Las aguas no se calmaron antes, durante y después de la batalla, lo que es un hecho es que esa noche en la MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, a Miguel Cotto lo arrasó un 'Tornado de Tijuana'. Antonio Margarito le quitó aquel 26 de julio de 2008 el invicto y el cetro welter de la Asociación Mundial de Boxeo.
Las palabras de uno y otro calentaron el ambiente, una pelea espectacular desbordó las gradas del MGM y después la polémica rodeó el ambiente. A Antonio Margarito, en la siguiente pelea, le descubrieron un vendaje irregular que provocó muchas dudas en Cotto y los fanáticos sobre si habría usado algo similar ante 'Junito', aunque nunca le comprobaron nada.
A aquel combate, Margarito llegó como un peso welter sólido y grande con ya 12 peleas titulares, mientras que Cotto ya había tenido sus pruebas importantes en la categoría ante rivales como Zab Judah y Shane Mosley, pero sin ser un peso welter grande tras su paso exitoso en superligero.
Los dos combatieron el 12 de abril en Nueva Jersey y prácticamente ahí se garantizó el combate. La rivalidad entre mexicanos y boricuas electrizó el ambiente. Ya todo el mundo sabía que la capacidad de boxeo y excelentes combinaciones de Cotto podían ser dinamita para Margarito, pero a su favor el mexicano tenía la presión y el aguante, aptitudes que le habían provocado, por ejemplo, la evasión por años de Floyd Mayweather.
Tras los primeros seis episodios, justo como se esperaba, Cotto se mantuvo arriba en las tarjetas. Con su boxeo eficaz y solvente logró mantener a raya a Margarito pues los jueces le dieron cuatro rounds a favor por sólo dos para el tijuanense. Pero la segunda mitad del duelo fue diferente.
La presión de Margarito fue cada vez más evidente y el castigo de sus nudillos se reflejó cada vez más en el rostro de Cotto y sus movimientos en el ring. Para el octavo round ya había empatado la pelea Margarito en las tarjetas de dos jueces y la del tercer juez lo alcanzó dos rounds después.
Al final del décimo round, se vio la verdadera fuerza del 'Tornado' al tener cerca del nocaut a Cotto, pero lo libró. Sin embargo, ya en el undécimo episodio, los golpes de Margarito quebrantaron el corazón del boricua y tras enviarlo dos veces a la lona, obligó a que la esquina de Miguel, encabezado por su tío Evangelista Cotto, detuviera el pleito a los 2:05 del citado fatídico episodio.
Las tarjetas estaban 96-94 y 96-94 a favor de Margarito y con empate a 95 en una tercera.
La noche fue gloriosa para Margarito y el boxeo mexicano, y todos la disfrutaron mínimo el resto del año, pues en su siguiente duelo, en enero de 2009, Margarito fue noqueado por Shane Mosley, mientras que Cotto volvió a la carga en febrero, reconquistando el campeonato welter, pero de la Organización Mundial de Boxeo.