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Latinos en la nueva era del box

Canelo Álvarez luce como la principal figura joven de la nueva generación Tom Hogan/Hoganphotos/Golden Boy

Cuando la obra Floyd Mayweather Jr. contra Manny Pacquiao expire comenzará una nueva era el boxeo mundial.

Confieso que desconozco sí será tras la batalla del 2 de mayo o si habrá tiempo para otra multimillonaria escena. Pero tengo claro que en el momento en que sus nombres dejen de vincularse habrá concluido simbólicamente la primera etapa del Arte de Fistiana en el siglo XXI.

Después de la Pelea del Siglo (y su posible revancha en caso de perder Floyd) nada tienen que demostrar ni uno ni otro. Ambos ya tienen ganado su espacio en el Salón de la Fama del Boxeo. Tampoco se avizoran nombres que puedan hacerles frente y su edad, gústenos o no, comienza a ser factor en el declive de sus respectivas carreras.

A nuevos púgiles les tocará la responsabilidad de llenar el vacío que dejarán estos genios de los puños. Los aspirantes iniciarán una escalada en pos de plataformas donde inmortalizarse, tal cual hicieron en su momento el extrovertido norteamericano y el hoy devoto filipino.

Por tradición y calidad varios de los probables candidatos pertenecen a la armada latinoamericana.

A juzgar por juventud e interés mediático no hay postulante más sólido que el mexicano Saúl 'Canelo' Álvarez. No puedo asegurar lo mismo en lo concerniente a calidad boxística, ahí retrocede varios peldaños en la fila.

Si el cobrizo tapatío de 24 años hubiera sido un "pica piedras" sus adeptos le tendrían mayor estima. Pero su carrera prefabricada, amparada en la benevolencia de promotores, medios y jueces, es el principal borrón en su abultado resumé.

De cualquier modo, Canelo tiene amplio margen de mejora. Solo el tiempo demostrará si tiene la madera para convertirse en leyenda.

Otros guerreros aztecas, fieles a la tradición, han enseñado virtudes para pugnar por ese espacio que en breve quedará vacante. Sus trayectorias no están en el centro de los reflectores, sin embargo, existe consenso en que tienen habilidades y herramientas para estar muy por encima de la media. Ellos son Abner Mares, Leo Santa Cruz, Óscar Valdez, Gilberto Ramírez, Juan Francisco Estrada, Carlos Cuadras, Francisco Rodríguez, Diego de la Hoya e Iván Morales.

Si Canelo es el "mimado", el nicaragüense Román 'Chocolatito' González es el superdotado que ha labrado su camino sin aparentes ayudas. Apenas con 27 años ha sido campeón en peso mínimo, minimosca y mosca, además de que su dominio ha sido incuestionable.

Desafortunadamente para Chocolatito resulta improbable adquirir estatus de súper estrella, toda vez que las divisiones pequeñas no generan tanta atención como las categorías medianas y pesadas.

De Puerto Rico, cuna de grandes leyendas, me atrevo a asegurar que hay consenso en quién será el heredero de Miguel Cotto. Su nombre es Félix Verdejo y con solo 21 almanaques ha demostrado que sabe boxear a sus rivales, posee pegada -- 12 KOs en 16 peleas -- y que no le tiembla las piernas ni el corazón cuando es exigido en el toma y daca.

Esos ingredientes le abre las puertas de par en par al natural de San Juan, quien en un periodo relativamente breve debe estar disputando su primera faja mundial.

De Argentina sobresale Brian Castaño, un joven de 25 años con experiencia en el amateurismo y que luce sólido en el campo profesional, al punto que algunos especialistas de aquella nación lo consideran como el mayor proyecto del boxeo argentino. Algunas fuentes aseguran que ya tiene un contrato firmado con Top Rank.

También destaca Jesús Cuellar (28 años), cuya mudada a Oxnard con su campamento está rindiendo frutos. De hecho, ya es campeón interino pluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y apuntó a su palmarés una categórica victoria, por la vía del cloroformo, sobre el otrora ilustre Juan Manuel López.

A la espera de que otros púgiles cubanos decidan dar el salto al profesionalismo, Neslan Machado y Marcos Forestal parecen ser los nombres con mayores opciones. Forestal apenas ha peleado una vez como proefesional pero su pedigrí amateur es sobresaliente. Machado está más hecho con nueve victorias, siete de ellas por nocaut.

Sin embargo, ambos y los que vendrán tendrán que renunciar, al menos parcialmente, al estilo elusivo de la escuela cubana porque el boxeo es un negocio...y si tú no vendes, estás fuera. Además deberán mejorar en lo referente a proyección mediática y firmar con verdaderos promotores no "compadres" de la tierra que desconocen totalmente cómo funciona el mundillo del box. Solo así serán tomados en cuenta.

Talento hay, depende de ellos.