Han transcurrido las primeras tres rondas a lo largo de dos días de selecciones del Draft 2016 de la NFL, y luego de los primeros 98 jugadores reclutados, todavía queda talento interesante para las últimas cuatro vueltas.
Aquí están los 15 prospectos más notables que todavía no tienen equipo de NFL:
Jerell Adams, TE, South Carolina. Del tipo de alas cerradas que se asemeja más a un receptor abierto que a un bloqueador de línea, Adams puede convertirse en una pieza importante para la ofensiva en zona roja. Tratándose de un grupo débil en la posición para este año, no es mucha sorpresa que el segundo mejor prospecto en la posición siga disponible en el tercer día.
Vadal Alexander, OG, Louisiana State. Obtuvo reconocimiento en los equipos ideales de la SEC en sus cuatro temporadas en LSU, dos veces como tackle derecho y dos veces como guardia. Al siguiente nivel, lo más probable es que se desempeñe en el interior, donde se compara favorablemente con La'el Collins y Trai Turner, par de guardias que han demostrado ser dominantes en la NFL. Ideal para equipos que buscan un juego terrestre de poder.
Andrew Billings, DT, Baylor. Un supuesto problema de rodilla ha hecho caer a Billings estrepitosamente, después de ser considerado casi unánimemente material de primera vuelta. Lo cierto es que 14 tackles defensivos han sido elegidos antes que el All-American y es difícil explicarse el por qué. Tarde o temprano sabremos si en efecto fue una cuestión médica.
Devontae Booker, RB, Utah. En el caso de Booker, si existe una interrogante de orden médica, y tiene que ver con rodilla (menisco). Se trata de un problema que le impidió completar el proceso previo al draft al 100 por ciento, pero en el video se muestra a un corredor de tres intentos que podría brillar en un esquema de bloqueo por zonas.
Daniel Braverman, WR, Western Michigan. Uno de los nombres que más ruido hizo en los días previos al draft, pasó de ser un candidato de sexta o séptima ronda a un potencial recluta de cuarta. Ideal para la jugar la ranura y encontrar espacios en las zonas. Encuentra el modo de estirar a las defensivas pese a jugar en el interior.
Kentrell Brothers, LB, Missouri. Apoyador medio prototipo, con lo que conlleva tradicionalmente esa etiqueta, es decir, un defensivo más apto para frenar la carrera que cortar el juego aéreo del rival. Tremendo olfato para encontrar el ovoide en el tráfico.
Jeremy Cash, SS, Duke. No cuenta con el tamaño intimidante de un Deonne Buchanon, pero en Duke se desempeñó en un rol híbrido de profundo/apoyador que resaltó su disposición para el juego agresivo. No posee el mejor rango en coberturas de pase, y quizás se trate del clásico ejemplo del que es mejor jugador de fútbol americano que atleta. Luce más cuando está dentro de la caja.
Connor Cook, QB, Michigan State. Cuando un mariscal de campo con los logros que acumuló Cook al frente de un programa de un nivel tan alto como el de los Spartans cae de esta manera, algo empieza a parecer sospechoso. Aparentemente, el hecho de que no fue elegido a la capitanía por sus compañeros la temporada pasada habría sido bandera roja para algunos equipos, pero una cosa es caer de las primeras dos rondas, y otra es ver a pasadores como Jacoby Brissett y Cody Kessler saliendo antes que él. No imagino que no salga en la ronda siguiente.
Sheldon Day, DT, Notre Dame. La gran profundidad en la posición de tackle defensivo ha hecho caer a Day un par de rondas, pero no tengo duda de que saldrá en la cuarta vuelta. Se trata de un liniero versátil capaz de alinear en diferentes posiciones a lo largo de la línea defensiva, aunque probablemente termine sumando algunas libras para quedarse en la nariz. Sus bonos de draft se vieron afectados por la gran cantidad de tackles defensivos de calidad en la parte alta, pero en casi cualquier otro año, ya tendría equipo.
Kenneth Dixon, RB, Louisiana Tech. Si algo se puede decir de Dixon, es que tiene olfato para encontrar la zona de anotación. Sus 87 touchdowns como universitario constituyen la segunda mejor marca en la historia, solamente superado por los 88 de Keenan Reynolds de Navy, marca impuesta días después de que Dixon se la apropiara. Se trata de un corredor de tres intentos cuyos bonos de draft se vieron perjudicados por la filosofía en boga de considerar que se puede encontrar a un gran corredor en las partes bajas del draft. En su caso, así será.
Cardale Jones, QB, Ohio State. Olviden toda esa charla de que si hubiera salido hace un año se hubiera ido en primera vuelta; no es cierto. Sin embargo, hay que reconocer que Jones posee cualidades físicas como pocos y es un proyecto excelente para desarrollar con un par de años como suplente e algún mariscal de campo bien establecido. Le falta refinar su toque y lecturas, pero ese brazo bien vale una selección de cuarta ronda.
Josh Perry, LB, Ohio State. El líder tacleador para los Buckeyes durante la temporada de campeonato nacional del 2014, Perry es un jugador que trabaja bastante y el esfuerzo se nota en cada jugada. Quizás no se trate de un elemento de jugadas explosivas --muchas intercepciones o capturas-- pero siempre se sabe lo que se tiene con él en términos de derribos seguros. Fue uno de los líderes más respetados en la defensiva de Ohio State.
Dak Prescott, QB, Mississippi State. Dentro de los pasadores con calificación de ronda media a baja, Prescott aparece como el favorito para algunos equipos, según reportes. Se trata del mejor jugador en la historia de los Bulldogs, y un atleta excepcional. Como pasador, necesita tiempo para desarrollarse pero es perfectamente justificable invertir en un mariscal de campo como él en el tercer día.
Christian Westerman, OG, Arizona State. Gran atleta que empezó su carrera en Auburn, posee suficiente fluidez en caso de que sea elegido por un equipo que favorezca el sistema de bloqueo por zonas. Ha trabajado con el centro All-Pro, LeCharles Bentley, y hay quienes creen que tiene las cualidades necesarias para adoptar esa posición al siguiente nivel, en caso de que sea necesario.
Scooby Wright III, LB, Arizona. Wright es una máquina de taclear, pero una máquina que viene de reparaciones; el apoyador viene de dos lesiones serias que le robaron la campaña del 2015 prácticamente en su totalidad. Primero, una lesión de meniscos en la rodilla izquierda durante la fecha inaugural y después un problema en el pie limitaron su temporada a porciones de dos encuentros, además del New Mexico Bowl. En el 2014, Wright fue Jugador Defensivo del Año en la Pac-12 y se hizo con los premios Bronko Nagurski, Chuck Bednarik y Vince Lombardi, además de terminar noveno en la votación por el Heisman.