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MÉXICO -- Las actuaciones de época que suelen acompañar un sendero de postemporada, han visto su mayor repetición de la mano de mariscales de campo legendarios que lideran a sus respectivos equipos. En el caso del Super Bowl XVII, y el camino para llegar al mismo, no hubo algo más consistente y espectacular, que el juego terrestre de John Riggins. Una temporada sui géneris que vivió huelga y recorte de temporada, así como una nueva fórmula de eliminación para los playoffs, presentó a los Miami Dolphins frente a los Washington Redskins, una revancha de la edición N° 7 del Super Bowl. Los Dolphins regresaban al juego de campeonato después de coronarse de forma consecutiva tras vencer a Washington y Minnesota ocho temporadas antes. Los Redskins aparecían por primera vez desde aquella derrota. La defensiva de los "Killer B's" era la carta de presentación de Miami con una racha de dominio en los tres juegos previos de playoffs, mientras el corredor Riggins, registró sendas actuaciones de 100 yardas vía terrestre en el mismo período para Washington. Los Dolphins lograron contener la versatilidad en el ataque de los Redskins vía Joe Theismann y Riggins, e incluso hilaron tres intercepciones en el tercer período para proteger su corta ventaja. No obstante, la mano del legendario entrenador Joe Gibbs apareció con una carrera diseñada en cuarta oportunidad que pasó a la historia: Riggins dio a los Redskins su primera ventaja del partido en una escapada que la organización considerada la jugada más famosa en su historia de Super Bowls. En 4°y 1, Gibbs mandó la 70 Chip; con el ala cerrada en movimiento, Riggins escapó 43 yardas hasta las diagonales tras sacudirse una tacleada del esquinero Don McNeal. Por si el título de Jugador Más Valioso no se inclinaba hacia un miembro en específico de los Redskins, Riggins se encargó de proteger el balón y llevarlo campo abajo para agotar a una defensiva que se vio desmoralizada tras su escapada anterior. A la postre, con un marcador de 27-17, los Redskins obtuvieron su primer título de Super Bowl, al tiempo que "Riggo" terminó con 166 yardas terrestres y 15 por aire. Miami logró 176 globales a la ofensiva.
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