<
>

Medias Rojas deben asegurarse de darle una buena despedida a David Ortiz

A pesar de la producción constante de David Ortiz, los Medias Rojas tienen record de 5-9 en junio. AP Photo/Elise Amendola

BOSTON - La caricatura pegada a la pared encima del casillero de David Ortiz lo dice todo: "Me voy a pescar".

No importa que Ortiz lleve ritmo para romper el record de dobles en una temporada en MLB. Olvídense de que lleva 18 cuadrangulares este año, empatando con Willie McCovey, Frank Thomas y su compañero e ícono de los Medias Rojas de Boston Ted Williams en el puesto 19 de la lista de todos los tiempos. No presten atención al hecho de que, a sus 40 años, se mantiene como uno de los bateadores más temidos en el deporte.

Cuando acabe la temporada, Big Papi habrá terminad. Adiós, nos vemos, justo como los dos cuadrangulares que el quinto abridor de facto de los Medias Rojas Roenis Elías le permitió al jardinero derecho de los Marineros de Seattle Franklin Gutiérrez en las primeras tres entradas de la derrota 8-4 el viernes en la noche.

Y así, luego que los Medias Rojas perdieran por novena ocasión en sus últimos 14 juegos, y mientras el manager John Farrell tiene que arar en la tierra para encontrar brazos para llenar espacios en una rotació que no es lo suficientemente buena ni lo suficientemente profunda, vale la pena recordar el mandato puesto en vigor en enero por el principal dueño John Henry cuando se le enfrentó con la realidad de que esta sería la última temporada de Ortiz.

"Será un desastre - supongo que esa es una palabra fuerte, pero un gran desastre - sería terrible", dijo Henry, "si su carrera no termina con un viaje a la postemporada".

De hecho, sería un crimen contra el béisbol si la última oportunidad de Ortiz para llegar a una Serie Mundial queda socavada por el lamentablemente inadecuado pitcheo de los Medias Rojas.

Entre ellos, Clay Buchholz, Joe Kelly, Eduardo Rodriguez, Henry Owens, Sean O'Sullivan y ahora Elías han hecho 26 aperturas - casi el 40 por ciento de los partidos de los Medias Rojas - y han compilado efectividad de 7.18. El viernes en la noche fue el turno de Elías. Permitió siete carreras en cuatro entradas y fue enviado sin mayor demora a Triple A. Buchholz, enviado al bullpen hace menos de un mes, tendrá el miércoles en la noche otra oportunidad ante los Medias Blancas de Chicago, pero eso a duras penas se siente como una solución para los fanáticos de los Medias Rojas que han visto al inconsistente derecho en los pasados 10 años.

Y con cada batazo permitido por un abridor de los Medias Rojas, la necesidad de que el presidente de operaciones deportivas Dave Dombrowski adquiera ayuda importante en el pitcheo se hace más urgente aunque solo sea para evitar que la temporada se convierta en una racha de partidos al final de la temporada donde la única importancia sea la de rendir homenaje a Ortiz.

Los Medias Rojas necesitan un brazo confiable - más que meramente un cuarto o quinto abridor - para colocarlo detrás del as David Price y junto al nudillista en ascenso Steven Wright. Por más que Dombrowski quiera proteger su fértil sistema de fincas, es posible que tenga que sacrificar uno o dos cotizados prospectos para poder ponchar el boleto final de Ortiz a la postemporada.

"No solo se trata de la ofensiva", dijo Ortiz luego de conectar su HR 521 en la cuarta entrada ante el abridor de los Marineros Hisashi Iwakuma. "Es decir, no importa lo bien que tú bates si no puedes aguantar la ofensiva del contrario. Yo sé que nuestros lanzadores abridores están batallando. De eso es que se trata este juego en este momento. El juego se trata de poder lanzar bien, porque parece que nuestra ofensiva anda muy bien este año, mucho mejor que el año pasado. Si podemos conseguir ese buen pitcheo, vamos a poder mantenernos".

Los Medias Rojas se mantienen a un juego de distancia de la cima en el Este de la Liga Americana, un testamento a la fortaleza de la mejor ofensiva de la liga. Pero no siempre vas a poder compensar tu pitcheo con el bateo, y parece que eso finalmente le está pasando factura a los Medias Rojas, con marca de 5-9 en junio, con un calendario duro en la segunda mitad que los tendrá en la carretera en 44 de 75 juegos luego del receso del Juego de Estrellas.

"No ha sido un reflejo de los primeros dos meses que hemos tenido, especialmente con la más reciente estancia en casa donde nos hemos sentido como que este es un lugar muy cómodo para nosotros, un lugar emocionante para nosotros", dijo Farrell sobre la actuación de su equipo en junio. "Hemos tenido algunos partidos donde no hemos podido mantener el control desde el inicio. Hemos jugado desde atrás un poco aquí en los últimos tiempos".

En otras palabras, el pitcheo no ha estado ni cerca de ser aceptable. Necesita ser considerablemente mejor para poder evitar lo que el dueño de los Medias Rojas clasificaría como un desastre - que David Ortiz no llegue a la postemporada en su última temporada.