carrera, no otorgó boletos y abanicó a siete. El zurdo mejoró su marca a 6-4 y efectividad de 2.11 en 13 apariciones de postemporada, incluyendo 11 aperturas, y tiene 3-0, 0.43 en tres salidas y 21 entradas en dos Series Mundiales.
"Creo que lo más importante es que el equipo jugó bien hasta el final, de inicio a fin. Nuestro hombre, aquí, a punto de entrar en el escenario (Ortiz), el tipo no creo que se ha ido de esta serie. Toco madera", dijo Lester luego del partido en una conferencia de prensa, junto a Ross y Ortiz.
"Pero realmente trato de no meter la pata. Sólo trate de mantener a mi equipo en el juego de pelota. Sabemos contra quien vamos. Nos van a lanzar difícil y su bullpen también es duro", dijo Lester. "Así que realmente traté de mantenernos en el juego de pelota lo mejor que pueda, y esperar que estos muchachos puedan anotar algunas carreras para mí", agregó.
En la octava entrada, Ortiz bateó su tercer hit de la noche -- el sexto en dos juegos y el 11mo. en 15 turnos en la serie, pero se enredó luego de cruzar la primera base y tuvo que ser atendido por el preparador físico del equipo.
Pese a que había anunciado que cuando tuviera ventaja en las últimas dos entradas, Napoli entraría a jugar por Ortiz en primera base, Farrell dejó a su gran estrella en el terreno, aunque lo sustituyó medio inning después.
"El está bien, ha corrido mucho recientemente, afortunadamente", dijo Farrell. "Quería mantenerlo hasta la octava entrada para mandar un doble cambio cuando viniera a lanzar Uehara", agregó.
"Todo está bien", dijo Ortiz, quien batea .733 en la serie y .360 en toda la postemporada. "Simplemente me estoy poniendo viejo", agregó.
Hablando de Uehara, Farrell convocó a su cerrador derecho con dos outs en la octava entrada y un corredor en segunda base para enfrentar al bateador emergente Matt Adams, un zurdo, en lugar de dejar al zurdo Lester para un último batedor. Nuevamente parecía que el dirigente se estaba jugando una ficha complicada.
Uehara abanicó a Adams para cerrar el octavo y luego retiró en fila a india a los tres que enfrentó en el noveno para agenciarse su segundo salvamento de la serie y el séptimo en siete oportunidades en la postemporada.
El lunes, Farrell se la jugó y ganó para acercarse a un triunfo de llevar a los Medias Rojas a coronarse campeones en su primer año al frente del conjunto.