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Arizona está lista para el Super Bowl XLIX

SCOTTSDALE -- Arrancamos con una nueva cobertura de Super Bowl, en esta ocasión la edición XLIX, desde Arizona, donde la mesa ya está puesta para conocer al campeón de la National Football League.

Las dos tramas más importantes a seguir, al menos en el inicio de la semana, están claras:

¿Podrán los Seahawks convertirse en el más reciente campeón defensor que consigue refrendar exitosamente su título del año previo? La última vez que un equipo logró esta hazaña, se trató del equipo que ahora enfrenta Seattle, New England, al conquistar las ediciones XXXVIII y XXXIX. Los Seahawks poseen una defensiva de época, una cultura ganadora, y un ataque terrestre demoledor. De acuerdo al tackle defensivo de los Patriots, Vince Wilfork, el estelar de Seattle, Marshawn Lynch, es el mejor corredor de la NFL. Wilfork no es el único que lo piensa.

La mayoría de los ingredientes parecen estar allí para que Seattle consiga el segundo anillo en la historia de la franquicia, siempre y cuando Russell Wilson no juegue como el pasador que portó el N° 3 en el Juego de Campeonato de la NFC ante los Green Bay Packers. Wilson destaca por una actitud calmada y ecuánime, aún ante la adversidad, pero los Patriots no lo van a perdonar si vuelve tirar intercepciones múltiples.

¿Cuánto afectará a New England el escándalo de los balones con baja presión de aire? La NFL prácticamente dejó en claro que no habrá resolución a la investigación en torno a los balones inflados por debajo de lo mandado por la liga durante el Juego de Campeonato de la AFC, antes de disputarse el Super Bowl XLIX. Eso significa que la cuestión sobre la culpabilidad o no de New England en torno al caso se vuelve, por el momento, tema secundario.

Lo primordial ahora será ver cómo responde el equipo ante el escándalo. Bill Belichick suele ser un especialista a la hora de vender a sus pupilos la idea de que están solos contra el mundo. El actual incidente puede servir como catalizador para la plantilla, siempre y cuando esté bien encauzado el mensaje. De otro modo, las interminables preguntas acerca de lo mismo que enfrentarán los jugadores de New England a lo largo de la semana pueden convertirse en una distracción que termine afectando a la hora de saltar al emparrillado.

Por ahora, todo está en veremos. Por lo pronto, tenemos una semana completa para ver cómo cada una de estas tramas cobra vida propia, crecen, y quizás mueran, para dar vida a otros temas discusión. No se pierdan la mejor cobertura del gran juego --y de toda la semana previa-- por las plataformas de ESPN, la casa del Super Bowl XLIX.