<
>

Leicester, del infierno a la gloria eterna

BUENOS AIRES -- El 21 de marzo de 2015, Leicester City perdió 4-3 frente a Tottenham Hotspurs en White Hart Lane y quedó último en la tabla de la Premier League, casi condenado al descenso. De los 29 partidos disputados hasta ese momento, había perdido 18 y la mayoría de los hinchas ya pensaba más en cómo sería la temporada siguiente en la segunda división que en el triste presente. Sin embargo, por alguna misteriosa razón, ese día algo cambió para siempre. Tras aquella derrota en Londres, Leicester ganó 29 encuentros, empató 11 y sólo perdió 4 e hizo posible la hazaña más impresionante del fútbol moderno y una de las más grandes de todos los tiempos.

"¿Qué necesitas para llegar?, ¿Un gran nombre? No. ¿Un gran contrato? No. Solo necesitas abrir la mente, abrir el corazón, una batería cargada y correr con libertad". Quizás sin proponérselo, Claudio Ranieri se convirtió en el símbolo de los humildes que logran romper todas las barreras gracias al esfuerzo colectivo. Hace algunas semanas, publicó una carta en la que contó los secretos del equipo que hoy es campeón de la Liga más prestigiosa del planeta. "Sueñen por nosotros. Nosotros no soñamos. Simplemente trabajamos duro", les pidió a los hinchas. Esa fue la receta: trabajar. Tan simple como eso.

Ranieri llegó a comienzos de temporada, después de un gran fracaso con la Selección de Grecia. Algunos pensaban que la decisión de la dirigencia era demasiado arriesgada. Nigel Pearson, un hombre adorado por todos en la ciudad, se iba después de haber cumplido el objetivo de salvar la categoría y quien lo reemplazaba era un veterano entrenador con poco conocimiento de la Liga y menos aún del club. Pero el italiano mantuvo el nivel de los últimos partidos de Pearson e hizo lo que debe hacer todo DT: llevar a cada futbolista a su mejor nivel individual. Los once titulares jamás jugaron tan bien como en estos últimos diez meses.

Hace siete años, Leicester City estaba en la League One, la tercera división de Inglaterra. En 2009 logró el ascenso al Championship y en 2014 regresó a la Premier League tras más de una década en el ascenso. Los Zorros jugaron más tiempo en la Segunda que en la división de honor: 62 temporadas contra 48. Por supuesto, el título logrado en ------- es el más importante a nivel nacional. Tres veces ganó la Copa de la Liga: en 1964, 1997 y 2000 y una vez la Charity Shield, en 1971. Además, cuatro veces fue subcampeón de la FA Cup y una vez de la Liga: en 1929.

Los antecedentes sirven para intentar entender un poco mejor la trascendencia de este éxito, aunque está claro que la cercanía hace imposible comprender a la perfección la magnitud del acontecimiento. Es muy difícil equiparar lo hecho por este plantel con otro club en un campeonato largo del nivel del inglés. Quizás las gestas de Quilmes en 1978 en Argentina, o de Ipswich Town en 1951 en Inglaterra pueden acercarse, mas ninguno de estos dos campeones comenzó el torneo tan lejos de los candidatos. Porque el único objetivo de Leicester hace once meses era mantener la categoría. Ese era la verdadera meta de Ranieri.

El cuento de hadas comenzó el 8 de agosto de 2015, cuando Leicester City venció 4-2 a Sunderland en el estadio King Power. Jamie Vardy convirtió el primer gol, Riyad Mahrez anotó un doblete y Marc Albrighton cerró la cuenta. Fue un muy buen inicio, gracias al cual el plantel se llenó de confianza. Que los autores de los primeros tantos hayan sido Vardy y Mahrez no es una casualidad, sino una especie de guiño cósmico, Este equipo no hubiera sido campeón si Vardy y Mahrez no hubiesen jugado juntos. Personificaron la rebeldía y el esfuerzo que llevó a Leicester a la gloria.

A principios de esta década, Vardy jugaba en un equipo amateur llamado Stocksbridge Park Steels y trabajaba en una fábrica de férulas. En 2010 fue fichado por Halifax Town y un año después llegó a Fleetwood Town, de la quinta división, En 2012, cuando tenía 25 años, Leicester pagó un millón de libras por su pase y el actual goleador de la Premier se convirtió en el futbolista más caro de la "Non-League", Su explosión llegó casi a los treinta años y hoy es una de las principales armas de Inglaterra para la Euro. Sí, otra historia que además es un símbolo.

Por su parte, Mahrez también comenzó su carrera en el fútbol de ascenso, donde se destacó hasta 2014, cuando lo fichó Leicester. "Yo no sabía lo que era, pensé que era un club de rugby", afirmó el mejor jugador de Inglaterra hace poco tiempo, cuando recordó su llegada a los Zorros. El mediocampista argelino le da el toque de distinción a un conjunto que lucha más de lo que juega pero que tiene la capacidad de reinventase si el partido así lo requiere. Mahrez jugó e hizo jugar, marcó goles y los sirvió. Es el hombre clave de esta historia.

El estilo de juego es muy simple: un arquero en gran nivel, cuatro defensores sólidos, mediocampistas fuertes y precisos, un delantero con ida y vuelta y un goleador letal. Es un equipo sin misterios, sin dobleces, muy claro en sus conceptos y muy consciente de sus defectos y virtudes. En Leicester no hay ninguna idea táctica revolucionaria. No tiene grandes estrellas (o por lo menos no las tenía cuando arrancó la temporada) y genera simpatía más por aquello del humilde que le gana a los poderosos que por su juego vistoso. Y no es poco.

De todos modos, es un error decir que el flamante campeón de la Premier League es un club "pobre". En agosto de 2010, el tailandés Vichai Srivaddhanaprabha (dueño del consorcio King Power) le compró el club al empresario serbio Milan Mandaric por 58 millones de euros. A la luz de los hechos, hizo un negocio fenomenal, porque hoy vale mucho más del doble. Aunque no gastó ni por asomo lo mismo que sus colegas rusos o árabes, supo cómo invertir el dinero y realizó contrataciones que dieron muchas satisfacciones, como Fuchs, Inler, Kanté, Huth, Okazaki y Dyer. A comienzos del año, el plantel valía seis veces menos que el campeón anterior Chelsea. Así de grande era la brecha.

Leicester City es campeón de Inglaterra. Ganó la Premier League de punta a punta, sin discusiones. Su leyenda ya está escrita, pero hoy no se puede mensurar. Dentro de muchos años, este cuento de hadas servirá para explicarle a un niño que todo es posible en la vida.