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Bill Barnwell 7y

Los mejores y peores arsenales ofensivos de los 32 equipos de la NFL

BRISTOL -- La NFL es una liga de mariscales de campo, pero una buena colección de armas puede ser la diferencia entre que un pasador dé un paso al frente o se vea ordinario. Piensen en el destape de Tom Brady entre el 2006 y 2007 una vez que los Patriots sumaron a Randy Moss y Wes Welker. Recuerden cómo lució Andy Dalton en el 2015 con A.J. Green, Tyler Eifert, Marvin Jones y Mohamed Sanu en la alineación, y lo que sucedió con todos ellos marginados por momentos de la temporada pasada.

Es difícil en casos separar las armas del nivel de un pasador, pero vamos a intentarlo aquí al clasificar las armas de todos los equipos del N° 32 al N° 1. Tengo más confianza en los niveles que en la clasificación dentro de cada nivel; ustedes realmente podrían argumentar a favor de cualquiera de los equipos del top-3 para que esté como N° 1 y yo estaría de acuerdo.

Esto considera corredores, receptores y alas cerradas sin la influencia de mariscales de campo, linieros ofensivos o coordinadores ofensivos . Considera sólo cómo lucirán en el 2017 sin preocuparse sobre temporadas futuras, y no se toma en cuenta el costo de estos jugadores o lo que se necesitó para adquirirlos. Esto es estrictamente un análisis dentro del campo. Tiene en cuenta a jugadores que se encuentran lesionados o suspendidos. Los jugadores sanos fueron tratados de acuerdo a su historial habitual de lesiones, así que un jugador como Keenan Allen es más una preocupación que alguien como Larry Fitzgerald.

Comencemos con el fondo de la liga:

PRIMER NIVEL: LOS PROBLEMAS GRAVES

32. NEW YORK JETS

Si quieren una señal de cómo están reconstruyendo su cuerpo de receptores los Jets, consideren que los únicos jugadores de la posición en su plantilla que han atrapado pases en la NFL antes del 2016 son Quincy Enunwa y Austin Seferian-Jenkins. Relativamente, la pareja de Matt Forté y Bilal Powell son de la realeza profesional, pero Forté registró su peor marca de yardas por acarreo desde el 2009 en su temporada debut con los Jets (3.9). El ex titular de los Bears podría estar en la plantilla sólo porque los Jets le garantizaron sus 4 millones de dólares de salario base el año pasado.

31. SAN FRANCISCO 49ERS

Las dos piedras angulares en San Francisco parecen ser Carlos Hyde y Vance McDonald, pero ninguno podría sobrevivir al campamento de entrenamiento bajo la nueva dirección de Kyle Shanahan y John Lynch. La llegada de Pierre Garçon aporta familiaridad con el esquema de Shanahan, pero la mayor interrogante es el costoso Kyle Juszczyk, a quien los Niners aparentemente quieren utilizar como si fuera una combinación de Darren Sproles y un tanque.

30. CLEVELAND BROWNS

Los Browns no estuvieron exactamente abarrotados en las posiciones de habilidad la temporada pasada y posteriormente se desprendieron de sus dos mejores receptores (Terrelle Pryor y Gary Barnidge) esta temporada baja. Kenny Britt y el recluta de primera ronda del draft David Njoku tomarán sus lugares, respectivamente, pero el jugador clave es la selección de primera vuelta del 2016, Corey Coleman, quien debe dar un paso adelante luego de fracturarse la mano a las tres semanas de iniciar su temporada de novato. Coleman atrapó sólo el 46.4 por ciento de los pases en su dirección luego de la lesión en la mano, el peor índice de la liga para jugadores con 50 pases enviados en su dirección en la segunda mitad.

29. LOS ANGELES RAMS

Los Rams son una colección extraña de talento en posiciones de habilidad. Todd Gurley debe ser mejor, pero tienen un receptor bloqueador (Robert Woods), un ala cerrada con buenas manos (el recluta de segunda ronda del draft Gerald Everett, un ex jugador de baloncesto) y un arma que no es exactamente un arma en Tavon Austin. La ex octava selección global del draft promedió apenas 4.85 yardas por pase enviado en su dirección, la peor cifra entre receptores por un amplio margen. La lista de profundidad detrás de Gurley también es bastante escasa.


