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¿Es ya Buster Posey uno de los mejores de todos los tiempos?

Estaba conduciendo el otro día, escuchando MLB Network Radio y esperando el derretimiento de la nieve hacia una primavera temprana, cuando un oyente llamo y preguntó, "¿Acaso Buster Posey ya es uno de los mejores receptores de todos los tiempos?"

El anfitrión del programa respondió con un "Sí... pero" y apuntó a Joe Mauer, quien tenía tres cetros de bateo a los 26 años y promediaba de por vida .323 con un premio JMV y tres Guantes de Oro a los 30 años, como ejemplo de cómo la carrera de un jugador podía caer en barrena a medida que pasaban sus mejores años. Mauer, quien fue movido a la primera base en el 2014 luego de sufrir una conmoción cerebral que terminó su temporada del 2013 en agosto, no ha bateado bien en las pasadas dos temporadas. Las conversaciones sobre las posibilidades de que Mauer, quien en algún momento era visto como candidato seguro a Cooperstown, llegue al Salón de la Fama, se han reducido considerablemente.

Posey está en el pico de sus habilidades ahora mismo. Es claramente el mejor receptor en el deporte, dado el declive de Yadier Molina, y él ya tiene en su poder tres anillos de Serie Mundial con los Gigantes de San Francisco. En una era en la que los bateadores sacrifican promedio por poder a expensas de poncharse más, Posey es una máquina de batear de la vieja escuela que reparte líneas por todos lados y que consiguió más boletos que ponches en el 2015. He aquí dos gráficas que son testimonio de su destreza en el plato:

El poder de dar jonrones de Posey es hacia su lado de halar, pero Posey ha aprendido a aprovechar las enormes dimensiones del jardín derecho del AT&T Park para conectar más hits y dobles hacia esa área. Échenle un ojo a la gráfica del promedio de bateo. Tiene un pequeño hueco en la parte interior baja; por lo demás, cubre el plato completo tan bien como cualquier otro bateador en el béisbol.

De vuelta a la pregunta original. Posey entra a su temporada de 29 años. ¿Dónde se ubica entre los mejores? Según una estadística, ciertamente Posey va por el camino de un potencial miembro del Salón de la Fama. He aquí los totales de WAR de por vida hasta los 28 años para los receptores que están en el Salón de la Fama y que jugaron luego de la Segunda Guerra Mundial:

Johnny Bench: 54.4

Gary Carter: 41.0

Mike Piazza: 31.0

Buster Posey: 28.8

Yogi Berra: 27.1

Carlton Fisk: 21.9

Roy Campanella: 10.2

Sí, el Salón de la Fama solo ha añadido seis receptores en seis décadas; los votantes son difíciles. Campanella es un caso especial. No llegó a las mayores hasta los 26 años debido a la barrera del color, pero Posey ha superado a Berra y Fisk, al menos en esta estadística. Sin embargo, tengan en mente que estos no son los jugadores mejor valorados en este periodo; Iván Rodríguez se ubica segundo en WAR, mientras Joe Torre y Ted Simmons se ubican cuarto y quinto, respectivamente. Joe Mauer está sexto, con WAR de 34.6 hasta los 28 años, así que a pesar de lo bueno que ha sido Posey, Mauer fue quizás mejor.

Sin embargo, los números de Posey son impresionantes, considerando que los mismos han llegado en básicamente cinco temporadas de partidos: su temporada parcial de novato, su segunda temporada acortada por lesiones, y las siguientes cuatro temporadas completas. Proyectando al futuro, ¿qué tiene que hacer Posey no solo para tener un pico del Salón de la Fama, sino una carrera digna de Cooperstown?

Los votantes han trazado una raya, o algo así. Los primeros seis receptores en WAR desde la Segunda Guerra Mundial son los cinco miembros del Salón de la Fama (menos Campanella) más Rodríguez. La brecha del No. 6 (Berra con WAR de 59.4) al No. 7 (Simmons con 50.1) es considerable.

Eso significa que Posey está corto por un WAR de 30 de los estándares del Salón de la Fama. En las pasadas cuatro temporadas, promedió un WAR de 5.9 por temporada, y en el 2015 tuvo uno de 6.1 in 2015. Una producción razonable podría ser 6.0, 5.5, 4.5 y 4.0 en los siguientes cuatro años. Eso es un WAR de 20 y lo elevaría a 48.8 hasta los 32 años... que es un WAR de 1 más que donde está ubicado Joe Mauer ahora mismo a esa edad. Parece ser que el caso del Salón de la Fama podría descansar en su habilidad de permanecer detrás del plato y poner números sólidos hasta por lo menos sus medianos 30 años.

Por supuesto, Posey tiene sus anillos para lucirlos, y esa es una parte importante de su legado. Desde la Segunda Guerra Mundial, solo Berra, con ocho, y John Roseboro, con tres, han ganado tantas Series Mundiales como receptor titular que Buster Posey (Jorge Posada estuvo detrás del plato para cuatro equipos campeones con los Yankees, pero Joe Girardi era el careta titular durante dos de esas cuatro temporadas).

Algunos han especulado que los Gigantes moverán eventualmente a Posey a la primera base, a fin de evitarle el riesgo de lesionarse como receptor y poder mantener su bate en la alineación. No creo que haya necesidad de hacer esa movida todavía. Primero que todo, Posey es enormemente valioso cuando está detrás del plato, con su producción ofensiva y su tremenda defensa. Ha estado por encima de la media de la liga en sacar corredores en intento de robo en cada temporada de su carrera, se ubica bien en cuanto a bloquear lanzamientos en el terreno, y ha guiado a sus lanzadores a tres campeonatos. ¿Por qué los Gigantes querrían sacar a ese jugador de esa posición? Ciertamente ellos están mejor con Posey detrás del plato y Brandon Belt en primera base que con Posey en primera base y Andrew Susac o alguien más recibiendo.

Los Gigantes también han sido bastante conservadores con la carga de trabajo de Posey. Él abrió como titular en apenas 109 y 103 partidos en la receptoría en las pasadas dos temporadas, mientras mezclaban más de 30 aperturas en la primera y algunas como bateador designado, así que terminó jugando 150 partidos en el 2015. Ese parece un modo inteligente de mantener frescas las piernas de Posey al entrar a sus 30 años. La mudanza a la primera base comenzará las comparaciones con Bench y su declive en sus tempranos 30 años, pero Bench estuvo detrás del plato en una enorme cantidad de partidos temprano en su carrera. Hasta los 28 años, él había abierto como titular en 1,175 partidos detrás del plato, en comparación con los 562 de Posey. Fisk, quien jugó hasta entrados los 40 años, había comenzado en apenas 492 juegos debido a las lesiones. Pienso que la relativa poca cantidad de juegos que ha recibido ayudará a Posey a envejecer mejor.

De todos modos, podemos especular sobre cuando los Gigantes van a hacer esa movida y si Posey va a terminar en Cooperstown. Pero por ahora, los Gigantes tienen la suerte de contar con el mejor receptor del béisbol apuntando a un cuarto título de Serie Mundial, y nosotros tenemos la suerte de poder observar lo haciendo lo suyo.