MÉXICO -- Pumas viajó con plantel completo a Veracruz en busca de sumar sus primeros puntos en la Liguilla del Apertura 2015. “Será un partido intenso y tenemos que demostrar por qué el equipo quedó en el primer lugar del torneo; sin embargo, el superliderato solo sirve como criterio de desempate y para recibir el segundo partido como local. Fuera de eso hay que demostrarlo en cancha”, manifestó el goleador Eduardo Herrera.
En el aeropuerto Benito Juárez, Lalo dijo que es momento de poner de manifiesto la regularidad que ha tenido el equipo, “esa solidez, tanto ofensiva como defensivamente; pero es un hecho que en esta fase todos los equipos llegan con las mismas posibilidades de avanzar a la siguiente fase. Veracruz será un rival muy complicado”.
Dijo que la maldición del superlíder en el seno de Pumas no se toma en consideración. “Simplemente nos enfocamos en los cuartos de final. Seguramente que Veracruz jugará a tope como lo hacen los equipos de Carlos Reinoso. Sabemos que hay que hacer un juego bastante bueno para luego cerrar bien en CU”.
NO SE CARGAN PRESIÓN EXTRA
El portero Alejandro ‘Pikolín’ Palacios comentó que inicia la mejor parte del torneo y esperan seguir por el camino del éxito. “Nos tocó un rival que hizo muy bien las cosas y trataremos de hacer un buen juego”.
Señaló que el encuentro del jueves será muy diferente al del torneo regular, cuando Pumas goleó a los jarochos. “Cambian las circunstancias, es liguilla, hay más presión y en juego está el pase a semifinales”.
En cuanto a que el superlíder suele no llegar lejos en la fiesta grande comentó Palacios que deben tomarlo por el lado positivo. “La ventaja es que nos permite cerrar en casa todos los partidos. Tenemos que demostrar por qué fuimos los mejores, sin cargarnos presión extra. Vamos a disfrutar la liguilla”.
LOS DOS, CON PODER OFENSIVO
Antonio Sancho, vicepresidente deportivo del club, acompañó al equipo a Veracruz. Se mostró optimista: “Trataremos en sacar un buen resultado. No sé si será un partido de goles; eso se verá en el trascurso de los 90 minutos. Los dos equipos tienen poder ofensivo”.
Los auriazules entrenaron en Ciudad Universitaria y luego comieron en el hotel de concentración, donde estará su trinchera hasta jugar el último partido de la fiesta grande.