SEGUNDO NIVEL: LÁS FÁBRICAS DE LESIONES

28. BALTIMORE RAVENS

Ningún equipo ha sido golpeado más duro por las lesiones esta temporada baja que Baltimore, con la pérdida de Dennis Pitta (cadera) y Kenneth Dixon (rodillo) por toda la temporada. La ofensiva de Marty Mornhinweg dependerá mucho de jugadores con historial reciente de lesiones, incluyendo a Danny Woodhead, Benjamin Watson, Maxx Williams, Breshad Perriman y Jeremy Maclin.

27. KANSAS CITY CHIEFS

Los Chiefs cortaron a Jamaal Charles y Jeremy Maclin esta temporada baja, y si bien usaron selecciones de tercera y cuarta ronda del draft en Kareem Hunt y Jehu Chesson, respectivamente, su profundidad en la posición de receptor es tan corta como cualquier equipo de la liga. Su líder receptor será Tyreek Hill, quien es uno de los jugadores más rápidos de la liga pero que básicamente fue un receptor de pases pantalla como novato en el 2016. Travis Kelce es muy talentoso, pero ¿podrá cargar con todo el ataque aéreo y mantenerse sano?


TERCER NIVEL: LAS RECONSTRUCCIONES

26. CHICAGO BEARS

El gerente general Ryan Pace se desprendió de Alshon Jeffery por intentar convertir un dólar en cuatro monedas de 25 centavos; el impacto en el tope salarial de 14.6 millones de Jeffery fue reasignado a la combinación de Markus Wheaton, Kendall Wright, Victor Cruz y Dion Sims, quienes consumirán un combinado de 14.9 millones del tope salarial. Quizás es más importante el desarrollo del recluta de primera ronda del draft Kevin White, quien ha estado limitado a 19 recepciones en dos temporadas por lesión. Esa es la menor cantidad para una selección del top-10 en 35 años. Pero vamos, tienen a Jordan Howard y Cameron Meredith.

25. INDIANAPOLIS COLTS

Uno de los pocos lugares en los que los Colts actualmente no están en transición es la posición de receptor abierto, donde Kamar Aiken podría presionar al decepcionante recluta de primera ronda del 2015, Phillip Dorsett, por tiempo de juego. Donte Moncrief jugó con lesiones en una campaña perdida, pero T.Y. Hilton lideró la liga en yardas recibidas, mientras Jack Doyle emergió como una válvula de escape segura y confiable en reemplazo de Coby Fleener. Frank Gore sigue contribuyendo, pero podría dejarle su lugar a la selección de la cuarta vuelta Marlon Mack para el final de la temporada.

24. BUFFALO BILLS

LeSean McCoy sigue impresionando mientras llega a la temporada a sus 29 años de edad, pero se ha perdido tiempo de juego en cada una de sus primeras dos campañas con los Bills, y eso es sin considerar el esguince en la parte alta del tobillo que sufrió en la Semana 17. Charles Clay no ha logrado rendir en Buffalo al lidiar con una persistente lesión en la rodilla y el equipo jugó con Sammy Watkins a pesar de una evidente lesión en el pie antes que Watkins quedara marginado en el 2016. Si Watkins no está al 100 por ciento, la lista de profundidad detrás de él es alarmante, encabezada por jugadores como Walter Powell, Andre Holmes y el recluta de segunda ronda del draft Zay Jones.

23. DENVER BRONCOS

Nadie duda que los Broncos tienen un par de grandes receptores abiertos en Demaryius Thomas y Emmanuel Sanders, pero la profundidad detrás de ellos es muy pobre, y tienen un desastre en las posiciones de corredor y ala cerrada. C.J. Anderson se derrumbó dramáticamente antes de sufrir una lesión de menisco que puso fin a su temporada, y Devontae Booker mostró poco en su lugar. El titular Virgil Green es un ala cerrada orientado a los bloqueos, mientras Denver espera recibir algo de los reservas Jeff Heuerman, A.J. Derby y Jake Butt.


CUARTO NIVEL: LA FALTA DE ESTRELLAS

22. DETROIT LIONS

Los Lions tienen muchas armas que han mostrado su utilidad, pero sus única amenaza confiable parece ser Golden Tate. Marvin Jones promedió apenas 40.1 yardas por partido luego de un encendido inicio en los primeros tres partidos de la campaña pasada, mientras Eric Ebron tiene el índice más alto de la liga en pases dejados caer (7.9 por ciento) entre receptores con 200 pases en su dirección o más desde que llegó a la NFL en el 2014. Ameer Abdullah se perdió 14 partidos la campaña pasada y no fue efectivo como novato, por su parte Theo Riddick ha sido un excelente receptor sin ofrecer mucho más que un nivel de reemplazo como corredor.

