SAN FRANCISCO -- La personalidad de Mark Davis nada tiene que ver con la de su padre, el legendario Al Davis, fundador de los Oakland Raiders.
Mark Davis parece mucho más extrovertido que su padre cuando está en eventos públicos o frente a las cámaras,. Luce mucho más relajado que la gran mayoría.
Incluso este viernes en el Centro de Prensa del Super Bowl 50 parecía no poder parar de reir durante toda la conferencia en la que anunciaron que llevará como equipos local a sus Raiders al estadio Azteca de México para “recibir” a los Houston Texans.
Davis tomó una decisión que su padre nunca se atrevió. Muestra coraje y arriesga. Está convencido de que tiene nada que perder y mucho qué ganar.
Ni siquiera tiene un estadio asegurado como casa para la próxima temporada.
Es apenas el segundo dueño de equipo que se atreve a sacar su hogar un partido para llevarlo a México, el tercer mercador más grande para la NFL en el mundo.
Sabe que si las cosas funcionan, será uno de los golpes maestros para una de las franquicias consentidas por tradición al sur de la frontera, donde miles, millones de niños juegan futbol americano y que desde que se inventó el balón ovalado, han tenido entre sus favoritos a los “Malosos”.
La apuesta es sencilla, pero cuando estás buscando apoyo para nuevo estadio, cuando amenazas con posible mudanza de sede y además ya de antemano en el área de la Bahía saben que serán sólo siete juegos de temporada regular, hay que tener valor y saber a la perfección las consecuencias o premios que puede atraer.
Será sencillo ganar. Después más de 10 años de que el único equipo que se atrevió a sacar un juego de su casa, los Arizona Cardinals, para enfrentar en el mismo estadio Azteca a los 49ers en el 2005.
Los boletos se venderán sin problema al precio que sea. Los aficionados de los Raiders y en general de la NFL ya incluso tienen lista de espera.
Sea como sea el partido, el público va a dejarlo todo. Es negocio asegurado y tambien ganancia firme para el futbol americano en México.
El futbol americano universitario en México es el único que llena estadios con capacidades para más de 15 mil personas entre los deportes amateur.
La NFL se ha oído y visto en México prácticamente desde que se fundó la liga. El conocimiento de futbol americano y seguimiento desde colegial hasta profesional en México es más grande que lo pensado por los mismos protagonistas de la NFL.
El partido entre los Texans y los Raiders tendrá su costo para todos. Pero es una inversión más que segura para el que sea.
Hay que imaginar lo que representará, por ejemplo, a niños que juegan futbol americano desde categorías bomberitos a los 6 o menos años de edad, hasta la universidad, y de los que no tienen posibilidad de viajar a un partido fuera de sus fronteras.
En muchas ocasiones, no sólo se trata del costo, que en Estados Unidos es muy caro y complicado conseguir boletos para una liga, en la que según el comisionado Roger Goodell, se llenaron absolutamente todos los partidos de esta temporada de todos los equipos.
Mucha gente en diversas ciudades con gran tradición de futbol americano en Estados Unidos, nunca ha tenido oportunidad de ver a sus equipos favoritos por la complejidad para conseguir boletos.
Es tan redituable que debe ser una de las pocas ligas que jamás regala boletos, ni a sus propios jugadores.
El camino será complicado para todos; para los Raiders, para los Texans, que reconocen ser afortunados de tener esta oportunidad sin tener que ceder algún partido en su NRG Stadium; algo que casi es imposible.
Hay muchas cuestiones que afinar, desde las condiciones de infraestructura del estadio, que tendrá que ser remodelado en vestidores y pasto, hasta mejorar en infraestructura de telecomunicaciones, reconoció Yon De Luisa, vicepresidente de Televisa, empresa propietaria del estadio.
Si en el Super Bowl de San Francisco hay una seguridad impresionante, ni siquiera me quiero imaginar la complejidad de llevar al sur de la frontera nóminas de 53 jugadores superiores a los 125 millones de dólares cada una.
Hay tiempo para prepararse y que sea tan buena experiencia que la NFL quiera regresar cada año, como sucede en Londres.
Felicidades a Mark Davis y sus Raiders porque tomó una decisión que muchos dueños ya ni siquiera se atrevían a considerar.
Así que bienvenida de nuevo la NFL en México, donde durante una década fue más que evidente que se le extrañó como a nadie.