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Ronda histórica para los visitantes en los partidos de comodines

MÉXICO -- Amigos de ESPN, ha transcurrido la primera ronda de actividad en los playoffs de la NFL y cuatro campeones divisionales cayeron en esta jornada de fin de semana.

Más aún, los cuatro equipos visitantes se llevaron la victoria.

Sí, fue un fin de semana atípico. Claro, todo lo atípico que puede ser, y generalmente es, la NFL.

Si me lo permiten amigos, quisiera iniciar analizando junto con ustedes encuentros donde dos equipos dinamitaron sus posibilidades de ganar --y de hacerlo en casa-- lo cual lo hace más relevante.

La maldita costumbre de perder
Inexplicables resultan los últimos minutos del cuarto periodo en el duelo en que los Pittsburgh Steelers visitaban a los Cincinnati Bengals. Con el trabajo que les costó anotar a los Bengals y tomar la ventaja a menos de dos minutos del final, todo estaba “puesto” para que los dirigidos por Marvin Lewis rompieran con una maldición que ya data de un cuarto de siglo atrás.

La manera en que Pittsburgh --sin hacer mucho-- termina por llevarse es digna de análisis, pero no del juego, sino del psicoanalista.

El balón suelto perdido de Jeremy Hill que le devuelve la pelota a los Steelers cuando restaban 1:35 en el reloj, dando al traste con la primera victoria de postemporada para los Bengals en 25 años. El error en principio es de Lewis, el head coach de Cincinnati, quien con poco tiempo debería haber ordenado poner la rodilla en tierra hasta en tres ocasiones para que el reloj siguiera avanzando.

Es cierto, Pittsburgh tenía sus tres tiempos fuera, mismos que seguramente habría utilizado, pero Cincinnati estaba en rango de gol de campo y además de sumar puntos, hubieran dejado al rival sin tiempos por pedir.

Al margen de ese costoso error, vienen otro par errores que acaban por determinar el rumbo del partido. Primero, Vontaze Burfict le da a Antonio Brown uno de los golpes más sucios y abusivos que yo recuerde. El golpe a la cabeza es tan fuerte que antes de que Brown caiga al piso, ya está noqueado. Este castigo de 15 yardas en el partido deberá estar secundado por una fuerte multa para este jugador.

Adam 'Pacman' Jones termina de perjudicar a su equipo con otro castigo por actitud antideportiva. En total, 30 yardas de regalo para Pittsburgh en una jugada que había sido pase incompleto.

Cincinnati no sabe ganar en postemporada, y menos mientras se mantenga Lewis como head coach. Lewis lo único que te puede garantizar es pelear por la división. De ahí en fuera, Lewis no podrá avanzar.

El legendario entrenador Vince Lombardi, del cual ustedes seguramente han escuchado hablar, decía, "Ganar es un hábito, desafortunadamente, perder también lo es". Lewis ha hecho un doctorado en la materia.

Y que me perdonen los aficionados de Pittsburgh, pero para llegar al lugar donde se encuentra, los Steelers se han beneficiado de la mediocridad de dos equipos; los New York Jets primero y ahora los Bengals.

“Disparo" en el pie
En el otro partido en el que un equipo dinamitó sus posibilidades de llegar al juego divisional, fue la caída de los Minnesota Vikings ante Seattle Seahawks.

Intento de gol de campo de 27 yardas con 22 segundos en el reloj, mismo que se va a un costado de los postes. ¡Vaya manera de empeñarse en perder un juego!

Minnesota dominó en la primera mitad a los considerados muy peligrosos Seahawks. Para la segunda parte, Seattle, de la mano de su joven estrella Russell Wilson, consiguió una jugada grande que vino precedida de un error en la entrega de balón entre el centro y el propio Wilson. Quizá usted vio las imágenes de esa jugada en la que la jugada parecía rota, ocasionando balón suelto, pero la habilidad de Wilson le permitió recuperar la pelota y extender la jugada hasta encontrar a Tyler Lockett, quien se quedó a unas cuantas yardas de anotar. ¿Saben que es lo interesante? Que si la jugada se hubiera desarrollado como originalmente estaba planeada, seguramente no habría redituado tantas yardas.

Un equipo experimentado como Seattle se dio el lujo de parar al líder corredor de la liga, Adrian Peterson, en menos de 50 yardas. Mejor aún, provocó con Kam Chancellor un balón suelto al propio Peterson, que terminaría por traducirse en puntos.

El clima fue factor para un partido de tan pocos puntos, pero para los que creían que seria los Seahawks los más afectados, no fue así. Blair Walsh el pateador de lugar para Minnesota quedó congelado con su cuarto intento de gol de campo. Claro que echarle a culpa al gélido ambiente en Minneapolis no sería correcto. Fue más bien la presión la que le jugó una mala pasada.

Minnesota y Cincinnati, dos campeones divisionales que no "quisieron" ganar.

Recuperan la memoria
Del juego entre los Washington Redskins y Green Bay Packers, me gustaría resaltar el ataque terrestre de los segundos. Un ataque que durante la primera mitad solo alcanzó a producir 17 yardas, para la segunda redituó en un total de 124. Aaron Rogers se vio como el mariscal de campo de aquel equipo que inicio la temporada con récord de 6-0. La línea ofensiva, que tantas falencias tuvo en los últimos partidos de temporada regular, se reivindicó protegiendo y abriendo huecos.

La defensiva hizo lo suyo presionando, apretando y secando a la ofensiva de Washington, con todo y el mejor pasador en el rubro de porcentaje de envíos completos: Kirk Cousins.

La siguiente semana será más complicada para Seahawks y Packers; les toca visitar a los Carolina Panthers y Arizona Cardinals, respectivamente.

Finalmente, del duelo entre los Kansas City Chiefs y Houston Texans, poco qué resaltar. Kansas City fue mucho mejor en todos los rubros: a la ofensiva, defensiva y equipos especiales.

Un J.J Watt lesionado no fue factor en el encuentro.

Kansas City contra los New England Patriots, y Pittsburgh contra los Denver Broncos, son los duelos que podrán seguir a través del “Líder Mundial en Deportes”. Acompáñenos.