Cumplió con los pronósticos

BUENOS AIRES (DyN) -- Con dos golazos de tiro libre de Juan Román Riquelme, la figura de la cancha, y algunos pasajes de fútbol interesante, el seleccionado argentino de fútbol derrotó el sábado al de Chile 2-0 en un colmado Monumental y comenzó con el pie derecho las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Sudáfrica 2010.

Sin embargo, la sencilla victoria conseguida ante los conducidos por Marcelo Bielsa no podrá ocultar algunas falencias que mostró el equipo de Alfio Basile, como ciertos desacoples defensivos y una dosis de descompensación en el mediocampo.

Pagaron su entrada 46.067 personas, por lo que se recaudaron 1.981.916 pesos.

El próximo compromiso para el conjunto de la AFA es inmediato, ya que el martes se visitará a los venezolanos en Maracaibo.

Hasta los 26 minutos del primer tiempo, cuando con un espectacular derechazo Riquelme puso el 1-0 en favor de Argentina, el equipo dirigido por Alfio Basile se mostraba impotente porque era incapaz de superar el vallado humano que colocó Chile en su campo para proteger al arquero Claudio Bravo.

Durante esa lapso el teórico circuito que tenían que armar Riquelme, Lionel Messi y Carlos Tevez no funcionó en ningún momento debido a lo acertado que estuvieron los chilenos, erspecialmente Manuel Iturra, para cortarlo.

Chile vio que la Argentina no podía complicarlo y entonces se decidió a arriesgar y para hacerlo utilizó el sector derecho de su ataque, donde Eduardo Rubio y Humberto Suazo le craron muchos problemas a Gabriel Heinze y a Gabriel Milito.

Por ese sector, justamente, llegó la primera jugada de peligro del partido. Suazo tiró un centro que se fue abriendo y en la puerta del área grande Arturo Vidal sacó un remate bajo que Roberto Abbondanzieri solucionó sin dificultades.

La Argentina respondió inmediatamente y a los 7 minutos Riquelme metió un derechazo que se fue pegado al palo derecho de Bravo.

Hasta ese momento del partido sólo podía decirse que era parejo, peleado y muy discreto. Es más, hasta los 25 minutos las figuras en Argentina eran Javier Zanetti, quien desbordaba a los defensores chilenos con sus corridas por la derecha, y Javier Mascherano, quien controló sin inconvenientes al supuesto creador de fútbol de Chile, Matías Fernández.

Pero a los 26 llegó el gol de Riquelme y el cotejo se abrió. El astro en conflicto con el Villarreal tuvo más espacio para moverse y Messi, con su velocidad, comenzó a desequilibrar más seguido a los defensores de la roja.

El 1-0 pareció el resultado adecuado, pero en el último minuto Iturra le cometió una infracción a Riquelme tres metros afuera del área grande, el jugador del Submarino Amarillo se paró frente a la pelota y sacó otro derechazo, que al igual que el primero, se metió pegado junto al palo derecho de Bravo, quien sólo volvió a mirar.

Como se preveía, el segundo período se jugó prácticamente por compromiso. Bielsa intentó algunas solución con el ingreso del experimentado artillero Marcelo Salas, pero fue demasiado poco porque Chile de ninguna manera logró controlar a los argentinos cuando tomaron la pelota en la mitad de la cancha.

Esta imagen se vio todavía más nítida a los 8 minutos cuando Cristian Alvarez, quien poco antes había sido amonestado por tocar la pelota con la mano, golpeó a Mascherano para irse expulsado y dejar definitivamente a Chile lejos de la posibilidad del descuento.

Un disparo de Messi que se desvió en un defensor y pegó en el palo izquierdo de Bravo, un remate de Tevez que pasó por encima del travesaño y un envío de Esteban Cambiasso que tapó el arquero fueron algunas posibilidades que tuvieron los albicelestes en la segunda parte para aumentar la ventaja.

Argentina cumplió y derrotó a Chile 2-0 iniciando con un esperable éxito su camino en las Eliminatorias. Y estuvo bien, eso es indiscutible.