MADRID -- Real Madrid enfrenta un reto único en el Mundial de Clubes de la FIFA: Volver a casa proclamándose como el cuadro merengue más ganador de la historia. De conquistar el título en Emiratos Árabes Unidos obtendría la quinta corona en un año natural después de conquistar LaLiga, Champions, Supercopa de Europa y Supercopa de España.
También sería la primera ocasión que Real Madrid refrenda el título del certamen de clubes de la FIFA e igualaría a Barcelona como máximo ganador del torneo con tres campeonatos.
Por su parte, Cristiano Ronaldo, empatado a cinco tantos con Luis Suárez, Lionel Messi y el 'Chelito' Delgado, podría convertirse en el máximo goleador en solitario de la competición - y el único jugador en conquistar el título cuatro veces.
En España, sin embargo, apenas causa expectación.
El mar de dudas en que se sumergió el equipo merengue no deja lugar a distracciones. Aunque el título 'reivindicaría' su deslucida primera mitad de campaña, en la capital española la atención se centra en el clásico del próximo 23 de diciembre.
Menos de 500 aficionados merengues viajaron desde Madrid para asistir al encuentro - miembros de la grada fans instaurada por la directiva a quienes el club ha financiado las entradas.
En el pronóstico más optimista, el club calcula que habrá aproximadamente mil aficionados merengues entre los cerca de 35 mil asistentes que se esperan para el encuentro que se disputará el miércoles en el Zayed Sports City Stadium de Abu Dhabi; la mayoría pertenecientes a grupos de aficionados locales.
Sin un rival de gran atractivo en el horizonte, la expectación en el Mundial de Clubes pasa, mayoritariamente, por preocupación. Tanto por el riesgo de lesiones entre un equipo que ha sufrido ya una veintena esta temporada, como una eventual sanción. Factores que pueden tener un impacto directo en el encuentro de Liga del próximo 23 de diciembre.
Según el código disciplinario de la FIFA, cualquier jugador que vea una tarjeta roja deberá cumplir sanción en el "siguiente partido oficial" del club.
Según las palabras del segundo capitán Marcelo, la posibilidad de perderse el clásico por sanción, no condicionará la manera en que el equipo hará frente a la final, en caso de llegar -- si bien dejó ver que le parece un tanto injusto ya que "estar en el Mundial de Clubes es un premio por haber ganado Champions" y no debería tener relación con el torneo doméstico.
"Son dos competiciones diferentes y me parece fuerte", apuntó Zidane, que solo puede esperar que "no pase nada". Sin embargo, el temor de perder a un hombre importante persiste en Madrid.
Y es que se espera que, tal y como lo hizo el año pasado, Zinedine Zidane salga a defender el título con lo mejor que tiene a su disposición. Keylor Navas, Dani Carvajal, Sergio Ramos, Nacho, Marcelo, Modric, Kroos, Casemiro, Isco, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema se perfilan como titulares, aunque no sería raro que alguno de los mediocampistas tenga 'descanso' y entre Mateo Kovacic en su lugar. O bien, que eche mano de Marco Asensio para liberar a Isco.
El técnico viajó con plantel completo, incluyendo a Jesús Vallejo, que ni siquiera está inscrito en la competición, y es probable que de minutos a los recientemente recuperados Gareth Bale y Raphael Varane -- ya sea en la segunda parte frente al Al Jazira o en una eventual final-- con la intención de que lleguen con algo de rodaje al clásico navideño.