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La Semana 11 confirmó lecciones respecto a los pasadores suplentes

MÉXICO -- Estimados amigos, contar con un buen mariscal de campo substituto puede hacer toda la diferencia.

Qué mejor ejemplo que los Dallas Cowboys, quienes sin Tony Romo padecieron durante las últimas 8 semanas 7 derrotas en fila.

Gracias a la mediocridad de su división y al regreso de Romo, los aficionados al equipo texano aún pueden soñar con calificar a los playoffs.

En esta semana, la N° 11 de la temporada, cuatro quarterbacks tuvieron su primera apertura de la campaña.

Denver venció a Chicago
Uno de esos pasadores debutantes fue Brock Osweiler quien sustituyó detrás del centro al futuro miembro del Salón de la Fama, Peyton Manning.

Sólo cuatro jugadas le tomó al joven mariscal de campo anotar su primer touchdown del año, al conectarse con Demaryius Thomas. Osweiler anotaría otro pase de anotación y la defensiva hizo lo suyo para frenar a los Bears, 17 a 15.

La tranquilidad y movilidad que mostró el debutante serian dos virtudes que destacaría del reemplazo de Manning.

Yates logra segunda victoria
Otro debutante como abridor y que salió con el brazo en alto fue T.J. Yates, quien el lunes pasado ingresó al campo por la lesión de Brian Hoyer para conducir a la victoria a los Texans sobre los Bengals, a quienes arrebataron la etiqueta de invictos.

Es más fácil hablar a "toro pasado" pero les he de decir sinceramente que a mí desde el debut de Yates hace dos años, me pareció un mariscal de campo con muchas facultades. En la humilde opinión de un servidor, Yates --quien nominalmente iniciaría la temporada como suplente para los Atlanta Falcons, antes de ser cortado y firmado nuevamente por Houston cuando decidieron deshacerse de Ryan Mallet-- debería permanecer con el puesto titular de los Texans.

Ni con el primero, ni con el segundo
Otro de los jugadores nominados a ser suplentes, pero que recibieron la responsabilidad para abrir el juego en esta Semana 11, fue Mark Sanchez.

El jugador de raíces mexicanas inicio el partido en sustitución de Sam Bradford, y su rendimiento estuvo muy por debajo de lo esperado.

Sanchez sufrió tres pases interceptados contra únicamente dos de anotación, números mediocres los del alguna vez estrella de la Universidad del Sur de California.

En descargo de Sánchez, el sistema que ha tratado de implementar Chip Kelly ha sido un auténtico fracaso. La ofensiva no ha logrado la efectividad ni el dinamismo que pretende, aunque la defensiva también ha dejado mucho que desear. Esta unidad aceptó 45 puntos de Tampa Bay.

Mención aparte para Jameis Winton, mariscal de campo de los Buccaneers, quien conectó para cinco pases de touchdown.

En honor a la verdad ni con Bradford habrían rescatado este partido los Eagles.

Kennum fracasó supliendo a Foles
St. Louis, que parecía un rival muy incómodo en la División Oeste de la Nacional, ha venido decepcionado a sus aficionados.

Este año, en un trueque con Philadelphia previo al arranque de la campaña, cambiaron a Bradford por Nick Foles.

Con números muy discretos en él año, Foles no jugó el partido ante Baltimore. Su lugar fue tomado por Casey Kannum, quien terminó con 136 yardas totales un touchdown, además de un porcentaje por debajo del 50 en pases completos; conectó apenas en 12 de 26 pases que intentó.

El valor de la experiencia
Finalmente, y aunque no fue un "debutante", Matt Hasselbeck con los Colts inició por tercera ocasión en el año un juego por el lesionado Andrew Luck.

Hasselback guio a Indianapolis a un triunfo muy trabajado sobre los Atlanta Falcons, por marcador de 24 a 21. De los cinco juegos ganados que tiene Indianapolis, tres los ha conseguido a través de su quarterback substituto.

Este caso en particular confirma que contar con un suplente de calidad puede no sólo significar ganar partidos, sino meterse incluso a los playoffs.