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Selección Mexicana: ¿Soñar, confiar, esperar, rezar...?

Con tan pocos días para el silbatazo inicial de Brasil 2014, los mensajes son totalmente contradictorios: unos recurren a cuestiones esotéricas para pronosticar el futuro de México en el Mundial y otros mantienen una postura más conservadora y acorde a los resultados de la última época. Pero en un futbol donde los intereses comerciales y los deportivos juegan en la misma cancha, las confusiones están por todas partes. ¿Cuál es el porvenir de México en Brasil 2014? Seguramente lo sabremos hasta el día el silbatazo inicial en Natal, el 13 de julio.

LOS ANGELES, CA,- Hugo Sánchez dice que hay que "cruzar los dedos y encender las veladoras" y Miguel Herrera asegura que escoger a los 23 jugadores de la lista definitiva le significa un gran reto. Entre opiniones disímbolas, mensajes contradictorios, una alarmante desesperanza y al mismo tiempo una sombría ilusión, el futbol mexicano ha empezado "a vivir" su propio Mundial.

La realidad, tajante, es que quedan muy pocos días por delante para el silbatazo inicial de Brasil 2014.

En un futbol tan apegado a los intereses y donde la operación comercial convive de manera muy cercana a las cuestiones deportivas, las confusiones y el peligro que significan esas confusiones están por todas partes. Para decirlo en un sentido más figurado: el producto está ya empaquetado, listo para ir al gran evento, pero nadie sabe si terminará funcionando de la manera adecuada.

Aquellos que "lo venden", lo elevan, como siempre, hasta dimensiones exorbitantes: "Esta bien. Se puede, se puede lograr. Lo único que necesita es de su apoyo, confianza y amor", es el mensaje de los vendedores que en el fondo, muy en el fondo, saben que hay un "disclaimer" (una advertencia) alarmante sobre el funcionamiento del producto en los niveles de competencia a los que se enfrentara durante el verano. Lo que se alejan un poco de esos intereses, los que no son totalmente parte del negocio, mantienen una postura mucho más consciente de la realidad que vivió el equipo en la última época y recurren a cuestiones de orden esotéricas para encontrar parte de la realidad que se viene en el futuro. La selección mexicana de futbol es un producto. Hoy está más "en manos" de los "vendedores" que en la del propio entrenador y el problema es que el mensaje de los vendedores no tiene nada que ver con una competencia deportiva.

El entrenador nacional dice que tiene ciertos problemas al escoger a los 23 que deben ir al Mundial. Esas declaraciones puede tener dos vertientes: la primera es que sobra el talento y que la competencia es interna es realmente muy cerrada entre los futbolistas. Y la otra, totalmente contraria, indicaría que Herrera no sabe por dónde escoger porque lo que no sobra en México y en Europa son futbolistas mexicanos con talento. Insisto: los resultados de los últimos meses se inclinan por la segunda hipótesis.

Miguel Herrera sabe, por otra parte, que en el momento que vive el futbol y la selección mexicana, el nombre de equis o de tal jugador tampoco marca una gran diferencia. Lo que realmente puede ayudarle a buscar una faceta más competitiva a partir del día 13 de junio ++cuando debuta ante Camerún++ es la confección de un equipo, pero tampoco le sobra el tiempo y las oportunidades para lograr eso.

Entre el escenario dramático que propone Hugo Sánchez, la cierta confianza que impregna Miguel Herrera y el mensaje ++muchas veces falso++ de los "vendedores", México está ya jugando su propio Mundial. El problema sigue siendo encontrar la verdad entre tantas contradicciones.

@Faitelson_ESPN