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Ventura y Reales sin nada que perder

KANSAS CITY -- Los Gigantes de San Francisco están a un triunfo de coronarse campeones de Grandes Ligas, pero los Reales de Kansas City lucen calmados por regresar a casa y felices de estar jugando pelota en el sexto juego de la Serie Mundial.

El martes, el lanzallamas dominicano Yordano Ventura buscará alargar la Serie Mundial a un partido decisivo, cuando San Francisco visita a Kansas City en el Kauffman Stadium. El veterano Jake Peavy abrirá por los Gigantes, que dominan 3-2 el clásico de otoño.

La única vez en que se vieron en semejante situación, en 1985, los Reales derrotaron en partidos consecutivos en casa a sus vecinos Cardenales de San Luis para conquistar el único campeonato de su historia. San Francisco, que busca su tercer título en cinco años, no pudo retener la ventaja en las dos ocasiones anteriores en que dominaban 3-2 (1924 y 2002) en una final de las ligas mayores.

Pero incluso si no se repite ese comportamiento, Kansas City no tiene ninguna razón para amedrentarse. Después de todo, su avance a la Serie Mundial era uno de los acontecimientos menos probables cuando arrancó la temporada en abril y terminar jugando en casa podría tener algún impacto favorable en el resto de la serie.

"Esa es una buena pregunta. Créanme, estando en esta situación, prefiero estar aquí, con nuestros fanáticos", dijo el manager Ned Yost durante las prácticas del lunes. "Pienso que la ventaja de la casa es agradable. Aprecio el esfuerzo que hicieron John Farrell y la Liga Americana en el Juego de Estrellas para darnos esta oportunidad. Claro que será más divertido jugar el sexto juego aquí que en San Francisco, de eso pueden estar seguros", agregó.

Ventura (5.1 IL, 2 CL, 0 BB, 2 K) superó a Peavy (5.0 IL, 4 CL, 2 BB, 1 K) en el juego 2, también en Kauffman Stadium, cuando Kansas City ganó 7-2 para empatar la serie 1-1. En ese encuentro, realizó 87 pitcheos (55 strikes, 15 cantados por el árbitro y cinco en swings fallados por bateadores).

El derecho de 23 años ganó 14 juegos y tuvo efectividad de 3.20 en la serie regular y tiene 4.42 en cuatro partidos en los playoffs. Peavy es un veterano de 13 temporadas con un Premio Cy Young y un anillo de campeón, pero que no ha sido muy exitoso en la postemporada, donde tiene efectividad de 7.05 en ocho aperturas.

"Solamente espero que salga y sea él mismo. Si hace, nos mantendrá en el juego. Desde que llegó nos ha dado la oportunidad de ganar y sin él, no estaríamos aquí", dijo el manager Bruce Bochy sobre Peavy, quien tuvo marca de 6-4 y efectividad de 2.17 en 12 salidas desde que llegó a San Francisco desde Boston.

En las 63 ocasiones anteriores que un equipo estuvo en ventaja 3-2 en la Serie Mundial, el 66.3% (42 veces) terminó ganando el título, pero nueve de los últimos 10 que tenían la ventaja perdieron los últimos dos choques y el campeonato.

"No tengo presión, mi meta es lanzar strikes y llegar lejos en el juego", dijo Ventura, quien en su primera temporada en Grandes Ligas ayudó a los Reales a jugar en la postemporada por primera vez en 29 años.

"No tengo nada de presión. Simplemente tengo que poner la bola en juego y el que ejecute mejor, ganará el partido", dijo. "Voy a dar todo lo que tenga, perdimos dos juegos consecutivos, pero no hemos perdido la serie. Vamos a seguir jugando pelota. Nosotros estamos disfrutando el momento, no sabemos cuando volveremos a la Serie Mundial", agregó.

Kansas City estaba en ventaja 2-1, pero la ofensiva de San Francisco hizo erupción con 16 hits en el juego 4, a lo que siguió una blanqueada del asombroso zurdo Madison Bumgarner. Ahora en casa, Yost podrá regresar su alineación acostumbrada con Billy Butler de bateador designado y el japonés Nori Aoki en el jardín derecho.

"No he decidido si Mouss [el antesalista Mike Moustakas] batea de noveno, pero regresaré con los hombres que me trajeron hasta aquí", dijo Yost.

Esa es la verdad pura y simple. San Francisco está en ventaja, pero Kansas City no luce preocupado, ahora que la Serie Mundial regresó a casa. Después de todo, nadie daba medio dólar a favor de la posibilidad de que los Reales representaran a la Liga Americana en el clásico de otoño.