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¿Plan elegante para olvidar una era turbulenta?

Casi nadie, ni siquiera MLB, recuerda la marca de 73 HR de Barry Bonds en el 2001. Tom Hauck/Getty Images

La posibilidad de disminuir la temporada de 162 a 154 juegos es real, y está en el tapete en las oficinas de MLB.

Rob Manfred, comisionado de MLB, insiste que no es una mala idea dado lo exigente del calendario y pareciera también que los peloteros y su sindicato, la MLBPA, coinciden con ese argumento. El problema ahora es resolver como modificar la estructura del negocio para adaptarlo y absorber la pérdida de 8 encuentros.

En ese debate no se ha mencionado algo que me llama la atención.

Por muchos años había una hazaña que acaparaba la atención del fanático, desde el más furibundo al más casual, en cada temporada: los 61 cuadrangulares de Roger Maris. La estadística de Maris era tan conocida que incluso todo el mundo recordaba que la había conseguido en 1961.

Con menos equipos que pasaban a la postemporada, la posibilidad de lograr ese récord se convirtió en un arma de mercadeo excelente de MLB. En cada amenaza, los fanáticos llenaban estadios, o formaban parte de la audiencia de TV, solo para ser testigos de excepción, a pesar que el juego en sí les importaba muy poco.

En 1998, Mark McGwire y Sammy Sosa rescataron económicamente a MLB a punta de palos pero a cambio de la más preciada joya de la corona de mercadotecnia. Bueno, y poco tiempo más tarde Barry Bonds se proclamó como nuevo rey pero ya no con la atención mundial sino con la mirada un poco pérdida de fanáticos incrédulos.

De hecho, ¿Recuerda usted cuál es la marca de jonrones en una temporada de Bonds y en que año la consiguió?... no vaya a Google ni a Internet. Le doy unos minutos y mientras tanto le recuerdo que de haber hecho esa interrogante antes de 1998 la respuesta era dada en un segundo.

Barry Bonds conectó 73 jonrones en 2001 y esa es la nueva meta, pero ya MLB no la usa para nada. Eso está enterrado en un baúl arrimado y lleno de polvo en el departamento de mercadeo.

Ahora bien, si MLB es exitoso en el plan de recortar la temporada a 154 juegos entonces los récords alcanzados en 162 encuentros pasarían a la historia, serían parte de una era particular con sus cosas buenas y malas. Al mismo tiempo, el regreso al calendario que existía antes de 1961, en la Liga Americana, y 1962, en la Liga Nacional, implicaría resucitar muchas marcas pero principalmente los 60 cuadrangulares de Babe Ruth. Así es, como escucharon... cuál Lazaro, Ruth está a punto de levantarse entre los muertos.

A mi eso me parece demasiado interesante. Es una manera elegante de desligarse de años turbulentos donde existió complicidad de todas las partes a una nueva etapa enmarcada en los llamados 'años de oro' del beisbol. De un plumazo, Bonds, McGwire, Sosa y hasta el mismo Maris (con las disculpas necesarias) pasarían a otro plano y le darían paso, nada más y nada menos, que a Babe Ruth. Magistral señor Manfred, magistral.

Ya veremos que pasa y si MLB puede terminar de convencer a sus patrocinadores y empresas de TV. La pérdida de 8 juegos puede ser compensada por otros factores, incluyendo una mayor atención de personas que muy pocas veces ven beisbol pero que ahora lo harían si alguien tiene el coraje y talento para amenazar los 60 jonrones casi sagrados de Babe Ruth.