El campeóm pesado Deontay Wilder ya se sometió a un procedimiento quirúrgico en su mano derecha fracturada y tendrá otra así como una diferente en su bíceps derecho desgarragado, probablemente más adelante esta semana, dijo a ESPN.com el lunes Jay Deas, entrenador y co-manejador del púgil.
Wilder se fracturó la mano y se desgarró el bíceps en un nocaut dominante en ocho asaltos ante Chris Arreola para retener su título mundial por cuarta vez el pasado 16 de julio frente una multitud en el Legary Arena en Birmingham, Alabama, estado natal del campeón.
Wilder sufrió las lesiones en el cuarto asalto, en la que se le cayó Arreola y casi lo dejó fuera, pero luego dejó de usar su mano derecha, su mejor arma, durante el resto de la pelea.
Deas dijo que Wilder tuvo "una cirugía menor", el pasado martes, en la que el médico insertó pasadores temporales de la mano y "alineó" sus huesos para ayudar a acelerar el tiempo que toma para que la hinchazón severa en la mano se reduzca.
"Inmovilizaron su mano para que la hinchazón bajará y cuando haya bajado lo suficiente se puede entrar y corregir lo que necesita ser corregido en otra cirugía", dijo Deas.
Deas aseguró que el calendario tentativo es que Wilder tenga otra cirugía el jueves o viernes. Al mismo tiempo, el plan es también hacer la cirugía necesaria en su bíceps afectados.
"Estamos tratando de coordinar las dos cirugías al mismo tiempo, para que Deontay no esté enyesado durante tres o cuatro meses mientras su mano se cura y luego tenga que hacer otra cirugía en sus bíceps," dijo Deas. "Tener las dos al mismo tiempo es una manera de reducir el tiempo de recuperación que necesita.
"La bendición es que a pesar de que la cirugía de la mano es mucho más complicada que la cirugía de los bíceps, estos tardan más tiempo en sanar. Así que la mano de Deontay estará lista mucho antes de su bíceps, lo que dará su mano aún más tiempo para descansar, ya que tendrá que esperar a que el bíceps sane antes de que pueda utilizar la mano. La mano estará mejor de lo que ha estado en años".
Wilder (37-0, 36 KO), de 30 años, de Tuscaloosa, Alabama, casi seguro perderá el resto de 2016. Esta es al menos la tercera vez que Wilder, un golpeador devastador, se ha fracturado la mano derecha.
Después de un nocaut en el primer asalto ante Travis Allen en el 2009 (séptima pelea profesional de Wilder), tuvo que operarse la mano derecha durante para insertarle pasadores para estabilizarlo. Los golpes que aterrizó sobre Arreola fueron tan poderosas que se dobló esos pernos.
Wilder también sufrió una fractura en el mismo lugar durante su victoria por el título mundial contra Bermane Stiverne en enero de 2015, aunque no requirió una segunda cirugía.