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TIJUANA, B.C. -- El fútbol americano es un deporte histórico en México, donde a nivel colegial hay una larga y añeja tradición de jugar durante muchas décadas. La gran mayoría de las universidades públicas y privadas tienen programa de futbol americano, que puede ayudar a sus jugadores con becas para estudiar y seguir con el deporte de sus amores. "Todos los más de 60 jugadores de la selección mexicana tienen ayuda económica con colegiaturas estudiantiles, viviendo y para sus gastos generales de vida diaria. El apoyo que se recibe en México es muy parecido al que se recibe en Estados Unidos”, dijo el entrenador de la selección mexicana, Horacio García. “Prácticamente todos tienen beca para estudiar, tienen dormitorio, tienen alimentos... Entonces los apoyos son buenísimos, sobre todo porque son las mejores universidades de México”. Los entrenadores colegiales intentan mantenerse a la vanguardia. Se capacitan en algunos de los mejores programas estadounidenses universitarios. Por ejemplo, García y sus asistentes –todos ex jugadores colegiales de futbol americano en México, han viajado durante los últimos tres años a la Universidad de Baylor, donde el entrenador Art Briles los ayuda con clínicas, en juntas, comentarios y cualquier cosa que esté a su alcance. “Nos ha dejado entrar a sus juntas, sólo pidiendo que no grabemos”, dijo Rafael Suárez, coordinador ofensivo de Tecnológico de Monterrey, campus Toluca, y de la selección mexicana. “Nos atiende de manera muy amable. Me impresiona su humildad. Es un tipazo del que aprendemos mucho”. García consideró que en cuanto a deporte estudiantil, el futbol americano es el deporte más popular de México. “Es el único deporte amateur capaz de llenar un estadio cada ocho días”, dijo. “Los apoyos de las universidades son totales. Están muy involucradas con el futbol americano”. “Las inversiones (de las escuelas) son muy significativas”, agregó. “Son cantidades fuertes, las que tienen que invertir. Estamos hablando de equipos con 70-80 jugadores y prácticamente todos los jugadores están becados académicamente, alimentos, costos de vida, el salario de los entrenadores, la capacitación del staff; costo de participación de viajes. Jugamos en una liga nacional, donde los equipos tienen que desplazarse mucho y los equipos tienen que viajar”. “Si son gastos muy fuertes los que se tienen que hacer para mantener a sus equipos”. El linebacker Rodolfo Villarreal juega para los Borregos del Tecnológico de Monterrey, campus Monterrey, una de las principales ciudades de México involucradas con el futbol americano colegial y una de las que más pasión tiene, cuando se trata de apoyar a sus equipos. Villarreal consideró que en Monterrey deben existir más de 50 organizaciones de futbol americano en sus diferentes categorías y edades, que van desde los 4 años, cuando pueden comenzar a jugar futbol americano de banderolas. “A mi tocó jugar en el 2013 y 2014 contra Tigres”, dijo Villarreal en referencia al partidos contra el más acérrimo rival, la universidad pública de la misma ciudad. “En los dos juegos ganamos. Uno me tocó en el estadio Universitario con más de 40 mil personas, se llenó. El siguiente año fue en el estadio Tecnológico, que es para 35 mil personas, y se llenó. Tiene mucho pegué en Monterrey el clásico y si acapara muchos reflectores”. Para la inmensa mayoría de los seleccionados estadounidenses, la afición, la popularidad y el apoyo de las universidades al futbol americano ha sido una de las sorpresas que se han llevado en su semana de viaje a México para el Tazón de Estrellas. Todos coincidieron en que ni siquiera sabían que se practicara al sur de la frontera el deporte de las tacleadas, mucho menos que las mejores universidades, algunas de buen prestigio a nivel mundial como el Cetys, el Tecnológico de Monterrey y la Universidad de Las Américas, entre otras, otorgaran becas completas a los jugadores. “Me sorprendió, porque nunca me imaginé que en