Keith Thurman y Danny García tienen en su poder la llave para que el peso Welter regrese a los primeros planos en este 2016. Tras la victoria de Thurman (campeón AMB) sobre Shawn Porter este pasado sábado en el Barklays Center de Brooklin, NY, aumentaron las expectativas para una factible unificación contra García (campeón CMB) y para la confirmada unificación a comienzos de septiembre entre Kell Brook (campeón FIB) y Jessie Vargas (campeón OMB).
Por fin las 147 libras parecen despertar de un ostracismo para el que contribuyeron varios factores, como el retiro de Floyd Mayweather o el de Manny Pacquiao, el apagón de Tim Bradley, la salida de escena del argentino Marcos Maidana (al parecer se retiró) y los trastornos del ex campeón Adrien Broner, que no parece dar la talla en esta división, entre otros.
El regreso de Keith Thurman es un ingrediente sólido, ya que el nacido en Clearwater, Florida, con siete defensas exitosas de su título, ya nadie duda de que es el hombre a vencer y el que está llamado a dominar la categoría. Esa es su aspiración, no obstante, hay varias cosas que lo impiden y ello es lo que comienza a darle brillo a la categoría.
Thurman deberá enfrentar a Danny García, un recién llegado a la división, pero con mejor pasado. Thurman ya lo retó para unificar diademas. García no ha respondido aún ni tampoco creemos que lo haga. La decisión final será de Al Haymon y en ese caso es muy difícil predecir lo que ocurrirá. La buena noticia es que esa posible pelea casi es un asunto de familia, ya que las carreras de los dos rivales son manejadas por el mismo promotor. Por lo pronto volvieron las expectativas a las 147 libras y sería un acierto aprovechar el envión.
Tras la batalla de Londres entre Brook y Vargas, ya tendremos un monarca con dos diademas. Ese detalle debería actuar como acicate para que el equipo de García busque repetir su doble reinado en 140 libras. Keith Thurman, por su parte, parece tener prisa en que esa pelea suceda, ya que su figura se resiste a despegar y aterrizar en el primer plano de la división, algo que dábamos como un hecho cuando Floyd Mayweather dijo que dejaba el boxeo. Unificar rápido, significa llegar rápido y en este caso, le asiste toda la razón a su urgencia.
¿THURMAN O GARCIA?
Thurman es quien posee las mejores herramientas de la categoría. Es rápido, efectivo, de potente pegada y con la sabiduría apropiada para recurrir a su excelencia técnica. El complicado combate contra Porter fue el primer y necesario escalón en el ascenso al primer plano. Y si bien se manejó en el mismo cuadrilátero del Barclays una posible revancha con Porter, Thurman quiere a García. Es obvio que ganar esa batalla significa un atajo hacia la gloria y el verdadero reconocimiento. Sin embargo, ¿puede Thurman cantar victoria antes de enfrentarse con Danny García? Mi respuesta es que no debería confiarse.
Danny García no parece calzar los mismos puntos que Thurman, pero muchos también decían lo mismo cuando venció por dos veces a Erik Morales, o cuando noqueó a Amir Khan o previo a sus victorias sobre Zab Judah y Lucas Matthysse. Es verdad que Danny tiene un boxeo más lento y menos explosivo que Thurman, pero lo iguala en pegada y quizás lo supera en asimilación. En lo técnico, si bien ambos manejan ritmos diferentes, saben leer el rumbo del combate con similar inteligencia. Verlos frente a frente supondría un apasionante juego de ajedrez boxístico, donde Thurman posee las mejores piezas, pero García puede sorprenderlo con un movimiento inesperado.
¿BROOK O VARGAS?
Al indudable atractivo de esa posible batalla, sumemos el apasionante choque de fuerzas en la unificación entre Jessie Vargas y Kell Brook. El mexicoamericano es agresivo de poderosa pegada y si bien le gusta el intercambio, es uno de los púgiles que mejor trabaja los golpes de poder desde la distancia. Brook es tan agresivo como Vargas, pero más rápido a la hora de lanzar sus combinaciones.
Será una lucha de poder, los dos deberán arriesgar para colocar sus mejores golpes, los dos utilizarán el contragolpe como herramienta decisiva y el acierto en el cuerpeo defensivo parece ser la clave para superar el acoso primero y encontrar espacios por donde lastimar su oponente después. En lo defensivo los dos son asimiladores, aunque la velocidad de Brook podría ser el factor desequilibrante de una pelea, en lo previo, sumamente pareja y donde es casi imposible arriesgar un pronóstico.
Thurman, García, Vargas y Brook, sumado al promisorio futuro de Errol Spence Jr., el posible salto de categoría (140 a 147 libras) de Viktor Postol o Terence Crawford y la presencia de otros animadores de la división como Shawn Porter, Amir Khan o el propio Adrien Bronner, nos permiten alimentar la esperanza de que el peso welter recuperará todo su protagonismo durante el presente año. Ya era tiempo.