21. MINNESOTA VIKINGS

Adrian Peterson se ha ido, y si bien los Vikings firmaron al decepcionante Latavius Murray en su lugar, todos en Minnesota parecen estar esperando que Dalvin Cook asuma la titularidad más pronto que tarde. Los Vikings tienen profundidad con contribuyentes útiles en la posición de corredor y receptor, con jugadores como Jerick McKinnon y Jarius Wright enterrados en la lista de profundidad, pero hay poco poder hasta que Stefon Diggs tenga buenas actuaciones en más de una semana o dos. Adam Thielen fue una buena sorpresa la campaña pasada, pero la ofensiva daría un salto hacia adelante si Laquon Treadwell descubriera su potencial.


QUINTO NIVEL: MÁS RECONSTRUCCIONES

20. NEW YORK GIANTS

Si todo funciona junto a Odell Beckham Jr., los Giants podrían ser fantásticos; Sterling Shepard debe ser mejor en su segunda campaña, el ala cerrada Evan Engram debe ser una mejoría sobre jugadores como Will Tye y Larry Donnell de los años recientes, y Brandon Marshall debe quedarle más en el tanque que a Victor Cruz. También es posible que Engram tenga problemas como novato (como la mayoría de las alas cerradas), Shepard esté limitado en pases en su dirección, y el veterano Marshall de 33 años de edad luzca más como el tipo que atrapó 46 por ciento de sus pases hace un año que el jugador que brilló en el 2015. Bajo casi cualquier escenario, la posición de corredor será un desastre.

19. WASHINGTON REDSKINS

Washington ha cambiado casi por completo su ofensiva en las últimas dos temporadas, pasando de un equipo construido alrededor de los receptores Pierre Garçon y DeSean Jackson, quienes ya se marcharon, a un equipo enfocado en el receptor de ranura Jamison Crowder y el ala cerrada Jordan Reed. Si Jay Gruden puede incluir a la nueva adición Terrelle Pryor y al recluta de primera ronda del 2016, Josh Doctson, esta podría ser una unidad efectiva. Es difícil confiar que Reed y Doctson estén en el campo por largos lapsos de tiempo, aunque, Reed ya se encuentra en la lista de físicamente incapacitados por una lesión en el pie. Kirk Cousins ha lanzado 42 pases de touchdown contra 10 intercepciones y ha registrado un índice de pasador de 106.4 con Reed en el campo en los últimos dos años; esos dos números bajaron a 10 touchdowns y 13 intercepciones y un índice de pasador de 86.1 con Reed marginado. La posición de corredor también es un trabajo en progreso.

18. HOUSTON TEXANS

Nada salió bien para la ofensiva de Houston la temporada pasada más allá del ala cerrada C.J. Fiedorowicz, quien fue el único receptor quien pareció desarrollar cierto nivel de afinidad con el ex mariscal de campo Brock Osweiler. DeAndre Hopkins se perdió en algunos partidos, aunque es difícil culparlo por las fallas. El recluta de primera ronda del draft Will Fuller comenzó la temporada con partidos consecutivos de 100 yardas y después nunca se volvió a acercar el resto de la campaña. Aún más decepcionante, Lamar Miller lució como si sus piernas hubieran estado atrapadas en el fango por la mayor parte de la temporada luego de llegar en la agencia libre procedente de los Dolphins. Aún hay mucho talento aquí, pero todos tienen que lucir más como lucieron en el 2015.

17. PHILADELPHIA EAGLES

Carson Wentz necesitaba receptores, así que los Eagles salieron a buscarlos y regresaron con una pareja interesante de bajo costo en Alshon Jeffery y Torrey Smith, a quienes debe quedarles mucho en el tanque. De pronto, Wentz está lleno de opciones debido a que puede voltear hacia Jordan Matthews, Zach Ertz o Darren Sproles cuando Jeffery y Smith estén cubiertos. LeGarrette Blount viene del mejor año de su carrera (18 touchdowns) con los Patriots y debe ser aún un corredor útil entre los tackles, aunque Sproles terminará siendo el salvador del equipo por un lapso en septiembre, como parece ser el caso cada temporada.


