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OAKLAND, Calif. -- El mayor reto que tiene Mike Zimmer esta semana es asegurarse de que sus Minnesota Vikings "no tomen el queso".  ¿Qué es el queso? Teddy Bridgewater dice que Zimmer pregona a sus jugadores que no se crean todo los que escuchan. Particularmente cuando le dicen lo grandes que son. Ese es el queso. El mensaje es claro todos los miércoles cuando Zimmer presenta los planes al equipo. Habla sobre estadísticas basadas en lo que los Vikings aún no han logrado. Los hace pensar en las malas marcas de los Vikings contra equipos ganadores, o cuan mal juegan contra equipos de los Costa Oeste, o los problemas que han enfrentado saliendo de la semana libre. La victoria del domingo por 30-14 sobre los Oakland Raiders cambia el estado de ese queso un poco. Los Vikings están en 7-2 y liderando la NFC Norte por un partido. El próximo domingo serán anfitriones de los Green Bay Packers, quienes de repetente se encuentran jugando desde atrás. Como equipo, los Vikings siguen mejorando. Como equipo, los Packers están dando pasos hacia atrás. De momento, el equipo de los Vikings, considerado como un equipo joven en busca de un puesto de comodín, está en posición de tomar una amplia delantera con miras a convertirse en un ganador de división. Claro, Zimmer ofreció una palabra sobre el significado del ascenso de los Vikings al primer puesto de la NFC Norte. "Nada", dijo Zimmer. "[El primer lugar] no importa", dijo Zimmer. "Solo importa al final del año. Ese es el único momento en el cual le presto atención. Ahora mismo, solo estamos tratando de unir la mayor cantidad de victorias posible y sumarlas al final del año". Mientras seguimos con la temporada de 2015, más nos estamos dando cuenta de lo errado que estaban algunos pronósticos iniciales sobre los Vikings. Por ejemplo, se suponía que en esta temporada se probara que Teddy Bridgewater era un buen quarterback joven que podría ayudar a los Vikings a llegar a un comodín. El regreso de Adrian Peterson tras perderse 15 salidas el año pasado se suponía le daría a Bridgewater un poco de espacio para mejorar. Pero nos estamos dando cuenta que los Vikings son sencillamente un equipo muy bien construido que va mucho más allá de Bridgewater y Peterson. El concentrarse en Bridgewater y Peterson, en ciertos términos, era el queso. La victoria sobre los Raiders otra vez probó que este es un equipo balanceado, efectivo a la ofensiva, la defensiva y en equipos especiales. "Pienso que esa fue la forma en la cual este equipo fue construido", dijo Zimmer. "Hemos jugado bien con equipos especiales todo el año. En la mayor parte del caso, hemos jugado bien en la defensa. Ofensivamente, hemos tenido nuestros momentos, pero espero que mejoren. Hacia el final de la temporada pasada, mejoramos en todos los aspectos. El equipo que juega mejor los domingos, gana, no el equipo con más talento, y así siempre es. La gente siempre dice que uno no puede ganar en la carretera, que uno no puede hacer esto. Pero no se trata de en dónde uno juega, sino cómo uno juega". La victoria sobre los Raiders fue una victoria en equipo para los Vikings. Peterson amasó 203 yardas -- gran parte de eso viniendo en un acarreo de 80 yardas -- a medida que los Vikings ganaron la batalla por tierra. Bridgewater hizo una gran labor en los downs importantes, moviendo el balón y evitando las capturas. La defensa limitó al calientísimo Derek Carr a solo 14 puntos. Cordarrelle Patterson devolvió un kickoff 93 yardas para un touchdown. Todos los ingredientes estaban ahí. Zimmer llegó a los Vikings con una visión, y el gerente general Rick Spielman respeta la forma de pensar de Zimmer y lo ha ayudado a construir un roster que le da a Zimmer una gran cantidad de opciones. He aquí algunos ejemplos: • Los Vikings tienen a seis alas abiertas. Spielman agarró a Mike Wallace para que fuera una amenaza profunda. Stefon Diggs, la selección de quinta ronda, se desarrolló rápido para ser un titular. Consiguieron a Charles Johnson de la calle y fue lo suficientemente bueno como para ser otro titular. Aunque Patterson no ha llenado las expectativas de su selección de primera ronda, tiene los elementos de impacto con una atrapada profunda o con una devolución larga. Jarius Wright fue lo suficientemente valioso como para ganarse una extensión de contrato. Adam Thielen puede hacer jugadas. • Zimmer heredó un diezmado cuerpo de apoyadores el año pasado. Desde entonces, los Vikings han conseguido a Erick Kendricks, Anthony Barr y Brandon Watts a través del draft. Debido a la profundidad, pudieron cambiar a Gerald Hodges y también añadieron al veterano Jason Trusnik. • Ahora tienen una gran cantidad de opciones para las esquinas: Xavier Rhodes, el veterano Terence Newman, Captain Munnerlyn, el seleccionado en primera ronda Trae Waynes y a Josh Robinson. "Pienso que aún estamos descifrando la manera de ganar, cómo viajar y ganar, cómo ganar en la carrera", dijo el apoyador Chad Greenway. "Estamos progresando, pero todavía estamos buscando nuestra identidad... Estamos jugando bien en tres fases. Estamos ejerciendo presión en todas las fases y obligando al oponente a jugar cuatro cuartos". Greenway hizo hincapié conmigo sobre los equipos especiales y trajo el tema del touchdown de Patterson. Eso es interesante porque los equipos especiales han sido algo especial para los Vikings por buen tiempo. Cuando Zimmer asumió las riendas de los Vikings, mantuvo al entrenador de equipos especiales Mike Priefer. ¿Por qué cambiarlo? Desde que Priefer llegó a los Vikings en el 2011, los Vikings lideran la NFL con 10 touchdowns en equipos especiales, añadiendo uno el domingo. Por ahora, los Vikings, ahora en primer lugar, pueden prepararse para otro discurso sobre el "queso" de parte de Zimmer, más recordatorios sobre lo que les falta por lograr, a medida que se preparan para enfrentarse a los Packers el domingo.
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