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Las finales de Higuaín

NUEVA JERSEY (Enviado especial) -- Si algo tienen en común las dos finales que perdió la Selección argentina en los últimos dos años, es la mala suerte. Tanto frente a Alemania como ante Chile, el equipo hizo méritos como para ganar pero cayó en el tiempo suplementario y en los penales respectivamente. Y, sin dudas, el nombre más asociado con ese infortunio es Gonzalo Higuaín.

En la Copa del Mundo, el delantero de Napoli falló un mano a mano clarísimo, festejó como válido un gol anulado, recibió un penal que no fue cobrado y fue reemplazado en el segundo tiempo. En la Copa América, no fue titular pero ingresó y tuvo la oportunidad del triunfo a segundos del cierre. Tras una gran jugada de Lionel Messi, el Pipita no llegó a definir y Argentina terminó otra vez subcampeón.

Por supuesto que Higuaín no fue el culpable de las derrotas ni mucho menos. Sin embargo, su figura quedó ligada a las frustraciones por estas acciones puntuales. Este domingo en Nueva Jersey, tiene la oportunidad de redimirse de la mejor manera: en una nueva final. Será su octava participación en el último partido de un torneo, pero quizás la más importante de todas.

Higuaín disputó su primera final en agosto de 2008, cuando comenzó su tercera temporada en Real Madrid con el título de la Supercopa de España. En aquella final, convirtió un gol en la victoria 4-2 sobre Valencia, que sirvió para asegurar la consagración.

En 2010/11, el equipo merengue logró la Copa del Rey después de 17 años sin poder conseguirlo. Lo hizo gracias a un gran triunfo 1-0 sobre Barcelona en Mestalla. El Pipita, quien venía de una larga lesión, se quedó en el banco de suplentes y no sumó minutos.

Su tercera participación en una final fue en la Supercopa de España 2012. Ingresó en reemplazo de Karim Benzema en la derrota 2-3 en el partido de ida en el Camp Nou y fue titular en la revancha. En aquella oportunidad, anotó uno de los dos goles del Merengue en el triunfo 2-1 en el Bernabéu. Ese resultado le alcanzó para consagrarse campeón.

En 2014 pasó a Napoli y en su temporada debut en el cuadro del sur de Italia consiguió un par de campeonatos. El primero fue la Copa Italia, en cuyo partido definitorio ante Fiorentina jugó como titular. El equipo napolitano ganó 3-1 y dio una vuelta olímpica muy postergada.

Pocos meses después, tuvo su mejor actuación en una final. En el duelo por la Supercopa de Italia, disputado a fines de 2014 en Qatar, Gonzalo marcó un doblete y Napoli empató 2-2 en los 120 minutos reglamentarios frente a la Juventus de Massimiliano Allegri. Luego, logró el trofeo en la definición por penales, en la que el centrodelantero argentino no falló.

Es necesario aclarar que este recorrido tiene que ver con sus participaciones en finales propiamente dichas. En sus más de diez años de carrera, Higuaín disputó decenas de partidos definitorios y hasta marcó goles que sirvieron para ganar ligas. Sin embargo, la comparación tiene sentido sólo cuando se hace sobre encuentros que terminarán con un campeón.

Con las camisetas de Real Madrid y Napoli, el Pipita ganó todas las finales que disputó. Hoy, ya es uno de los máximos goleadores de la historia de la Selección Argentina. Como a muchos de sus compañeros, sólo le queda conseguir un festejo grande. Él, más que nadie, sabe lo difícil que es y lo valioso que puede ser.