El Espanyol se estrena con victoria

BARCELONA (Jordi Blanco, corresponsal) -- Tres años después el Espanyol marcó un gol de falta directa. Y este gol, anotado en su primer disparo por Salva Sevilla, le bastó al equipo blanquiazul para comenzar ganando la Liga. Y para presentarse, aunque sólo fuera por unos minutos, como el primer líder en solitario del campeonato.

Un liderato efímero y poco argumentado futbolísticamente hablando. No se había llegado al minuto tres de partido cuando Salva Sevilla batió a Guaita con un excelente lanzamiento directo que provocó la euforia en los poco más de 16 mil aficionados periquitos que se dieron cita en el estadio del Espanyol.

De entrada marcó Salva Sevilla y de salida, en tiempo añadido, superado el minuto 90, Álvaro malogró un empate que mereció el Getafe y que le dio la primera y sufrida victoria a los periquitos.

Comenzó tan bien la tarde en el Power8 Stadium que la suma de los tres primeros puntos supo después a poco, puesto que el equipo de Sergio González no ofreció mucho a sus incondicionales, ilusionados por la incorporación de Asensio en la misma medida que asustados por la marcha de futbolistas de la talla de Sergio García, Kiko Casilla o Héctor Moreno.

Condenado por sus carencias financieras, el Espanyol se reinventa cada verano con la esperanza de acertar en sus apuestas y aunque no alcance la excelencia perseguida, sobrevive con orgullo. Así desarrolló la pasada temporada y así comenzó la presente.

Marcó pronto y se convirtió en una copia de aquel equipo guerrero de Javier Aguirre, superado en futbol por el Getafe pero plantándole cara en el césped, orgulloso y entregados todos los futbolistas a la causa. De hecho, acabó encerrado en su propia área, donde Pau dio la sensación de estar en el buen camino para convertirse en un digno sucesor de Casilla.

A la vista del calendario, que le llevará a Villarreal la próxima jornada antes de que el Real Madrid visite Cornellà, la victoria frente al Getafe, sin ser para nada urgente o necesaria, se contemplaba en el vestuario periquito trascendente. Comenzar con buen pie para no sufrir de buenas a primeras. Conseguido.

La hinchada del Espanyol se quedó con las ganas de ver el debut de Asensio pero abandonó el estadio con la tranquilidad de descubrir un equipo con la misma ambición del pasado. Probablemente sea un equipo inferior al de la última campaña, pero puede igualarle si mantiene firme su predisposición y su espíritu.

De entrada se convirtió en el primer líder de la Liga. Un premio enorme a la vista de cómo acabó sufriendo ante el Getafe.