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¿Le está llegando la hora a David Ortiz?

BALTIMORE -- Lo último que necesita David Ortiz es que sus problemas en el plato queden retratados en una transmisión nacional de TV.

Justo la semana pasada, Ortiz tuvo que contestar preguntas sobre si estaba "acabado", respondiendo con un civismo que él mismo reconoció posteriormente que requirió un esfuerzo concertado.

Pero con oportunidad de alejar los reflectores de Ortiz luego de tres victorias al hilo en el fin de semana y cifras dobles en hits en cada uno de sus pasados cuatro juegos, los Medias Rojas fueron blanqueados el martes 1-0 por Baltimore, conectando apenas cinco hits. Esa fue la 23ª ocasión en esta temporada en la que los Medias Rojas fueron maniatados a dos carreras o menos, lo que, por supuesto, ha tenido un profundo impacto en el record del equipo. Los Medias Rojas juegan para 5-18 en dichos juegos al llegar a la transmisión de nuestro Miércoles de Grandes Ligas por ESPN.

Y aunque la noche del martes reflejó un fallo colectivo - los bateadores de Boston se fueron de 8-0 con corredores en posición de anotar y siguen en el puesto 28 en todo el béisbol en esas circunstancias -- Ortiz, debido a su eminencia, se convirtió en el objeto de mayor escrutinio.

Ortiz conectó un hit en rodado en su primer turno el martes en la noche ante el abridor de los Orioles Miguel González, luego conectó línea de out al jardín izquierdo central con dos en base para cerrar la tercera entrada. Luego conectó rodado a la intermedia ante el zurdo de los Orioles T.J. McFarland abriendo la sexta entrada y en la octava, de nuevo con dos en base, se ponchó sin tirarle ante el cerrador zurdo de los Orioles Zach Britton, quien luego procedió a ponchar a Mike Napoli para preservar la ventaja de Baltimore.

Ortiz había tenido éxito anteriormente ante McFarland (2-en-4) y Britton (5-en-13, incluyendo un cuadrangular), pero sus labores ante los zurdos en esta temporada han rendido pocos frutos. Aunque ha tenido números consistentes con anteriores actuaciones ante los derechos (promedio de .278, porcentaje de embase de .387, OPS de .879), ante los zurdos ha logrado solo 8 hits en 70 turnos (.114) en esta campaña, lo que ha bajado sus números generales a un lugar poco conocido: .219/.297/.372/.670.

El miércoles en la noche los Orioles tendrán en el montículo a un zurdo, Wei-Yin Chen. En la pasada temporada Ortiz lo masacró, al conectarle seis hits en 11 turnos, pero en este año no ha podido descifrarlo en cinco oportunidades. El viernes pasado, ante el zurdo de Oakland Scott Kazmir, Farrell eligió sentar a Ortiz y utilizar a Hanley Ramírez como designado. Pero la disponibilidad de Ramírez para el miércoles es incierta; conectó un foul que rebotó en su rodilla izquierda, y aunque las pruebas de rayos x salieron negativas, él indicó que le molesta bastante.

En tiempos recientes, no ha importado mucho con cuál mano pitchea el lanzador que se enfrenta a Ortiz. No ha conectado un cuadrangular en sus últimos 17 encuentros, la segunda vez en esta temporada que ha pasado tanto tiempo sin poner una pelota en las sillas. En comparación, Giancarlo Stanton y Albert Pujols han conectado nueve cuadrangulares cada uno en ese periodo, y 252 bateadores han conectado por lo menos un bambinazo desde que Ortiz llevó lejos la pelota el 19 de mayo.

En general, desde esa fecha, Ortiz batea para apenas .169 (11-en-65) en 17 juegos, con cinco remolcadas. El jugador que estableció el estándar para los bateadores designados durante la mayor parte de la década llega al partido del miércoles ubicado en los últimos puestos entre los bateadores designados calificados en promedio de bateo, remolcadas y anotadas.

"Pienso que los chicos lo van a atacar un poco más", dijo el manager John Farrell el martes, cuando se le preguntó si ha detectado alguna diferencia en la forma en que los lanzadores se estaban midiendo a Ortiz. "Hemos visto además algunos turnos, no solo en los de David, donde no están cayendo tanto en contentos favorables a los bateadores. Pero sí, pienso que a los chicos les gusta atacar más y ponerlo más en modo de hacer swing, en vez de que vean lanzamientos y traten de estar un poco más en una zona de strike definida".

Es sorprendente escuchar que alguien diga que Ortiz es el bateador al que los equipos están atacando más, porque en el pasado, el modo era lo contrario, evitar a Ortiz lo más posible. ¿Es eso una consecuencia de no haberse podido calentar hasta el momento?

"Ciertamente es algo que tiene que ver con ello", dijo Farrell. "Uno comienza a mirar nuestra alineación -no es algo diferente a lo que nosotros hacemos al mirar la alineación de los Orioles. ¿A quién atacarías basado en cómo están luciendo en la actualidad? Esto tiene que ver mucho con eso".

Ortiz se vistió y se fue rápidamente del camerino luego de la derrota del martes, pero de forma consistente ha rechazado decir o implicar que a sus 39 años está cerca del final de su carrera, una que podría tener como conclusión una placa en el Salón de la Fama.

"¿Qué te puedo decir?", dijo Ortiz en respuesta a la pregunta de la semana pasada de si estaba 'acabado'. "Mucha gente decía eso de mí hace seis años, y todavía sigo aquí. Todavía no sé cuándo me voy a retirar. Y pienso que nadie lo ha pensado tampoco.

"Si sucede, a quien le importa, yo solo soy un jugador que llega y sale. A todos les llega la hora en algún momento. No creo que ese sea mi problema. Yo seguiré tratando como normalmente lo hago".