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A la gran final. Athletic Club de Bilbao volvió a ganarle a Atlético de Madrid, esta vez por 3-0 en San Mamés en la semifinal de vuelta y avanzó a la final de la Copa del Rey de España 2023/24. Venía de imponerse 1-0 en la ida como visitante y definirá el título contra Mallorca, que superó el martes por penales a Real Sociedad tras igualar 1-1 en tiempo reglamentario. El delantero ghanés Iñaki Williams abrió la cuenta este jueves con una formidable volea a los 13 minutos de juego, para la alegría de los vascos, tras recibir un pase de Nico Willilams desde la izquierda. Y a los 42 se invirtieron los papeles, ya que Iñaki desbordó por la derecha y se la dejó servida a Nico, ocho años menor, de 21, nacionalizado español, para que decretara el 2-0 y así deliraran sus hinchas en casa. Y la goleada la selló Gorka Guruzeta, a los 16 minutos del segundo tiempo. El anfitrión, conducido por Ernesto Valverde, fue superior al equipo dirigido por el argentino Diego Simeone y disputará la final de la Copa del Rey frente al Mallorca en el estadio La Cartuja de Sevilla, el sábado 6 de abril. Los hermanos Williams volvieron a brillar en el Athletic de Bilbao, contra el conjunto de Simeone, que tuvo como titulares a los argentinos Rodrigo De Paul, Nahuel Molina y Ángel Correa, campeones del mundo en Qatar 2022. El Athletic, segundo club con más títulos en la Copa del Rey, con 23, no logra ese trofeo desde 1984. Venía de dejar afuera a Eibar, Alavés y Barcelona. Por su parte, el Atlético de Madrid, ganador 10 veces de dicho certamen, la última en 2012, había eliminado a Lugo, su archirrival Real Madrid y Sevilla. Fue un gran mérito de ambos, porque superaron a los dos grandes de España: el conjunto de Bilbao sacó al Barca, máximo campeón de la Copa del Rey, con 31 títulos, y el Atlético venció al Real Madrid, con 20 copas en este torneo. Nuevamente fue triunfo del equipo bilbaíno y esta vez con la dupla de los hermanos Williams haciendo maravillas. El ganador llegó en varias ocasiones más en el segundo período y pudo ganar por una diferencia mayor, ante un adversario que buscó pero careció de fluidez en el juego y se vio claramente superado en toda la serie semifinal. Ellos guiaron a su sólido conjunto a otra final, en busca de cortar la sequía de 40 años sin gritar campeón en la Copa del Rey y obtener ese torneo por 24ª vez. En tanto, el Mallorca busca su segundo éxito, tras el conseguido en 2003. Será, sin dudas, una definición especial.
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