México hubiera equipo para jugar, sé que enEuropa se juega más o menos”, dijo en perfecto español el liniero defensivo estadounidense Sam Mellor. “Sabía que en México se jugaba fútbol (soccer) y beisbol, y nada más. Muchas personas creen que el futbol americano es un deporte exclusivo de Estados Unidos”, agregó. El receptor abierto George Vitas coincidió. “¿Sorprendido de ver qué tan grande es el futbol americano al sur de la frontera? Sí, lo estoy”, reconoció. “Siempre pensé que en Estados Unidos era el único lugar donde había futbol americano, en especial colegial. Pero veo que México es bien grande. Las universidades apoyan y las instalaciones son buenas”. El nivel comparativo, de acuerdo a diversos entrenadores y jugadores de ambas selecciones, es similar al de la División III. El Tazón de Estrellas se jugará por séptima ocasión y la serie histórica está empatada a tres triunfos por bando. “El futbol americano cada vez es más un deporte global que se extiende mucho”, dijo Patrick Steenberge, presidente y fundador de Global Footbal, organización que se encarga de promover partidos de futbol americano estudiantiles en diversas partes del mundo, incluido el Tazón de Estrellas. “En este momento, Estados Unidos es el mejor, Canadá está un poco atrás”, consideró. “Después, México y Japón son casi iguales. Después de eso, Alemania, Austria y varios otros de Europa”. Steenberge dijo que muchos se sorprenderían de ver el físico y técnica de los mexicanos. “Las líneas de México van a ser más grandes que las de Estados Unicos, más altos, más pesados, rápidos, son como de División I en Estados Unidos”, comentó Steenberge, ex jugador de la Universidad de Notre Dame con respecto al partido del sábado. “Los sistemas son todos abiertos como en Estados Unidos, los entrenadores saben de fútbol como allá”. El quarterback de la selección mexicana, Juan Flores, coincidió. “Creo que el nivel es bueno, similar a DII, DIII, creo que algunos de los muchachos aquí podrían estar jugando en esos niveles en Estados Unidos”, dijo. “Creo que el nivel está creciendo. Las mejores escuelas podrían competir allá”. El jugador mexico-americano participó en el 2012 para la selección estadounidense en el Tazón de Estrellas. Este sábado será parte del equipo mexicano, tras aceptar una beca de maestría del Cetys Universidad para jugar en el campus Tijuana. “Aquí puedo jugar dos años más y conseguir mi maestría, cerca de casa”, dijo Flores, residente de Temecula, California, situada a un par de horas de la frontera con Tijuana. “La mayoría de las clases son en inglés igual que los materiales. Hay cosas que tengo que hacer en Mexicali, de donde viene mi familia. Así que no tenía ni que pensarlo. Conseguir una maestría becado y jugar futbol americano”. “Cuando llegué aquí en el 2014, después de graduarme me di cuenta que era como cualquier programa de Division III, mismas rutinas, mismo gimnasio, prácticas, mismas terminologías que en en América así que fue muy fácil para mi adaptarme”. “Además de que en el primer partido toda la escuela estaba ahí, el ambiente en la escuela, los aficionados, los administrados , todo era increíble”. Flores tuvo una brillante carrera colegial en División III estadounidense por lo que conoce la pasión por el juego en ambos lados de la frontera. “Algunas veces hay más gente que en Cornell (donde estudió)”, dijo. “La gran mayoría de los juegos aquí están vendidos por completo. “ Creo que el nivel es bueno, similar a DII, DIII, creo que algunos de los muchachos aquí podrían estar jugando en esos niveles en Estados Unidos. Creo que el nivel está creciendo... Las mejores escuelas podrían competir allá”. Organizadores, entrenadores y jugadores de ambas escuelas coincidieron en que cada vez será más y mejor conocido el nivel del futbol americano de México. “Cada año traigo jugadores de unas 25 universidades y ellos son embajadores para dar a conocer el futbol americano de México”, mencionó Steenberge.
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