Apareció en el momento justo

HANOVER (AP) -- Los "viejitos" de Francia todavía tienen algo que decir. Francia desbarató los pronósticos el martes al derrotar 3-1 a España con goles de sus veteranos Patrick Vieira y Zinedine Zidane en los últimos seis minutos del partido y avanzó a los cuartos de final de la Copa Mundial.

David Villa puso a España arriba de penal a los 28 minutos y Francia respondió con tantos de Franck Ribery a los 41, Vieira a los 84 y Zidane a los 91.

Francia enfrentará a Brasil el sábado por el pase a las semifinales.

España había sido uno de los mejores equipos de la primera ronda y uno de los pocos que ganó sus tres partidos, mientras que Francia se clasificó con lo justo, con dos empates y una victoria ante Togo.

En la cancha, sin embargo, no se notaron esas diferencias.

Españoles y franceses protagonizaron un partido intenso, de contrastes, en el que los ibéricos hicieron un fútbol pulido y trataron de llegar tocando, mientras que los galos buscaron el pelotazo para Thierry Henry, el único delantero neto que alineó su técnico Raymond Domenech.

Impulsada por un Xavi en gran noche, España tomó la iniciativa y mantuvo ocupada a la zaga francesa. Fernando Torres se mostró muy activo arriba y las subidas de los laterales Sergio Ramos y Mariano Pernía generaron zozobra.

La defensa francesa, no obstante, respondió bien y, con un fútbol mucho más mezquino, Francia tuvo la primera jugada de gol del partido, cuando Zidane le abrió el balón a Henry por la derecha y el delantero del Arsenal sacó un centro bajo envenenado para la entrada de Ribery y Patrick Vieira. Sin embargo, ninguno de los dos alcanzó pellizcar el balón.

El predominio español rindió dividendos poco antes de la media hora, en que Lilliam Thuram bajó a Pablo Ibáñez dentro del área y el árbitro italiano Roberto Rosetti no dudó en pitar el penal. Villa lo ejecutó magistralmente y anotó con un remate fuerte, rasante, junto al poste derecho de Fabien Barthez, quien le adivinó la intención pero no pudo llegar al balón.

Francia siguió insistiendo en la búsqueda de Henry con pelotazos al medio, que la zaga española controlaba fácilmente dando un paso adelante y dejando al atacante fuera de juego. Pero los franceses burlaron esa trampa al final del primer tiempo y empataron el partido.

La última línea española se confió al dejar a Henry fuera de lugar y lo pagó caro, ya que Vieira buscó a Ribery, quien picó desde atrás totalmente solo ante la sorpresa de los hispanos. Ribery eludió a Iker Casillas y anotó con el arco vacío.

El partido sufrió un giro inesperado en el complemento, en que se invirtieron los papeles: los franceses se adelantaron y le arrebataron el control del mediocampo a su rival.

Francia casi aumenta a poco de reanudado el partido, en que volvió a aprovecharse del adelantamiento de la última línea española y Zidane dejó solo a Florent Malouda, quien tiró por sobre la salida de Iker Casillas. El arquero, no obstante, alcanzó a manotear el balón.

En Francia creció la figura de Ribery, quien enloqueció a Pernía por la derecha y peleó balones en el medio como un león. Una pelota rasante suya desde el costado puso de pie a las tribunas, pero no encontró nadie que la metiera.

Los ingresos de Luis García, Joaquín y Marcos Senna le dieron nuevo aire a España y Joaquín se hizo ver con una buena jugada individual coronada con un remate bajo que pasó muy cerca de un poste.

Sin embargo, fue Francia la que tuvo la última palabra. A seis minutos del final, la defensa española no pudo despejar un tiro libre de Zidane y Vieira anotó de cabeza.

Y ya en tiempo de descuento, Zidane marcó el tercero de contregolpe, eludiendo a un rival dentro del área y fusilando a Casillas.