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El proyecto es magno. Un palacio para el equipo que Vergara pretende sea uno de los más importantes del mundo. Es tan impactante, que resulta difícil descifrar si la nueva casa de las Chivas es un volcán con un estadio adentro, o un estadio con un volcán de fachada. O de si eso que tiene arriba, y que parece un ovni es un techo, una pantalla de proyecciones o un zeppellin.

Pero la pregunta más importante al ver lo que será la construcción más moderna en el deporte nacional, es: ¿esto es real? Según Jorge Vergara sí, y está muy cerca de entrar en el terreno de la materialización.

Es el nuevo estadio de Chivas, cuya etapa de diseño y planificación ha terminado con las maquetas entregadas hace un par de días en Londres por el diseñador francés Jean Marie Massaud, y que el empresario mostró para los lectores de RÉCORD.

A simple vista parece una más de las que, para muchos, sólo son locuras de Vergara, pues, de acuerdo a lo que presenta la maqueta, si se observa desde afuera no es un estadio de futbol, sino un verdadero volcán artificial recubierto de vegetación, que en su interior tendrá espacio para 55 mil aficionados y que contará con tecnología de punta y los mayores lujos y comodidades posibles.

El diseño es ambicioso, vaya, es único en el mundo. Responde a la inquietud del empresario tapatío por mezclar la modernidad y el respeto al medio ambiente, por lo que las áreas verdes serán el principal ornato del inmueble, que se espera albergará al Guadalajara a partir del 2006.

El 'Vulcano Stadium', como se llama ahora, o por lo menos es así como lo reconocen sus autores, estaría ubicado en los terrenos del centro JVC (Jorge Vergara Cabrera, nombre del padre del empresario), que ya son propiedad de Vergara, situados en la salida de Guadalajara rumbo a Nogales. Su construcción comenzaría a partir del mes de diciembre del año en curso, contemplando su terminación para finales del 2005 o principios del 2006, con la idea de celebrar ahí, en la nueva casa chiva, la fiesta del Centenario rojiblanco.

EL TECHO ES LO MÁS IMPORTANTE

Además de la original construcción, la novedad más vistosa, e impresionante, como si lo demás no lo fuera, es el techo, el cual es una especie de zeppellin, compuesto de un material traslúcido, muy moderno, que tendrá la capacidad de cubrir por completo el área del estadio, o retraerse para quedar como una especie de dona alrededor de las tribunas.

Cuando el escenario sea empleado en partidos nocturnos, en conciertos o eventos especiales, esa misma superficie podrá ser utilizada como una inmensa pantalla de proyección, ya sea de imágenes, o simplemente de luces multicolores, que lo harían parecer como un foco gigante.