MIAMI - ¿Está finalmente amaneciendo en Miami después de una larga noche?
La contratación del catcher Jarrod Saltalamacchia por tres años y 21 millones arroja un rayo de esperanza a los fanáticos de los Marlins de Miami, el peor equipo de la Liga Nacional.
Con Saltalamacchia, Miami resuelve uno de sus principales problemas, pues ni Rob Brantly, ni Jeff Mathis, tienen las herramientas para ser titulares de todos los días.
El ex catcher de los campeones Medias Rojas de Boston era lo mejor en su posición que quedaba disponible en el mercado, pues los Yankees de Nueva York se llevaron a Brian McCann, los Filis recontrataron al panameño Carlos Ruiz y los Azulejos de Toronto pactaron con el venezolano Dioner Navarro.
Minutos después de anunciarse el acuerdo entre los Marlins y Saltalamacchia, se supo que A.J. Pierzynski será su reemplazo en Boston para la próxima campaña.
Ahora la gerencia de Miami debe concentrarse en las esquinas del cuadro, pues se necesita a gritos una tercera base y Logan Morrison es quizás la mayor prueba de la mediocridad que ha dominado a los Marlins en los últimos tiempos.
Para suerte del equipo, Morrison despeirta interés en algunos equipos y no sería desafortunado salir de él, para poder buscar un inicialista que aporte un bate de respeto.
El dominicano Juan Uribe parece ser la mejor opción, por encima del cubano Yunieski Betancourt, quien cada vez parece menos un jugador con nivel de Grandes Ligas.
No es que Uribe sea el gran toletero, pero es quizás el pelotero más entregado al juego y capaz de batear con oportunidad con hombres en bases, algo que le faltó a los Marlins en este 2013 para el olvido.
Para custodiar la inicial, muchos en Miami piden al cubano Kendrys Morales, por lo que podría significar para la comunidad local como gancho para llevar público al Marlins Park.
Sin embargo, Morales, si bien es un bateador muy por encima del promedio, capaz de conectar a ambos lados del plato, es bastante limitado defensivamente hablando, sobre todo después de la devastadora lesión que lo dejó fuera gran parte del 2010 y todo el 2011.
Kendrys cada vez más apunta a ser un bateador designado a tiempo completo y para eso debería buscar un espacio en algún equipo de la Liga Americana.
Quizás la respuesta sea, como se ha mencionado varias veces en las últimas semanas, Mark Trumbo, quien no será elegible para la agencia libre hasta el 2017.
¿Abrirá Jeffrey Loria el bolsillo un poco más para ir tras Uribe y Trumbo?
Con Loria nunca se sabe. Incluso, el que Saltalamacchia haya pactado por tres años no quiere decir que vaya a estar en Miami hasta el 2016.
Perfectamente, si las cosas no salen como él quisiera, podría ser canjeado más adelante por un par de prospectos desconocidos.
Si no, pregúntenle a Jose Reyes, a Mark Buehrle y a muchos más. Y es que a esta altura, ya nadie quiere darle a Loria el beneficio de la duda.