MILÁN -- El nuevo "equilibrio" del Real Madrid puntúa alto entre las preocupaciones de Diego Simeone de cara a la final de la Champions League que se disputará éste sábado en el estadio San Siro de Milán. Ese balance que los blancos han encontrado tiene nombre y apellido: Carlos Henrique Casemiro.
En la rueda de prensa previa al encuentro, el estratega rojiblanco opinó que Casemiro se ha convertido en el hombre más importante "para el equilibrio del Real Madrid. Sin ninguna duda".
Por enésima vez en la última semana, Simeone hizo hincapié en la relevancia del mediocampista brasileño para el equipo de Zinedine Zidane. Al argentino, que estudia a fondo a los rivales, no se le ha escapado el clamoroso detalle de que ha sido a raíz de la derrota por 1-0 del cuadro merengue ante su Atlético de Madrid que Zidane decidió dar un giro radical a su equipo.
A partir de entonces, el Real Madrid no volvió a perder en Liga y logró remontar 13 puntos y un puesto en la clasificación firmando la mejor racha de la segunda mitad de la temporada de las cinco grandes ligas europeas (12 victorias consecutivas) y más allá de un 'susto' tras una inesperada derrota ante el Wolfsburgo, alcanzó la final de la Champions League en una temporada que por allá de noviembre parecía perdida.
Simeone, contemporáneo en edad pero a años luz de experiencia desde los banquillos, no pudo más que reconocer tanto la inteligencia como el valor de su rival al dar semejante papel de "responsabilidad" a un jugador de 23 años, que está lejos de calificar como gancho mediático en el Real Madrid y que durante las gestiones anteriores había quedado relegado a un segundo plano.
"Zidane esta haciendo un trabajo importantísimo", afirmó Diego Simeone en rueda de prensa y no dudó en elogiar el 'valor' del francés para tomar la decisión de lavarle la cara al equipo merengue aún bajo la perene presión del palco presidencial del Santiago Bernabéu.
"Ha tomado la decisión de dar responsabilidad a Casemiro y eso ha cambiado al equipo. No se ha dejado llevar por otras situaciones y eso es importante", recalcó Simeone.
Zidane vivió de cerca aquella final de Lisboa en 2014 como segundo de Carlo Ancelotti y fue testigo del desplome merengue cuando perdió al último medio de contención que le quedaba con la marcha de Xabi Alonso.
Ya entonces, Ancelotti insistía que necesitaba a alguien que diera "equilibro" a su equipo, tan lleno de medios creativos pero sin un hombre que se encargara de iniciar la defensa desde la media o apuntalara al equipo cuando salía jugando. Dos años y dos destituciones después, con una temporada en blanco entremedias, el 'novato', con el ajuste adecuado, vino a demostrar que no era imposible de lograr.
"En los últimos cuatro años el Real Madrid ha jugado con un equipo muy parecido; nosotros hemos variado más en cuanto a jugadores. Desde las formas, no va a variar mucho. Repito: La presencia de Casemiro lo hace más peligroso a la contra y contra el Manchester City jugó así. Eso no significa que sea una mala situación. Al contrario, (Zidane) interpretó muy bien lo que le convenía y Madrid con espacios es muy peligroso", recalcó.