Es un movimiento pequeño, pero astuto. Las Grandes Ligas anunciaron que sincronizarán todos los partidos en el día final de la temporada el 4 de octubre, para que comiencen a las 3 p.m. ET.
Si bién esto le podría añadir un poco de drama al día final con partidos simultáneos entre equipos batallando por un banderín divisional o un comodín, lo mejor de todo es que hace más justo el día final. No habrá ventaja para nadie al tener una hora de inicio más tardía.
Aquí les presento un ejemplo de la pasada temporada. Los Cardenales de San Luis tenían ventaja de un juego sobre los Piratas de Pittsburgh al entrar al día final. Si bien las posibilidades de los Piratas de ganar la división eran escasas - tenían que vencer a los Rojos, esperar a que los Diamondbacks vencieran a los Cardenales y entonces vencer a los Pájaros rojos en un juego de desempate - los Piratas decidieron ir con todo a tratar de ganar la división y evitar el juego entre comodines, donde sabían que se medirían a Madison Bumgarner.
Los Piratas abrieron con Gerrit Cole, su mejor abridor, en vez de dejarlo para el juego de comodines. Lanzó muy bien: Una carrera y 12 ponches en siete entradas. Desafortunadamente, Johnny Cueto también lució muy bien y los Rojos anotaron tres carreras en la octava entrada ante el bullpen de Pittsburgh para ganar 4-1.
Mientras tanto, los Cardenales estaban en Arizona, planificando poner en la lomita a Adam Wainwright en caso que ganaran los Piratas. Pero su partido comenzaba más tarde, por lo que supieron el resultado del juego Pittsburgh-Cincinnati antes que comenzara el suyo, y por ende pudieron cambiar de abridor y no utilizaron a Wainwright, por lo que él pudo abrir el primer partido de la Serie Divisional con bastante descanso. Si todos los partidos hubiesen comenzado a la misma hora, los Cardenales habrían tenido que utilizar a Wainwright. (Su Serie Divisional comenzó un viernes, así que si hubiese abierto ese partido de final de temporada, habría tenido sus cuatro días de descanso normales, pero en el peor de los escenarios, habría sido utilizado en el partido final de la temporada regular y no hubiese estado disponible para un juego de desempate o el juego entre comodines).
El potencial de más emociones también se puede ver con lo que le pasó a Seattle y Oakland. Los Atléticos tenían ventaja de un juego sobre los Marineros, pero su juego en Texas comenzó una hora más temprano que el juego de Seattle en casa. Los Atléticos aventajaban a los Vigilantes 2-0 para el momento en que Félix Hernández se trepó al montículo, así que mientras hubo algunas entradas de observación mientras estaba terminando el partido entre Oakland-Texas, ese partido terminó en el medio del juego Anaheim-Seattle, y los Marineros ya estaban eliminados en la quinta entrada mientras el Rey Félix estaba lanzando una blanqueada. Habría habido más suspenso y más miradas al pizarrón si esos partidos hubiesen comenzado a la misma hora.
Así que, buena movida MLB. Ahora solo necesitamos que el día final tenga algunas contiendas sin decidir.