UDG desciende pese a ganar y eliminar a Cruz Azul

Mexsport

MÉXICO (Iván Cañada/ESPN.com.mx) -- En el Azul no hubo más que lamentos. Tanto de los ganadores como de los perdedores, situación rara en el deporte. Unos, porque ni con el que fue su mejor exhibición en el año futbolístico, se lograron quedar, y otros porque volvieron a hacer una de las suyas, al perder en su última oportunidad un boleto para seguir en la lucha por el campeonato. Leones ganó y descendió, Cruz Azul perdió y quedó eliminado. Una noche triste en el feudo celeste.

La U de G dio uno de esos partidos que debió conseguir en más de una ocasión. Concentración al límite, puños apretados. Era el juego de sus vidas. El de la permanencia en Primera o la visita al infierno del descenso. Lo hicieron todo. Nada por recriminar. Lo malo es que ya fue muy tarde.

Cruz Azul, por su parte, simplemente fue La Máquina que se le conoce de 1998 en adelante. En diciembre del 97 vivieron su última gran gloria en Liga y ahí se quedó estancada la época de festejos. A partir de ese momento no se recuerdan más que situaciones bochornosas que conforme pasa el tiempo, parece que son peores.

En esta ocasión tenían todo a favor para poder quedarse entre los ocho primeros lugares y mantenerse en la lucha por el campeonato. Lo raro del asunto es que cuando tienen ese tipo de panoramas es cuando menos saben que hacer y cómo reaccionar. La Máquina pierde el rumbo, se desconcentra fácilmente y es víctima de sus propios yerros.

Contra Leones no fue la excepción. Las sensaciones en el estadio, de inicio, no ean tan positivas. Entre la afición ya había murmuros sobre lo que significaría perder ante el equipo que estaba por descender. Algunos no dudaban que eso fuera a pasar.

Fue cuestión de que pasaran 18 minutos para ver el peor panorama vuelto realidad, gracias a que Jonathan Gonzáles aprovechó un pelotazo para encarar a Corona y vencerlo. Cruz Azul ya estaba contra las cuerdas, en una situación ante la que no sabe reaccionar habitualmente. Y así fue...

Los intentos estuvieron, la contundencia no. Ni siquiera con un delantero letal como Roque Santa Cruz que falló en sus ocasiones más claras. Había intención, pero no convicción. No de todos. Algunos tenían más ganas, como Christian Giménez, pero su euforia fue demasiada como para salir expulsado en el ocaso del primer tiempo. Segundo golpe en seco para los celestes.

Para el complemento ya fueron puros intentos sin razón, tirados a la basura. Leones hizo lo que debió hacer muchas veces, pero aún así no alcanzó. Mantuvo el cero en el arco e incrementó su ventaja. Tremenda noticia para un equipo que solo en dos ocasiones en 34 partidos anotó más de un gol en un mismo partido.

Gonzáles consiguió el segundo tanto y su equipo se murió en la raya. Lo ocurrido en Torreón no fue suficiente para quedarse en Primera. Una victoria con sabor a derrota, a una que quisieron evitar en todo un año, pero que al final llegó, mientras que Cruz Azul sigue con su cosecha de tropiezos en una Liga que no sabe ganar.