SEXTO NIVEL: LOS BASTANTE OPTIMISTAS

16. SEATTLE SEAHAWKS

Podrían no haberlo notado, pero Doug Baldwin es un verdadero receptor N° 1, debido a que se ubica en la posición N° 12 en yardas recibidas (empatado con Larry Fitzgerald) y séptimo en touchdowns (justo por delante de Demaryius Thomas) en los últimos tres años. También podría ser el único confiable. El resto del cuerpo de receptores se está recuperando con Jermaine Kearse teniendo problemas de consistencia y Tyler Lockett volviendo de una fractura en la pierna. Jimmy Graham fue sorpresivamente confiable en su regreso de una rotura del tendón rotuliano, jugando los 16 partidos al tiempo que registró su mayor total de yardas desde el 2013. El recién adquirido Eddie Lacy debe dividir tiempo de juego con Thomas Rawls, pero el mejor escenario para Seattle podría involucrar al recluta de tercera ronda del draft del 2016, C.J. Prosise, convirtiéndolo en corredor principal.

15. TENNESSEE TITANS

Los Titans hicieron que el esquema orientado a la carrera de Mike Mularkey funcionara, con DeMarco Murray teniendo una temporada de resurrección y Harry Douglas contribuyendo como bloqueadores útiles. Sumaron armas necesarias en la posición de receptor con Eric Decker y el recluta de primera ronda del draft Corey Davis, mientras la selección de segunda vuelta del 2016, Derrick Henry, debe recibir una mayor cantidad de acarreos si Murray no puede mantenerse sano. Tennessee aún depende que Delanie Walker no envejezca como ala cerrada, pero este es un grupo profundo con mucho potencial.

14. NEW ORLEANS SAINTS

Lo Saints se desprendieron en canje de Brandin Cooks pero aún tienen mucho talento en la posición de receptor, con Michael Thomas luciendo como una superestrella y Ted Ginn llegando para servir como amenaza a lo profundo junto a Willie Snead. También reforzaron su rotación de corredores al correr un riesgo de bajo costo con Adrian Peterson y un canje para subir posiciones en el draft por Alvin Kamara. También es difícil de creer que Coby Fleener no será mejor en su segunda campaña en New Orleans, sobre todo considerando lo efectivo que ha sido Drew Brees buscando a sus alas cerradas en los años recientes.

13. JACKSONVILLE JAGUARS

Los Jaguars tienen su cuarto nuevo corredor titular en igual número de años, pero el cuarto recluta global Leonard Fournette debe dar resultado. Podría cerrar partidos para un equipo de los Jaguars que ha desperdiciado siete juegos en los que llegaron con ventaja al último cuarto en las últimas tres campañas, una cifra sólo superada por los Chargers (10). Si bien tanto Allen Robinson como Allen Hurns tuvieron temporadas decepcionantes en el 2016, los Jaguars tuvieron una campaña sorpresivamente efectiva de Marqise Lee, lo que les da un trió de jóvenes receptores del que deben preocuparse el resto de los equipos. Mucho depende aún de Blake Bortles, pero las armas no son el problema en Jacksonville.

12. CAROLINA PANTHERS

Los Panthers se enfocaron en quitarle presión a Cam Newton esta temporada baja y si bien soy escéptico del nuevo tackle izquierdo Matt Kalil, tengo muchas esperanzas en que las dos selecciones altas del draft, Christian McCaffrey y Curtis Samuel, le darán a Newton dos objetivos necesarios de rutas intermedias. Esto será práctico en el 2017 y los próximos años a medida que Greg Olsen se haga más viejo. La posición de receptor aún parece un problema, ya que Kelvin Benjamin tuvo una caída importante en su primer año tras volver de un desgarre de ligamento cruzado anterior, mientras Devin Funchess registró el peor índice de recepción de la liga (41.1 por ciento).

11. GREEN BAY PACKERS

No estoy seguro que alguno de nosotros espere ver a los Packers luciendo así hace 12 meses. ¿Davante Adams --la mayor decepción del Fantasy Football en el 2015-- como una máquina de touchdowns? ¿Randall Cobb perdido? ¿Ty Montgomery como corredor principal? ¿Martellus Bennett de alguna manera terminando en una situación aún mejor que New England? Aaron Rodgers es el popote que sorbe la bebida aquí, desde luego, pero con Jordy Nelson manteniendo el ritmo en su regreso el año pasado, hay mucho talento en las posiciones de habilidad, también.


