CINCINNATI -- El primer pase de Andy Dalton con el dedo pulgar sanado aterrizó en el sofá. Y se sintió muy bien.
El mariscal de campo de los Cincinnati Bengals debió esperar mucho tiempo después del Super Bowl para volver a lanzar. Se fracturó el pulgar derecho durante una derrota ante los Pittsburgh Steelers el 13 de diciembre, y quedó marginado para el resto de la campaña, incluyendo un tropiezo en la primera ronda de los playoffs ante los propios Steelers.
Recibió permiso para realizar actividad física total en marzo y de nuevo está lanzando todos sus pases sin problema alguno, una de las señales de mayor optimismo para los Bengals mientras comienzan otra temporada baja en busca de superar su angustia de playoffs.
"Nunca he tenido tanto libre de lanzar, así que simplemente regresaba a ello y me aseguraba de que mecánicamente estaba bien", dijo Dalton este lunes. "Se sintió bien. Se siente que el ovoide va saliendo bien de mi mano ahora, así que regreso al lugar donde estaba".
Dalton estaba en medio de la mejor campaña de su carrera --su ansiado temporada de destape-- cuando se fracturó el pulgar mientras realizaba una tacleada durante una devolución de intercepción. AJ McCarron lideró a los Bengals a un par de triunfos en los tres últimos juegos de temporada regular y tenía adelante a Cincinnati en los minutos finales de la derrota de playoffs antes de que la defensiva se colapsara con penalidades, permitiendo a Pittsburgh sacar una victoria de 18-16.
Dalton había esperado regresar en algún momento de la postemporada. Una quinta derrota consecutiva en la primera ronda le quitó la oportunidad. Le brindó suficiente tiempo a su pulgar para sanar y comenzó a lanzar ovoides en contra de los muebles mientras esperaba permiso para volver a tirar en los entrenamientos hasta el mes de marzo.
"Recogía cualquier ovoide al azar y simplemente lo lanzaba a mi sofá o algo", declaró Dalton. "En cuanto recibí permiso oficial, empecé a tirar".
Después de dejar una muy buena impresión como titular de NFL, McCarron regresa al segundo puesto en el orden, donde recibirá pocos minutos de práctica con la ofensiva de primer equipo.
"Es en general lo mismo, porque cuando eres suplente, te sigues preparando", dijo McCarron este lunes. "Es diferente porque no recibes [jugadas en la práctica]. Es el modo en que lo hacemos aquí, y ciertos equipos lo hacen de ciertos modos. Así que es la parte más complicada, pero sigues estudiando el video y te sigues preparando de la misma manera".
Dalton finalizó con un índice de pasador de 106.3, quebrando la marca del club de Carson Palmer. Finalizó segundo en la NFL detrás de Russell Wilson de los Seattle Seahawks (110.1). Completó una marca personal con el 66.1 por ciento de sus pases para 25 touchdowns con solamente siete intercepciones, otra marca personal. Fue la séptima intercepción la que causó la fractura en el pulgar.
La racha de los Bengals de cinco derrotas consecutivas en la primera ronda de los playoffs es una marca de la NFL, nadie lo ha sufrido por más de tres años. El entrenador en jefe Marvin Lewis tiene marca de 0-7 en la postemporada, también marca en la NFL. Los Bengals dieron a Lewis otra extensión de contrato de una temporada, hasta el 2017, e intentaron mantener intacto al equipo para una oportunidad más para conseguir esa elusiva primera victoria de playoffs.
Cincinnati no ha ganado un partido de postemporada desde 1990, la sexta sequía más larga en la historia de la liga.
"Tenemos a muchos tipos que jugaron mucho fútbol americano para este equipo", explicó Dalton. "La mentalidad es la adecuada. Es de lo que hablan los coaches, asegurándose de que la mentalidad está en el sitio correcto".
Lewis dijo a los jugadores en su reunión de temporada baja este lunes, que no debían hablar sobre la sequía de playoffs.
"Es el final de eso", explicó el safety George Iloka. "Es lo que nos dijo que dijéramos a ustedes, que era el final de eso. Honestamente, cualquier cosa que hubiera sucedido en el pasado no influye en los resultados del siguiente año.
"He seguido adelante. Muchos tipos lo dejan atrás al mes o dos después de la campaña".