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No hay caso, largar se convirtió en un jeroglífico de difícil solución para Franco Colapinto en Fórmula 2. El piloto argentino del equipo MP tiene dos talones de Aquiles que lo complicaron en las tres citas que la categoría lleva disputadas en el ejercicio 2024: la clasificación y las partidas. Y en Melbourne volvió a sufrir con ambos y eso repercutió en el resultado final y en la cosecha de puntos conseguidos. 
Esta vez, tampoco alcanzó el gran ritmo de carrera que siempre tiene el piloto que integra el programa de desarrollo de pilotos de Williams. Una vez que ya estaba consumado el error, Colapinto imprimió un gran ritmo para avanzar en pista, con grandes maniobras de superación sobre pilotos como Pepe Martí, Oliver Bearman, Rafa Villagómez, Victor Martins, Enzo Fittipaldi… Uno a uno fue pasando para terminar séptimo en pista, un resultado que sacaba a flote algo rescatable de un fin de semana en el que había tropezado otra vez con sus flaquezas: clasificación y largadas. Pero todavía quedaba hilo en el carretel de Colapinto en Melbourne. Casi cinco horas después de terminada la carrera (los comisarios deportivos se tomaron su tiempo, claramente), la FIA emitió un comunicado en el que anunciaron la descalificación de Colapinto por un error que cometió en el procedimiento de partida con su auto del equipo MP. La data que se recogió del coche del bonaerense demostró que no había oprimido correctamente los botones de procedimiento de largada y se determinó la exclusión por infringir el artículo 1.5.2 de reglamento técnico. En el mismo parte, se aclara que el competidor tiene el derecho a apelar. “Tenía buen ritmo. Con las gomas blandas era un desastre. Después con las medias estuvo bien. Es una lástima que siga teniendo problemas con la largada porque nadie los tiene, soy el único. Ahora vienen unos tests para trabajar en eso y en la clasificación que son los puntos más flojos, después en carrera somos fuertes y siempre recupero. Por suerte pude sumar. El séptimo lugar es bueno después de haber quedado último en la largada en un fin de semana complicado por la qualy. Obviamente que la consistencia es una clave y encontrar el rumbo es importante”, analizó Colapinto tras la competencia. Claramente todo lo concerniente a la partida es algo que deberá trabajar fuertemente en el parate de casi dos meses que tendrá la F2 hasta la próxima cita de Imola. La exclusión australiana le costó seis puntos en la tabla de posiciones. Por su parte, Joshua Duerksen acariciaba la posibilidad de sumar los primeros puntos en Fórmula 2. Largando desde el 14º cajón, el paraguayo había realizado una gran carrera. Pero todo se terminó cuando Zak O’Sullivan, integrante de la academia de Williams como Colapinto, lo tocó en una maniobra de sobrepaso y lo tiró afuera. El piloto de Asunción dejó su auto del equipo PHM tirado en el paso y no ocultó su fastidio. “Una lástima lo que pasó, pero el ritmo de carrera estaba bien. Luchaba por posición 10 y tenía la sensación de que se venían los puntos, había chances. Lástima que O’Sullivan me entró de costado, una consecuencia que no fue mi culpa, pero son cosas que pasan”, apuntó. Lo positivo fue el ritmo de carrera que mostró en tres pistas en las que nunca había corrido y en una categoría nueva para él. El desembarco en Europa traerá para Duerksen la posibilidad de competir en sitios conocidos. Como nota destacada de una carrera emotiva, quedó el tremendo accidente de Dennis Hauger, compañero de Colapinto en el equipo MP. El noruego perdió el control del Dallara en la curva seis (la misma en la que Alex Albon comenzó la destrucción de su Williams en los ensayos de F1 del viernes) y lo dejó muy dañado. El exintegrante del programa de desarrollo de Red Bull luchaba por el triunfo y tenía la gran chance de irse de Australia como líder del torneo. Finalmente, el destino (el accidente de Hauger y el extenso auto de seguridad fueron sus aliados) ayudaron a Isack Hadjar a sacarse rápidamente la frustración de encima. El francés había vencido en pista en la carrera sprint, pero los comisarios deportivos de la FIA lo recargaron por una carambola en la partida y cayó al sexto puesto. Menos de 24 horas después, Hadjar se tomó revancha.
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