SÉPTIMO NIVEL: EL TOP-10

Los Tampa Bay Buccaneers fueron una ofensiva efectiva en el 2016 y más allá que Mike Evans se lesione, es difícil verlos peor en términos de armas. Adam Humphries y Cameron Brate fueron agradables sorpresas la campaña pasada y ahora han sido complementados con DeSean Jackson y el recluta de primera ronda del draft O.J. Howard. Doug Martin fue decepcionante y estará suspendido por los primeros tres partidos del 2017, pero debe lucir mejor luego de promediar 2.9 yardas por acarreo hace una campaña. Evans, por cierto, no cumplirá 24 años hasta agosto. ¿Qué tal si mejora?

Pueden argumentar a favor de Ezekiel Elliott y Le'Veon Bell, pero estoy convencido que David Johnson fue el mejor corredor de la NFL la temporada pasada. Hay buena profundidad detrás de DJ luego que Arizona recontrató a Chris Johnson. Bruce Arians ha revitalizado la carrera del receptor de 33 años de edad, Larry Fitzgerald al mudar al futuro miembro del Salón de la Fama a la ranura, donde ha acumulado temporadas consecutivas de 1,000 yardas. John Brown debería volver en forma luego de tener problemas de anemia y un quiste en la columna vertebral la campaña pasada, y si bien Michael Floyd se ha ido de la ciudad, los Cardinals deben tener la capacidad de ensamblar una rotación de tres receptores con J.J. Nelson y el recluta de tercera ronda del draft Chad Williams. Ala cerrada es relativamente una debilidad, pero este sigue siendo un grupo talentoso.

Las cosas han salido bien para los Raiders: construyeron su línea ofensiva, reclutaron un mariscal de campo, le seleccionaron un receptor N° 1m y encontraron gratis un receptor N° 2. Justo como lo diseñaron.

Ahora, han sumado un icono local como corredor. No está claro si le queda algo en el tanque a Marshawn Lynch después de una pésima temporada en el 2015, pero eso fue detrás de una pobre línea ofensiva luego de cuatro años de trabajo pesado. Lynch está jugando detrás de la mejor línea ofensiva de la liga y tuvo un año de descanso; probablemente estará bien y podría ser fantástico. Lynch no necesitará tener 300 acarreos, pero los Raiders pueden pensar en utilizar a DeAndre Washington y Jalen Richard para mantener a Lynch en alrededor de 225 intentos de acarreos con la esperanza de tener un Beast Mode descansado en enero.

Amari Cooper y Michael Crabtree están entre las mejores parejas de receptores de la liga, aunque estaría un poco preocupado sobre los otros receptores de Oakland. Seth Roberts fue bastante ineficiente la temporada pasada, dejando caer el 9.1 por ciento de los pases en su dirección, empatando en el liderato de la liga entre receptores con Nelson Agholor. Jared Cook tiene una merecida reputación de pases dejados caer en momentos cruciales, mientras Lee Smith es un ala cerrada que se destaca por sus bloqueos. Debido a que Cooper y Crabtree han absorbido 276 y 277 intentos de pase en sus dos campañas juntos, estos receptores secundarios no son extremadamente importantes a menos que alguien se lesione.

Una de las pocas ventajas de tener problemas en una temporada por las lesiones es que tienes la oportunidad de ver lo que hay al fondo de tu plantilla. Los Chargers perdieron a Danny Woodhead, Keenan Allen y Stevie Johnson antes del final de septiembre la campaña pasada y si bien eso podría haber hundido a algunos equipos, Philip Rivers siguió haciendo jugadas. Melvin Gordon, tan decepcionante como novato, se destapó como caballito de batalla y promedió 24.3 toques por partido antes de lastimarse en diciembre. Tyrell Williams salió de la nada para registrar una temporada de 1,000 yardas. Dontrelle Inman jugó mejor que la adición de la agencia libre Travis Benjamin. Hunter Henry comenzó a hacerse cargo en lugar de Antonio Gates. Hubo mucho que pudo gustarles.

