Isco condujo la remontada del Málaga en Valencia, frente a Levante

VALENCIA -- Dos goles de Isco dieron la victoria al Málaga en su visita al Levante, ya que el equipo andaluz fue capaz de remontar el tanto inicial del conjunto local en un partido que tuvo un primer tiempo nivelado y una segunda mitad en la que el Málaga supo maniatar a su oponente.

Quizá el castigo de la derrota fue excesivo para los levantinistas, pero el Málaga sufrió más en el primer periodo que en el segundo de un encuentro en el que el equipo valenciano aspiraba a empatar en la tabla con su rival y que acabó con una ventaja de seis puntos para el conjunto andaluz.

El Málaga supo, sobre todo en la segunda parte, imponer su calidad ante un Levante que ni tan siquiera fue en los minutos finales el equipo aguerrido y competitivo que ha sacado resultados favorables en casa en alguno de los últimos partidos.

La primera parte fue muy pareja entre dos equipos con un fútbol trabajado, en la que el Levante tuvo más ocasiones de gol que su rival, aunque del Málaga tuvo más el balón.

El Levante, como es habitual, cedió terreno y buscó espacios para sorprender al Málaga a la contra y lo consiguió en un par de ocasiones, la primera en un cabezazo de Rubén ante el que Willy hizo una gran parada y más tarde en una galopada de Martins que puso en peligro la meta visitante.

Cerca de la media hora, un empujón de Demichelis sobre Martins fue castigo con penalti. Barkero hizo el 1-0 y diez minutos después otro empujón, esta vez de Lell sobre Baptista, permitió que Isco empatara el encuentro también al lanzar una pena máxima.

En el primer periodo, el Levante fue ligeramente superior a su rival y supo encontrar espacios para la contra, ante un Málaga que sufrió en defensa, creó con calidad en el centro del campo, pero apenas tuvo remate.

La segunda parte empezó con el 1-2, marcado por Isco en la primera jugada de la reanudación, lo que cambió el ritmo del encuentro, ya que el equipo andaluz se asentó y obligó a su rival a llevar la iniciativa, algo que al Levante le costaba mucho conseguir.

El Málaga tejió su madeja en el centro del campo, hubo muchas interrupciones en el juego y al Levante le faltaron ideas para contrarrestar a su rival, en una fase del encuentro en la que el juego no tuvo ritmo, lo que favorecía al equipo visitante.

El Levante, con más garra que juego, se acercaba esporádicamente a la meta de Willy Caballero, pero los minutos jugaban a favor del Málaga que, sobre todo por la banda derecha, conseguía crear problemas a la retaguardia levantinista.

A medida que se acercaba el final del encuentro, el esfuerzo físico pasó factura al Levante, que no encontraba espacios para optar al empate a pesar de que dispuso de alguna tímida ocasión de gol ante un rival que manejó bien el encuentro y que demostró que tiene jugadores de mucha calidad.