La preocupación en el 2017, desde luego, son más lesiones. Los Chargers ya están preocupados por su selección de primera ronda del draft Mike Williams, quien ha estado marginado desde la primera práctica del minicampamento por una lesión en la espalda. Allen se ha perdido 23 de los últimos 24 partidos y no ha jugado una temporada completa de 16 partidos como profesional. Gordon ha lidiado con lesiones de rodilla en cada uno de sus primeros dos años y hay poca profundidad en la posición de corredor. Gates tiene 37 años de edad. Los Chargers podrían ser una unidad del top-3 hasta que todos estén sanos, pero es ingenuo pensar que eso suceda.

Otro paquete de talento golpeado por las lesiones hace un año, los Bengals sólo pudieron ver a Tyler Eifert y A.J. Green alinear juntos en sólo tres partidos completos en el 2016. Promediaron 26 puntos en esos tres juegos y 19 puntos por encuentro en los otros 13. Giovani Bernard también se rompió el ligamento cruzado anterior y Jeremy Hill sufrió una lesión de rodilla hacia el final de la campaña. Para el final de la temporada, Andy Dalton estaba lanzando el balón a Brandon LaFell y Cody Core.

Los Bengals nunca gastan dinero en la agencia libre, pero adquirieron refuerzos en el draft. Luego de recontratar a LaFell, Cincy usó su selección de primera ronda en el velocista de Washington, John Ross, antes de tomar al criticado corredor de Oklahoma, Joe Mixon en la segunda vuelta. El recluta de segunda ronda del draft del año pasado Tyler Boyd debe lucir mejor, dejando a los Bengals cuatro receptores titulares viables, tres corredores útiles y un ala cerrada estelar en año contrato. Si Ross (quien se ha perdido toda la temporada baja tras someterse a una cirugía de hombro) y Mixon tienen impacto inmediato, los Bengals podrían ser una ofensiva cerca de ser imparable.

No es necesario recordarles a Ezekiel Elliott, quien fue el corredor más productivo de la liga como novato. Dez Bryant no ha estado en su nivel habitual en las últimas dos campañas, con lesiones limitándolo a 54.4 yardas recibidas por partidos luego de promediar 77.2 yardas por encuentro en sus primeras cuatro temporadas como titular. Debe estar sano luego de someterse a cirugía el año pasado, con el partido de 137 yardas y dos touchdowns que tuvo Dez contra los Packers en los playoffs es un recordatorio de lo que el ex recluta de primera ronda puede hacer.

Las cosas no son tan impresionantes detrás de los dos jugadores más importantes de Dallas. Jason Witten es un futuro miembro del Salón de la Fama, pero su total de recepciones se ha desplomado en tres de las últimas cuatro temporadas, y esa tendencia es improbable que se revierta ya que Witten cumplirá 35 años. Cole Beasley es un buen receptor de ranura, pero su índice de recepciones del 76.5 por ciento en el 2016 fue una marca personal. Terrance Williams sigue siendo anónimo; se le lanzó el balón en el 13.8 por ciento de sus rutas la campaña pasada, el sexto menor índice entre los receptores. Hay una gran brecha entre Zeke y Dez y el resto del equipo.

Los vieron quemando la liga la campaña pasada, ¿cierto? No lanzaron tantos pases a Julio Jones -- Matt Ryan le envió 74 pases menos en el 2016 que en el 2015-- y si bien parte de eso fue debido a una lesión, el cambio también se dio gracias a una ofensiva más equilibrada y exitosa. Los Falcons corrieron más el balón porque estaban ganando, pero el golpe de 1-2 de Devonta Freeman y Tevin Coleman también fue más eficiente. Ambos corredores están de vuelta y podría ser más sencillo mantener a Freeman a largo plazo gracias a Le'Veon Bell, quien rechazó una oferta multianual que habría estremecido el mercado de corredores.

Atlanta anotó 83 puntos durante los dos partidos de Jones alejado de la alineación, aunque fueron contra los Rams y 49ers e incluyeron un par de touchdowns defensivos. Los Falcons estarían en problemas si Jones sufre una lesión grave, pero tienen un buen cuerpo de receptores secundarios con Mohamed Sanu, la sensación de jugadas grandes Taylor Gabriel y Justin Hardy. Gabriel no será tan explosivo como fue hace un año, pero hay suficiente apoyo para cubrir si Jones no está al 100 por ciento. Austin Hooper se perfila como un ala cerrada prometedor, pero ese es el punto débil en esta unidad dominante.

Casi se ha vuelto una parodia, pero hay una gran cantidad de potencial entre la colección de talento en posiciones de habilidad de los Dolphins. No hay un trío más emocionante de receptores jóvenes en la liga que Jarvis Landry, DeVante Parker y Kenny Stills, quienes tienen 25 años de edad o menos. Parker podría elevarse como el más devastador de los tres, y si da un paso al frente en su tercer año, es difícil pensar en cómo van a cubrir los demás a estos chicos.

Miami fue afortunado en la posición de corredor, donde percibía algo de debilidad e intentó firmar a C.J. Anderson con una buena oferta calificada en marzo del 2016 antes de adquirir a Arian Foster en el verano. Los Broncos igualaron la oferta por Anderson y Foster se retiró, entregando el puesto a Jay Ajayi, quien anunció su llegada con partidos de 200 yardas consecutivas contra Buffalo en diciembre. Ajayi fue un poco más dependiente de jugadas grandes de lo que podría gustarte, pero es un corredor con un gran potencial.

Si el entrenador en jefe Adam Gase puede conseguir algo de Julius Thomas, quien anotó 24 touchdowns en dos años con él en Denver, esta ofensiva podría ser imparable. Ellos no van a explotar a menos que los Dolphins puedan jugar con dos balones, pero hay tanto talento que Miami no tendrá que depender que sólo un jugador tenga una gran temporada.

Los Steelers pueden levantar la mano y decir que tienen al mejor corredor y el mejor receptor de la liga. Es difícil contar que Le'Veon Bell juegue los 16 partidos, pero Bell se mantuvo sano a lo largo de su temporada de 12 partidos en el 2016 y promedió 157 yardas desde la línea de golpeo por partido. Los únicos jugadores en la historia de la liga en superar eso (en mínimo 10 partidos) son Priest Holmes en el 2002 y O.J. Simpson en 1975, y ninguno de ellos tuvo un receptor con tantos balones en su dirección como Antonio Brown con quien dividieran toques de balón.

Brown también se perdió la Semana 17 y tuvo su peor campaña desde su temporada de destape en el 2013, pero ¿alguien piensa de verdad que el cinco veces receptor de Pro Bowl es significativamente peor de lo que fue en las tres campañas previas? Lo único que podría reducir sus números es el regreso de Martavis Bryant, cuyo rendimiento equivalente del 2015 (incluyendo playoffs) representó 79 recepciones para 1,166 yardas y nueve touchdowns.

Una preocupación con los Steelers son las lesiones, una verdadera preocupación para Bell específicamente. DeAngelo Williams ya no está con el equipo, y no fue muy efectivo la campaña pasada; luego de un partido de 143 yardas contra Washington en la Semana 1, Williams corrió el balón subsecuentemente en 72 ocasiones y ganó apenas 200 yardas, promediando 3.5 yardas por acarreo. El novato de tercera ronda James Conner tiene una historia inspiradora y debería ser un buen corredor de contraste detrás de Bell, pero no es el receptor que Bell es. Sospecho que Bell está a punto de tener una temporada monstruosa en busca de contrato, pero su historial enciende las alarmas. Eso, y la ausencia de un ala cerrada útil que le abra la puerta.

Brandin Cooks es una adición perfecta para los Patriots por su agilidad y capacidad para salir y entrar en los cortes. El coordinador ofensivo Josh McDaniels va a tener un día de campo aislando a Cooks, Julian Edelman y Rob Gronkowski (¿lo recuerdan?) para pases completos sencillos y yardas después de sus recepciones. New England estará un poco peor en la posición de ala cerrada ya que reemplazará a Martellus Bennett con Dwayne Allen, pero los Patriots aún tienen al mejor ala cerrada N° 1 y el mejor ala cerrada N° 2 de la liga. Lo único de lo que carecen en la posición de receptor es una segunda amenaza a lo profundo para estirar a los equipos detrás de Chris Hogan, pero Malcolm Mitchell podría cubrir ese puesto.

Los Pats también son mejores en la posición de corredor y más profundos de lo que habían sido, con un par de opciones para corredor de poder (los eficientes recién firmados Mike Gillislee y Rex Burkhead) y corredor-receptor (James White y Dion Lewis). Es remarcable que los Patriots estén 17-0 con Lewis en la alineación y que podría no ser parte de la plantilla. Esta no va a ser una ofensiva que aterrorice a los equipos con fuerza campo abajo como Randy Moss y la versión 2007 de New England, sino que va a convertir en segunda y corto y tercera y corto una y otra vez hasta que las defensivas rivales colapsen.

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